LA FERIA Y LOS LIBROS. ENCUENTROS. MARIANO CARIÑENA Y SU DESEO DE PONER EN ESCENA LA "COMEDIA TESORINA". ¿NECESITA UN APOYO? HABRÁ QUE ENTERARSE.
Bellezas de todo el mundo se acercan a nuestra Feria del Libro. Estas misses chinas saludaban esta mañana desde la caseta de la Institución Fernando el Católico, que por una vez ampara un simpñatico acto para todos los públicos. La caseta de las Prensas Universitarias se ha "picado" y anuncia actos más insólitos todavía entre los volúmenes de su sapiencial colección.
La Feria del Libro caliente es un lugar estupendo para encontrarte con personas estupendas. También hay algún libro estupendo, y se pueden ojear y hojear. Incluso está permitido comprar. Hay quien dice que van mal las economías de las ventas en la Feria: ¿será cierto? ¿No sacan lo suficiente para que les merezca la pena el esfuerzo? Porque esfuerzo es para cualquier librer@ abrir la caseta. L@s paseantes no pierden nada, sino al contrario, pero l@s comerciantes ya es otra cosa. Esperemos que las cuentas finales sean positivas y cundan las sonrisas de satisfacción en el gremio.
El otro día tuve la fortuna de poder hacerme con los marcapáginas de los que ha fabricado el Centro Dramático de Aragón con obra plástica de pintores aragoneses como Anós, Larroy, Abrain... Pero entre estos marcapáginas hay uno distinto, que reproduce en estrecho la portada del libro de Antón Castro "Conversaciones con Mariano Cariñena". En él, sobre fondo negro, hay una estupenda fotografía de José Miguel Marco de la cara de Mariano Cariñena iluminada de forma que sus rasgos adquieren una dureza que la realidd desmiente (aunque no del todo). A lo que voy: este marcapáginas me obsesiona: la mirada del ojo izquierdo de Cariñena y sus prietos labios parecen estar a punto de comunicar(me) algo que no alcanzo a comprender o que ya he comprendido y no me alegra la vida. ¡Con lo contento que cogí ese marcapáginas!
Mariano Cariñena es una de las pocas personas a las que quiero desde que la conocí allá por 1969 ó 1970, recién prohibido el Teatro de Cámra de Zaragoza y recién levantado el "Teatro Estable de Zaragoza", del que Mariano era uno de los directores (el otro era Juan Antonio Hormigón). A Cariñena debo el conocimiento dela música de Schönberg y de Hindemith, las canciones de Brassens y mucha de mi afición por el teatro. Fui ayudante de dirección de Mariano Cariñena una temporada y creo que aprendí mucho en la puesta en escena de "El cántaro roto" de von Kleist u en general en mi trato con Cariñena, que pese a llevarme bastantes años (unos veintitantos) me trató siempre con una actitud exenta de lejanía y de paternalismo.
Pero ahora su ojo izquierdo me mira desde la negrura del marcapáginas y yo sé que en su mirada caben muchos mensajes que no acierto a recibir. Voy a tener que llamarle un rato de estos para preguntarle si tiene un mensaje concreto para mí o es una obsesión mía. ¿Será que soy yo quien tengo que decirle algo a él? La última vez que lo ví fue en la Feria del Libro Viejo y de Ocasión y charlamos un buen rato. Mariano Cariñena no deja nunca de pelearse con la realidad que no le gusta y de buscar formas de cambiarla a su favor, lo cual es un buen ejemplo para tanto joven sufriente y lloroso como se encuentra uno también cada vez que hay casetas con libros en algún sitio.
Voy a llamar a Cariñena cuanto antes, porque su mirada constante y esos labios prietos no me dejarán tranquilo hasta que conecte con él. Sé que anda intentando poner en escena la comedia "Tesorina", creo que de Torres Naharro (y si no, Cariñena me perdone) y que quiere hacerlo bien, en buenas condiciones, contando con lo realmente necesario para llenar un escenario de buen teatro. ¿Es eso de lo que me quiere hablar? ¿Es por eso por lo que le quiero hablar?
Tengo que salir de dudas lo antes posible. Pero por si acaso tardo en dar con él, si algun@ de ustedes se lo encuentra un día de éstos, pregúntele por lo de la comedia "Tesorina", a ver si ha conseguido que las autoridades del ramo (u otras aceptables) le han hecho más caso al respecto. Mariano Cariñena se merece un apoyo cordial y efectivo a su serio deseo de hacer otra vez una buena obra de teatro.
1 comentario
Antonio Pérez Morte -
¡Ojalá encuentren el apoyo que merecen!