ÁRBOLES SINGULARES EN LANZAROTE

 ÁRBOLES SINGULARES EN LANZAROTE

 (De http://www.diariodelanzarote.com)

Manuel Perdomo

[Martes, 15 de mayo de 2007]

Para que hoy podamos realizar un catálogo de árboles singulares, alguien ha debido plantar muchos de ellos, regarlos, y propinar los cuidados que demanden. Una de las condiciones para devenir en árbol singular es el porte, la altura, la frondosidad de la copa, su significación en el paisaje, natural o urbano...

En Arrecife, con los cuidados que se brindan a los árboles, me parece que poco singulares van a llegaran a ser.

No recuerdo demasiados con los requisitos para disfrutar del título, y nosotros de sus beneficios, pero añoro uno, el de la Cuatro Esquinas, que una disparatada orden mando talar, se remodeló el espacio y no se ha obtenido beneficio alguno. Es como si un agujero se hubiera abierto en el corazón de la ciudad, aunque hoy, con un bastón que lo sostiene intente hacerse un hueco en el despropósito de plaza que nos regaló alguien que no sabe de urbanismo y mucho menos de la naturaleza.

De los árboles de la Plaza de Yaiza, la singularidad la deben otorgar al vertedero que acogió tanta copa mutilada.

De árboles, poco nos estamos interesando, quizás, cuando nos digan que tres por habitante marcan la diferencia entre vivir o acabar con el modo de vida que conocemos, entonces habrá llegado el momento de estimarlos, cuidarlos y demandar que con cada nuevo ser que se dé de alta en esta isla, se planten tres nuevos. Ninguna tontería, y no imaginan algunos cómo iba a cambiar su percepción del espacio que habitan. La transformación de la ciudad con esta medida, lo es también de las personas que transitan por ella.

Es sombra, como algunos prefieren decir, pero como también otorgan sombra las pérgolas, yo prefiero hablar de árboles, porque crecen, refrescan, tamizan la luz, amparan, dan color, acogen y acompañan. Ocultan, también, aquello que no se nos manifiesta grato, y contribuyen, ahora, como nunca antes, a nuestra supervivencia.