BARCELONA: PLANTACIÓN DE FLORES EN OTOÑO
Uno de los parterres ubicados en la Gran Via con la Rambla de Catalunya, adornado con claveles de moro, ayer. Foto: ALBERT BERTRAN
Barcelona reanuda la plantación de flores tras meses de parón por la sequía
- • En septiembre se pusieron 75.000 unidades en áreas verdes, a las que se añadirán 167.700 en noviembre
- • El ayuntamiento, que suprimió la campaña de marzo, apuesta por un césped que necesita menos agua
No es primavera, pero los más observadores se habrán dado cuenta de que en las últimas semanas algunas zonas verdes de Barcelona vuelven a lucir flores. Y otras muchas lo harán a partir del próximo mes. El paisaje sorprenderá tras un año de restricciones de agua que implicó suspender la plantación de flores en marzo y dejó los parterres sin renovar. Ahora, pese a que se mantiene la fase excepcionalidad 1, la ciudad ganará más de 242.000 plantas de flor. Unas 75.000 se plantaron en septiembre y otras 167.700 se agregarán el próximo mes.
El instituto de Parques y Jardines realiza dos plantaciones anuales de flores en Barcelona, pero la restricción de agua obligó al ayuntamiento a suspender la de marzo, cuando se habrían plantado unas 167.000. El ayuntamiento temió que la escasez de agua durante todo el invierno conllevase incluso la pérdida de buena parte de la vegetación de la ciudad. Sin embargo, explica la concejala de Medio Ambiente, Imma Mayol, las lluvias semanales que se produjeron a partir de mayo evitaron la catástrofe. "Apenas hubo pérdidas, pese a que solo se regaba el 18% de la superficie verde", explica la edila.
RENOVACIÓN
En el periodo más delicado se regaban solo jardines históricos y monumentales y árboles plantados recientemente, que necesitan más agua en la etapa de crecimiento. Sin embargo, las lluvias de primavera, así como las nuevas especies introducidas en los últimos 15 años --que precisan menos agua y menor mantenimiento-- lograron que la meteorología no devastase las zonas verdes de la ciudad.
El saldo negativo fue simplemente cuestión de imagen. "Hubo que parar la política de llevar las flores a todos los distritos", resume Mayol. Sin embargo, la fase actual de excepcionalidad 1, que permite utilizar 450 metros cúbicos por hectárea y mes, ha conllevado la vuelta a la normalidad en la planificación verde de la capital catalana.
A lo largo de septiembre se plantaron 75.000 plantas de temporada en espacios verdes y jardineras. Son ya visibles en puntos como la plaza de Catalunya, los Jardinets de Gràcia, puntos del paseo de Gràcia, la Gran Via, el Portal de la Pau y otros muchos. En esta primera fase han predominado el clavel de moro amarillo y rojo, los cóleos y las begonias blancas y rojas, entre otras.
En noviembre, detalla Mayol, se plantarán 167.700 plantas de especies como prímulas, senecios, crisantemos paludosum, violas, brassicas, bellis y ciclámenes. La distribución será equitativa, de forma que todos los distritos tengan todas las especies, cuenta la edila. Paralelamente, y durante todo este mes, se plantarán nuevos arbustos y árboles.
La escasez de agua ha estado a punto de acelerar el relevo del césped tradicional por las variedades más ecológicas que comenzó a probar Parques y Jardines en el 2007, que resultan menos costosas.
Sin embargo, finalmente, tras normalizarse la situación, se ha optado por ir plantándolo paulatinamente a medida que se estropee el actual.
DOS VARIEDADES
Tras distintas pruebas en los viveros municipales y en los jardines de Austria del parque Güell, Parques y Jardines ha llegado a la conclusión de que cuatro tipos de césped procedente de climas cálidos (del llamado tipo C-4) pueden cuajar en la ciudad. Se trata del Cynodon dactylon Riviera, el Cynodon dactylon Princess 77, el Paspalum vaginatum Sea Spray y el Zoysia japonia Toro.
Se caracterizan por adquirir un tono amarillento o marrón en invierno (verde en verano), pero requerir mucha menos agua que el césped siempre verde tradicional. En zonas de sombra se implantarán algunas mezclas más resistentes.
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