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javierdelgado

CARLOS FORCADELL, NUEVO DIRECTOR DE LA INSTITUCIÓN FERNANDO EL CATÓLICO

CARLOS FORCADELL, NUEVO DIRECTOR DE LA INSTITUCIÓN FERNANDO EL CATÓLICO

 Carlos Forcadell (dcha.) con J.Sebastián. Premios Cálamo 2005

 

A Carlos Forcadell le tengo mucho cariño. Respeto también. Y admiración. Pero lo primero que le tengo es cariño. Ahora es Director de la Institución Fernando el Católico. Le voy a seguir teniendo mucho cariño. Antes ya se hizo catedrático de Historia Contemporánea y le seguí tendido mucho cariño. Y antes de eso se hizo del PSA en vez de hacerse del PCE, y le seguí teniendo mucho cariño. A Carlos le cogí cariño en el primer Andalán, así que no voy a cambiar ahora mis afectos por un cargo más o menos.

 

 Y además me parece muy bien que le nombren Director de la IFC. De la IFC de ahora, claro está: una IFC refundada por Ildefonso Manuel Gil,  puesta en órbita dos mil por Guillermo Fatás  y Gonzalo Borrás. Que aquella otra IFC sobre la que hube de intervenir muy a la contra ¡en los años ochenta! para mucho disgusto de Don Luis Horno Liria, que antes de aquella memorable “mesa redonda” en Alcañiz me había dicho mientras desayunábamos: “¡Pero Delgado!¡Es que habíamos ganado la guerra!”. Aquello sí que era una explicación, y no las bobadas que otros decían para justificar la política cultural del franquismo (y no sólo la cultural).

 

 ¡Habían ganado la guerra! Bueno. Pues ahora no. La transición la ganó el PSOE, lo que explica que la IFC sea ya otra cosa y también explica que hayan tardado treinta años en nombrar Director de la IFC a un tío como Carlos Forcadell. También es verdad que Carlos ha ido cumpliendo años, pero no lo es tanto que no sea un Carlos Forcadell muy parecido al que yo conocía ya entonces, hace treinta años o así.

 

Lo conocí en el pequeño despacho que por entonces tenía Juan José Carreras Ares en el ala de Historias de la Facultad. Acababa de volver de Alemania y estaba tan contento de haber vuelto como de haber estado allí, lo que me pareció un dato importante sobre su personalidad. En general, Carlos Forcadell siempre ha estado contento de haber ido y de haber vuelto y, sobre todo, de seguir yendo y viniendo, conociendo más gente, más secretos de la vida, más mundo redondo que da vueltas sin parar. La gente (sobre todo en algunas instituciones universitarias) suele ir y venir con mala cara: ¡tengo que ir a tal…! ¡tengo que volver de tal…! Y sufren mucho, o al menos eso dicen. Carlos no sufre mucho y si sufre algo se lo guarda porque tiene una educación que le permite saber cuándo y dónde hay que mostrar sentimientos, exaltaciones  o decepciones.

 

Alemania, Juan José Carreras, su maravillosa y sabia mujer “Papi”, él mismo, acaso sus genes, su infancia, sus lecturas…Seguramente frecuentar gente lista y trabajadora, mantener amistades múltiples, reírse de su sombra, disfrutar con el parte cotidiano de rumores, cotilleos y noticias de menudillo, alzar la vista por encima del pequeño dato y encontrar la diana para una explicación razonable a todo lo irracional que se te viene encima cada vez que abres la prensa o la puerta de casa, o del despacho…

 

Han nombrado a Carlos Forcadell Director de la IFC y eso me trae, ¡qué voy a hacer con ellos!, recuerdos de otros tiempos cuando ya le tenía cariño y no era director de nada ni falta que le hacía. Carlos leía las novelas enteras antes de irse a dormir para así tener tiempo de hablar de ellas en el desayuno. Cenaba con tres o cuatro desconocidos y tenía un centón de anécdotas a cual más entretenida sobre cada cual. ¿Cuántos amigos tiene Carlos Forcadell? Uno más en cada instante de su vida. ¡Si funciona más cordialmente de lo que nunca estaría dispuesto a admitir! Historiador lo es mucho, pero amigo lo es más.

 

¿Han nombrado a Carlos Forcadell Director de la IFC por méritos de su corazón, de su cordialidad? No lo creo. Lo han nombrado por sabio y por limpio, es decir por honesto y capaz. A los que lo queremos también es eso lo que nos importa o nos debe importar. No sé qué cambiará en la IFC bajo su dirección, espero que otro poco (por ejemplo, en las filiales, esos  Centros de Estudios Locales que se merecen mucho y mejor apoyo desde la capital..). En fin, él sabrá.

  

Imagino que lo único que a estas horas le fastidia es no poder hablar con Juan José Carreras de todas las cosas que le ocurren ahora mismo, de todos los chismes que le llegan sobre la Institución Fernando el Católico, de sus secretos mejor guardados, de sus rincones y de sus archivos… No podemos devolverle a Carlos su Juan José ni entre todos sus muchos amigos, pero si pudiéramos ahora mismo lo haríamos para que disfrutase a pleno corazón de su nuevo cargo.

 

Pero él sabe (para eso no le hace falta ni ser sabio ni catedrático ni historiador ni director de la IFC), tú sabes, Forcadell, que Juan José sonríe como siempre, le brillan los ojos, enciende otro cigarrillo y pregunta una vez más su ¿y qué? ¿y qué? Ahora no tienes más que responderte a ti mismo y todos tus amigos te habremos escuchado decirte que bueno, que bien, que ya veremos, que  primero hay que ver…

 

La Institución Fernando el Católico está de enhorabuena, eso nadie lo duda y si lo duda o no sabe quién es Carlos Forcadell o no sabe lo que es la IFC.

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