CRISIS ECONÓMICA: ESTA CRISIS VA EN SERIO. Y SIN EMBARGO ALGUN@S NO QUIEREN ENTERARSE: UNA CHARLA EN EL AUTOBÚS.

CRISIS ECONÓMICA: ESTA CRISIS VA EN SERIO. Y SIN EMBARGO ALGUN@S NO QUIEREN ENTERARSE: UNA CHARLA EN EL AUTOBÚS.

 

Que esta crisis va en serio no hay nadie medianamente informado que lo pueda negar. Que la crisis afecta al corazón del sistema capitalista está claro. Que la crisis demuestra que el capitalismo no es lo que nos dicen los capitalistas (y que niegan cuando les conviene), también. Que los capitalistas hayan negado lo que suelen decir sobre el capitalismo es sumamente importante, porque niegan también algunas cosas de las que solemos decir quienes nos oponemos al capitalismo.

 

Que la crisis es global y planetaria también está claro. Y se han producido algunas grandes novedades, como el auxilio de las finanzas de la China, la atenta expectación de Rusia con la mano en el grifo del crudo, las risotadas por parte de gobiernos de países islámicos como Irán, las recolocaciones y reagrupamientos de países latinoamericanos, etc.

 

Que la crisis afecta a las relaciones Este – Oeste y también a las relaciones Norte – Sur es muy significativo. (Por cierto: la voz de los pueblos africanos está aún por oirse, pero ya se oirá.

 

Que a estas alturas pretendan gestionar la crisis los mismos protagonistas que estuvieron en su origen (incluso con efectos curiosísimos, como el llamamiento a la “unidad” del del penosamente zorruno candidato  MacCain al candidato Obama) resulta francamente sobrecogedor.

 

Por eso resulta escalofriante también escuchar en el autobús conversaciones como ésta:

 

-          A mi hijo le ha cogido lo de la GM

 

-          ¿Lo del paro?

 

-          Sí. Le mandan a casa durante un tiempo.

 

-          ¿Se iba a casar ahora, no?

 

-          Estaba para comprarse el piso y casarse ya.

 

-          ¿?

 

-          Pero ahora, con esto, no se puede poner a comprar el piso.

 

-          ¿No se casa?

 

-          Está deprimidísimo. No quiere saber nada de nada. Le ha afectado mucho.

 

-          ¿?

 

-          Y yo le he dicho: hijo mío, anímate. Si no te puedes comprar ahora el piso y casarte, ¿por qué no cambias de coche? ¡Ánda! ¡Anímate!

 

-          ¿?

 

-          Es que lo he visto tan desanimado…

 

No volví la cabeza por no dejar ver mi "furioso" asombro. Pero me ha dado que pensar sobre cómo se plantean las cosas ante la crisis algunas personas del "primer mundo"...

 

¿Estaba esa señora madre respondiendo a la consigna lanzada por Zapatero en el último congreso del PSOE "Conviene que consumais"? ¿O era pura intuición...?

 

Seguiremos con esto de la crisis, y de las reacciones que provoca, en otra ocasión.