Blogia
javierdelgado

ESTUDIOS

EL USO DEL COLOR EN LA VISUALIZACIÓN DE LA INFORMACIÓN: UN INTERESANTE ARTÍCULO QUE NO ME RESISTO A COPIARLES AQUÍ

EL USO DEL COLOR EN LA VISUALIZACIÓN DE LA INFORMACIÓN: UN INTERESANTE ARTÍCULO  QUE NO ME RESISTO A COPIARLES AQUÍ

La Iglesia Católica , por ejemplo, es maestra en el uso del color en todas sus actuaciones  

 

 

La revista digital de InfoVis.net.
[Número 183]

Sobre el Uso del Color
por Juan C. Dürsteler

El color juega un papel muy importante en la visualización de información, sin
embargo, no resulta igualmente útil para cualquier aplicación. Discutimos en
este artículo las principales aplicaciones del color y abordamos la primera de
ellas en detalle.

Véase la versión gráfica en http://www.infovis.net/printMag.php?num=183&lang=1

Sobre el color hemos tenido la oportunidad de preguntarnos por su existencia
(http://www.infovis.net/printMag.php?num=126&lang=1) , hablar con James Wise
sobre la ecología (http://www.infovis.net/printMag.php?num=129&lang=1) del
color, valorar la relación del color con las emociones
(http://www.infovis.net/printMag.php?num=96&lang=1) y presentar esquemáticamente
como se relaciona con la información
(http://www.infovis.net/printMag.php?num=95&lang=1). Sin embargo no hemos
abordado la utilización del color dentro del ámbito de la visualización de
información con el detalle que merece un aspecto fundamental como éste.

Colin Ware (http://www.infovis.net/printRec.php?rec=persona&lang=1#ColinWare)  
en la segunda edición de su libro
(http://www.infovis.net/printRec.php?rec=llibre&lang=1#InfoVisWare) sobre
visualización de información considera 5 aplicaciones del color en dicho campo.
De ellas obviaremos aquí la reproducción del color en diferentes dispositivos y
la especificación de espacios de color, como el RGB o el HSV, y las interfaces
para seleccionar colores que encontramos en todos los programas de CAD y dibujo
gráfico, que son materias ampliamente conocidas en el mundo de la Infografía
(Computer Graphics). Nos quedaremos pues con las tres más interesantes para
visualización de información: codificación nominal de información, secuencias de
seudo color y exploración de datos multidimensionales discretos. 

Debido a la limitación de espacio en el presente artículo nos centraremos en la
primera de ellas;

* Codificación nominal de información. 

Conocida coloquialmente como etiquetaje, supone usar el color para diferenciar
distintas categorías de elementos. Por ejemplo podemos asociar el rojo e todos
los datos que hacen referencia a un determinado conjunto de mediciones, por
ejemplo altura, mientras que los elementos verdes portarán información
relacionada con la anchura de los elementos del mismo conjunto. 

El color resulta especialmente efectivo en este campo. Según Ware hay todo un
rango de factores perceptivos a tener en cuenta a la hora de escoger un conjunto
de etiquetas de color:
 
  * Diferenciación (Distinctness): dos o más colores que aparecen cercanos
espacialmente entre si han de ser fácilmente distinguibles. Ello quiere decir
que su diferencia cromática ha de ser perceptible de forma muy rápida o si no
será muy difícil distinguirlos. Para ello Colin Ware menciona la estrategia
elaborada por Bauer(*) y otros que usan el diagrama cromático CIE l*u*v
(http://www.hf.faa.gov/Webtraining/VisualDisplays/HumanVisSys2c4.htm) un espacio
de coordenadas colorimétricas, para escoger apropiadamente los colores de un
conjunto.

La idea se basa en el concepto de envolvente convexa. La envolvente convexa de
un conjunto de puntos en 2D es el polígono convexo más pequeño que contiene a
todos los puntos del conjunto. En la practica nos podemos imaginar los puntos
como clavos y una goma elástica que los rodea a todos. La forma de la goma
elástica es la envolvente convexa de los puntos.

Pues bien, si consideramos un cierto número de puntos sobre  el diagrama CIE
para que otro punto sea distinguible perceptivamente ha de yacer fuera de la
envolvente convexa de los demás puntos.

   * Colores especiales: como ya vimos en el número 126
(http://www.infovis.net/printMag.php?num=126&lang=1) ¿Existe el color?  los
colores que el sistema perceptivo considera primarios son el blanco, negro,
rojo, verde, amarillo y azul, que son los colores básicos de la teoría de
colores opuestos (canal de luminancia + dos canales cromáticos). Además son los
colores que tienen nombres únicos en todo el mundo. 
 
Por ello estos seis colores proporcionan un conjunto natural cuando se necesita
una selección de unos pocos colores (6 o menos). 

   * Contraste con el fondo: los fenómenos de contraste simultáneo pueden hacer
que, en función del fondo sobre el que yacen, dos colores distintos parezcan el
mismo o viceversa el mismo color parezca distinto según su localización.
 
Una forma de reducir este efecto es usar un rango pequeño de colores
suficientemente separados tanto en luminancia (intensidad) como en crominancia
(color). Otra forma de evitarlo es crear un fino borde blanco o negro alrededor
del objeto .
 
   * Ceguera al color: Alrededor de un 10% de la población masculina y un 2% de
la femenina sufren de alguna forma de ceguera al color. Lo más habitual es que
se confundan colores en el canal rojo-verde, mientras que el amarillo-azul suele
ser el menos alterado. Puesto que la distinción de los colores no es
imprescindible para el desarrollo normal de la vida (como cualquiera que haya
visto una película en blanco y negro puede constatar) muchas personas con
deficiencias en la percepción del color ni siquiera saben que lo son. 

  Por ello es importante tener en cuenta estos efectos para, a la hora de crear
representaciones de este tipo, evitar dar preferencia a colores basados en el
canal rojo verde si pueden dar lugar a confusión.

   * Número de colores: según Ware, pese a que el uso de colores para codificar
información categórica es muy efectivo, ello se va perdiendo a medida que el
numero de colores (y categorías) aumenta. Las distintas estimaciones varían
entre 5 y 10.
 
   * Tamaño del campo a representar: si el elemento a representar cubre un
ángulo visual pequeño (menos de medio grado es probablemente, según Ware, el
límite inferior) puede ocurrir que se confundan los colores incluso si son
suficientemente diferentes debido a un fenómeno conocido como ceguera al color
en campos pequeños (small-field colour blindness). Cunato más pequeño sea el
elemento más saturado habrá de ser su color para que sea identificable y
viceversa, cuanto mayor el campo menos saturado ha de ser y más fácil es
distinguir unos colores de otros aunque difieran sólo ligeramente. 

   * Convenciones: como ya vimos en el número sobre Colores y Emociones
(http://www.infovis.net/printMag.php?num=96&lang=1) existen algunas convenciones
sobre el significado de los colores que quizá pueden ser aplicadas en
determinados casos. Sin embargo hay que tener mucho cuidado ya que son
convenciones muy influenciadas por condicionantes culturales. Lo que en un país
puede ser aceptable en otro puede ser chocante.

   * Colores recomendados: Ware propone 12 colores que son ampliamente usados en
la codificación, los primeros seis son los arriba mencionados y los seis
restantes corresponden con los nombres más usados en el estudio multicultural(+)
llevado a cabo por Berlin y Kay (http://www.icsi.berkeley.edu/~kay/) .

   Normalmente se usan primero los seis colores primarios respecto a la
percepción y después los otros seis si es necesario extender el número de
colores.

La codificación nominal de información mediante el uso de colores es una forma
"natural" de usar el color. De hecho el color no es imprescindible para
codificar información muy compleja, usando sólo el canal de luminancia, es decir
niveles de un solo color, grises por ejemplo, se pueden codificar escenas muy
complejas. Sin embargo, al igual que en la naturaleza el color de una fruta nos
permite identificarla fácilmente respecto de un fondo verde vegetal, el uso del
color nos permite en un gráfico identificar distintas categorías de objetos.

Como hemos visto más arriba ello no se puede hacer de cualquier manera, no es
lo mismo representar elemento visuales de pequeña o gran extensión, así como no
se puede utilizar un número arbitrario de colores que pueden llegar e eliminar
la diferencia e inducir a confusión. Finalmente las ilusiones ópticas debidas al
contraste simultáneo os pueden hacer pensar que colores iguales son diferentes o
viceversa según en el fondo sobre el que se nos muestren. Evitar estos problemas
y sacar el máximo partido a las posibilidades de la codificación mediante el
color puede rendirnos muy buenos resultados.


-------------------------------------------
(*) Bauer, B., Jolicoeur, P., y Cown, W.B., (1996) Distractor heterogeneity
versus linear separability in colour visual search. Perception num 25: pp.
1281-1294

(+) Berlin, B. y Kay, P. (1969) Basic Color Terms: Their Universality and
Evolution. University of California Press, Berkeley
__________________________________________________________
© Copyright J.C. Dürsteler 2000-2005, Barcelona, Spain.
Todos los derechos reservados.
http://www.infovis.net

ARTE E HISTORIA DEL CASINO MERCANTIL. ARTÍCULO DE ANTÓN CASTRO EN SU BLOG SOBRE EL LIBRO "UNA JOYA EN EL CENTRO" DEL SABIO MANUEL GARCÍA GUATAS. (EN UN BREVE CAPÍTULO DE ESE LIBRO PUBLICO UN ESTUDIO SOBRE LA FACHADA DE ESE EDIFICIO. COLGUÉ EN ESTE BLOG UN ESTUDIO MÁS EXTENSO EL DÍA 11 DE ABRIL DE 2006, POR SI A ALGUIEN LE INTERESA PINCHAR Y LEER)

  

  Copio aquí este artículo que publicaba hace unos días Antón Castro en su blog (http://antoncastro.blogia.com). Con mi agradecimiento de ciberpirata a mi amigo del alma Antón.

  

  

ARTE E HISTORIA DEL CASINO MERCANTIL

20060812002508-iris-lazaro2.jpg

   El escritor y periodista Fernando Castán Palomar evocaba en 1946 su primera visita a Casino Mercantil, Industrial y Agrícola instalado en el Coso 29: “Recuerdo muy difusamente unas galerías orladas de retratos, unas estancias prietas de humo y unos tonos ocres en la toda la decoración del Casino. Había en los salones muchos socios; casi todos con bigotes espesos; y algunos con barbas grises o ya rotundamente blancas; hablaban en voz muy alta y era un denso bullicio el que salía a los pasillos cada vez que se abría una puerta”.  A este espacio, adquirido en 1990 por Cajalón y restaurado por cuarta vez por el arquitecto José María Valero, le dedica el catedrático e historiador del arte Manuel García Guatas el libro “Una joya en el Centro: un símbolo de la modernidad” (Cajalón, 2005), al que acompaña un texto del poeta y narrador Javier Delgado sobre “La decoración vegetal de la fachada del Mercantil”, realmente sugerente, porque obedeció a un plan muy meditado y a “un cuidado muy personal”.        

García Guatas cuenta la historia de este edificio, nacido a imitación los clubes ingleses, cuyo finalidad era “servir de lugar de encuentro para unos socios, abonados, que pagaban sus cuotas, donde poder informarse de negocios de su ramo, encontrar entretenimientos en el juego, en las fiestas y bailes de sociedad y en las tertulias, la lectura de prensa y revistas, y el derecho a asistir a asambleas, mítines y conferencias”. El Casino Mercantil tendría un precedente en el Casino Principal o de Zaragoza, fundado en 1843, pero sería en 1858 cuando nacía el Casino Mercantil, entonces sito en Coso 34. En 1875 se trasladó a su definitiva ubicación en Coso 29, a un palacio que construyó a principios del siglo XVI Juan Francisco Pérez de Coloma, secretario del Consejo Real de los reyes Juan II y Fernando el Católico; más tarde pertenecería al conde Guimerá, que poseía muchas obras de artes y antigüedades y una importante biblioteca. Y aún tendría un tercer dueño: el memorialista y embajador en París y Roma José Nicolás de Azara. El Centro Mercantil se inició con 275 socios y se cerró en 1985 con 775 socios, pero había tenido en otros momentos más de cuatro mil, especialmente en la posguerra, hacia 1945.

El edificio, que respondía a las características de un palacio aragonés del Renacimiento, poseía una espectacular techumbre de madera labrada. La primera transformación verdaderamente importante del antiguo palacio de Coloma y Azara la llevó a cabo el arquitecto Francisco Albiñana (1884-1936), concejal del Ayuntamiento de Zaragoza, socialista y vinculado a la masonería, que fue asesinado a principios de la Guerra Civil. Albiñana, al poco tiempo de volver de Madrid con el título bajo el brazo, ganó un concurso de 1911 y a él le debemos “la imagen arquitectónica y artística primera y principal del flamante Centro Mercantil y que pasará a la posteridad”, dice García Guatas. Albiñana levantó una fachada nueva de estilo modernista y realizó dos intervenciones artísticas claves: los cuatro artesonados y la concepción para los nuevos espacios de “una decoración que integraba la pintura, los relieves escultóricos y los complementos de carpintería, la rejería y la vidriera artística”, todo elementos fundamentales que convertían al edificio en un auténtico centro de arte y artesanía, aspectos que estudia con detenimiento el historiador. Esa restauración se inauguró durante en vísperas de las fiestas del Pilar de 1914, cuando se abría el Salón Doré, y actuaban en la ciudad personajes como “Margarita Xirgu en el Principal, Pastora Imperio  que debutaba en el Pignatelli y El Gallo en el ruedo de Independencia”.

En 1932, Francisco Iñiguez transformará la mitad de la fachada posterior, remodelará algunas salas y modernizará su decoración. Iñiguez, que trabajó en el castillo de Loarre, en San Juan de la Peña y en el palacio de la Aljafería, contaría con la colaboración de Regino Borobio. En 1950, tras la decoración interior del cine El Dorado, Santiago Lagunas intentó hacer un proyecto tan vanguardista, pero hubo de conformarse con levantar una entreplanta en la parte posterior y con la decoración de la sala de exposiciones, donde había debutado el grupo Pórtico en 1947, que él lideraba. Aquella muestra fue acompañada de un ciclo de conferencias impartidas por José Manuel Blecua, Dámaso Santos, Pascual Martín Triep e Ildefonso Manuel Gil.

García Guatas analiza casi año a año lo que ocurrió en el Casino, la relación constante con la ciudad, su condición de escenario permanente de música, teatro o exposiciones, la presencia de importantes artistas y artesanos en la configuración de ese espacio majestuoso, donde convivían algunos detalles mudéjar y renacentistas con el arte plateresco, con el modernismo y el art decó. Habla de las pinturas decorativas de Ángel Díaz Domínguez, de los trabajos de forja y cerrajería de Mariano Tolosa, de los espléndidos relieves escultóricos de José Bueno, que se había formado en Roma y conocía muy bien el arte griego. Habla de las exquisitas pinturas de Julio García Condoy, de los grandes lienzos alegóricos, en forma de figuras femeninas,  de Félix Lafuente, del gran proyecto colectivo de  homenaje a Goya en 1928, de los jardines soñados por Iris Lázaro o recuerda esa intensa apología del cristal que fue el Casino visitado por grandes figuras de la cultura española como los hermanos Quintero, Jacinto Benavente, Azorín, Ramón Gómez de la Serna. Y no elude una reflexión general sobre la postura política que mantuvo el gran referente cultural y social de Zaragoza: “Tomará entonces y después partido de manera notoria por las empresas patrióticas y por aquellas civiles que eran de mayor utilidad pública y, por consiguiente, del poder político de turno”.

*La foto de Iris Lázaro pintando en el Casino Mercantil, sede de Cajalón, está tomada de la página de Javier Narbaiza.  

ACACIA DE TRES ESPINAS: LA PELIGROSA GLEDITSCHIA TRIACANTHOS

ACACIA DE TRES ESPINAS: LA PELIGROSA GLEDITSCHIA TRIACANTHOS
 Las reconocibles legumbres de la Acacia de tres espinas
 Artículo publicado en Qué!diario Zaragoza, en la seción "Escápate a mirar" del jueves 29 de junnio de 2006
PELIGROSA GLEDITSCHIA



 La llamada "acacia de tres espinas" (Gleditschia triacanthos ) es una
de las tres falsas acacias que vemos en Zaragoza. El nombre del género
Gleditschia se le puso en honor a Juan Gottlieb Gleditsch (1714-1786)
que fue director del Jardín Botánico de Berlín. La especie triacanthos
recibe su nombre por los grupos de espinas que cubren su tronco y
ramas: tres espinas unidas por sus bases, de las cuales la central
puede medir hasta diez centímetros. Hay que tener cuidado con ellas,
pues su pinchazo, si profundiza, es muy peligroso. Sus hojas son
bipinnadas o simplemente pinnadas y sus folíolos denticulados. Sus
frutos son unas muy anchas y largas legumbres (semejantes a las del
algarrobo, con las que suelen confundirse) de un fuerte perfume que
evoca olores primitivos. Hay más de 500 ejemplares de esta especie en
Zaragoza. En la Avenida de Cataluña y en el Paseo de Echegaray y
Caballero vemos hileras de buenos ejemplares.

LA PARKINSONIA ACULEATA EN NUESTROS JARDINES: BELLEZA Y PELIGRO

LA PARKINSONIA ACULEATA EN NUESTROS JARDINES: BELLEZA Y PELIGRO
 Publicado en Qué!diario Zaragoza el martes 13 de julio de 2006
Al género Parkinsonia, de la familia de las Leguminosas, le dio este nombre el botánico Carlos Plumier, en honor del boticario real inglés John Parkinson (1567-1645), que con buen humor jugó con su propio apellido al titular una de sus obras "Park in sun"  (Parque al sol). Es género de hoja caduca. Crece formando un hermoso delicado parasol. La especie Parkinsonia aculeata tiene, como su nombre específico indica, espinas en el tallo y en las ramas. Sus hojas son compuestas, de folíolos pequeñitos y estípulas espinosas muy agudas. Las flores, amarillas, reunidas en racimos colgantes. Se ha difundido mucho en jardines públicos en los que destaca por su estética figura. En Zaragoza hay varias en el Andador Luis Puntes. Sin embargo, hay que advertir del peligro que sus ramas espinosas representan para los niños, sobre todo cuando se acercan a ellas a coger sus "guisantes".

ÁRBOLES EN ZARAGOZA. PROBLEMAS DE FONDO. URGE UNA ACCIÓN TÉCNICA, URBANÍSTICA, HISTÓRICA Y VECINAL.

ÁRBOLES EN ZARAGOZA. PROBLEMAS DE FONDO. URGE UNA ACCIÓN TÉCNICA, URBANÍSTICA, HISTÓRICA Y VECINAL.

 Una corteza de ciprés herido, que devuelve belleza donde recibió violencia. Si hace milagros será San Ciprés.

El arbolado urbano a principios de siglo XXI es uno de los asuntos más complejos del diseño urbanístico y de la programación de mejoras en la cida cotidiana de la ciudadanía. Se trata de la naturaleza en la ciudad, pero de una naturaleza que hay que programar y atender ya de por vida. El mantenimiento del arbolado urbano es caro, más cunto más grandes son los ejemplares. Si el arbolado de una ciudad está en general en malas condiciones, el problema se multiplica por infinito y las novedades son casi imposibles de plantear: pesa el trabajo de atender un gran número de ejemplares enfermos, muertos, en peligro, etc.

El libro "Árboles en la ciudad. Fundamentos de una política ambiental basada en el arbolado urbano" (Madrid, Ministerio de Obrasd Públicas y Transportes, 1992), sigue siendo lo más aprovechable de lo publicado en España sobre el asunto, y ya van catorce años desde que salió.

Una aproximación al problema desde la óptica del urbanismo "ecológico" requiere la participación de muchos sujetos, desde luego de la ciudadanía "de a pie": no es asunto sólo de burócratas y oficinas, ni de empresas del ramo, ni de autoridades municipales; o participa una gran pluralidad de sujetos, entre los cuales, evidentemente, se necesitan a los científicos y técnicos apropiados pero también a l@s vecin@s conocedor@s de la pequeña historia del arbolado cercano a sus domicilios, las entidades de estudio y defensa de la naturaleza, las asociaciones vecinales, etc.

El arbolado urbano, como parte de la vivencia de la ciudad, es un elemento en el que se concentran no sólo multitud de problemas concretos de la vida urbanam sino en el que cristalizan elementos subjetivos, emocionales, históricos, etc., lo que hace que el trato a los árboles y a los conjuntos de árboles de una ciudad deba tener en cuenta la sensibilidad vecinal y la vivencia tanto del presente como del pasado, sobre la cual no suele haber recogida mucha información, ni siquiera oral.

En cualquier caso, la Zaragoza de principios de siglo XXI tiene que afrontar una tarea a medio y largo plazo para asegurar que la calidad de vida de sus habitantes (incluidos los propios árboles habitantes en ella) no empeore definitivamente sino que mejore siempre más.

Habrá que ir agrupando fuerzas en la dirección de conseguir una participación efectiva en el estudio y tratamiento de los problemas del arbolado de Zaragoza. ANSAR ya ha comenzado a llamar la atención con mucha claridad y podría ser el núcleo alrededor del cual se formase una verdadera comisión cívica capaz de colaborar crítica y eficazmente con el Servicio de Parques y Jardines. Cualquiera otra vía sería también posible, como la crecientemente constituida comisión cívica "Iniciativas ciudadanas para el Parque" (INCIPAR), creada por la Fundación Ecología y Desarrollo. No es que dé igual cómo se empieza y cómo se organiza la acción, pero lo más importante ahora es buscar un comienzo abierto que permita adecuarse a las condiciones concretas en las que se encuentra el tratamiento del arbolado urbano de Zaragoza.

Volveremos sobre el asunto. El que avisa no es traidor.

He dicho.

MELIAS: JARDINES AÉREOS

MELIAS: JARDINES AÉREOS
 Publicado en Qué!diario Zaragoza el ´martes 6 de junio de 2006. La foto es de Víctor Lax
MELIAS: JARDINES AÉREOS

La Melia o Cinamomo (Melia Azedarach) es un elegante árbol de origen asiático. De hoja caduca, grande y compuesta: bi o tripinnada, con foliólos ovales ligeramente dentados. Sus flores, reunidas en panículas auxiliares, son de color lila y exhalan un maravilloso perfume que recuerda al de las lilas. Sus frutos son drupas redondas y amarillas, del tamaño de una cereza, con cuyas semillas monjes budistas  fabrican rosarios. No deben comerse, pues son venenosos. Quedan en las ramas durante el invierno, lo que da un aspecto característico a estos árboles. Hay más de 800 melias en Zaragoza. El grupo más numeroso y compacto está en la plaza de San Francisco, cuyos ejemplares más viejos fueron plantados en 1940. En la Avenida de América hay más de 90 ejemplares en sus aceras y unos 60 en la calle Franco y López. Pronto florecerán y sus copas se transformarán en perfumados jardines aéreos.

 Palacio del Papa Luna en Illueca (Zaragoza) donde se guarda su cráneo (que fue robado y encontrado no hace mucho)

Seguro que a muchos de ustedes también les habrá sucedido alguna vez: basta que hayan deseado "estar de vacaciones" para que un montón de encargos más o menos fáciles caigan sobre la cabeza y agobien las horas y los días. No es que no guste hacer lo que hay que hacer, pero como uno ya se veía libre de todo compromiso... Pues eso me ha sucedido. A lo mejor no tenía que haber pregonado mis deseos, visto lo visto. El caso es que me agobio fácilmente.

También me lo paso bien. Ayer en la presentación del libro de JL Cano: El Papa Luna (Xordica) en Ibercaja, ante un grupo de periodistas, todas ellas mujeres, nos reimos bastante porque además de lo que intentábamos animar la cosa ocurrieron cosas graciosas. De todas formas, creo que me pasé un poco en la extensión de mi parlamento. Pero el asunto no era cualquier asunto: ¡El Papa Luna!, ¡El Cisma de Occidente!¡La personalidad del que fue Benedicto XIII!...

Copio aquí el texto de mi intervención y así ustedes juzgan por sí mismos.

Texto que se cita:

                                                           LA MESA Es un honor compartir esta mañana esta hermosa mesa de este salón de IberCaja con personas a quienes profeso amistad, respeto y admiración.  Chusé Raúl: Xordica   Román Alcalá: IberCaja José Luis Cano, este pintor, grafista, dibujante, intelectual y escritor que ha ido creciendo en sabiduría y bondad a nuestro lado y que ha contribuido a conformar la Zaragoza del siglo XXI después de haber contribuido a acabar con la Zaragoza del siglo XX en lo que tenía de Zaragoza del siglo XIX, sobre todo en lo que tenía de ciudad clerical-militar sumida en siestas indigestas. Le tengo un gran cariño una enorme admiración.  Los libros de la colección Xordiqueta, en los que Cano va presentándonos toda una galería de actores principales de la historia de Aragón (y muchos de ellos de España y más allá: como es el caso de éste mismo que presentamos hoy sobre una figura absolutamente internacional) son ya un elemento imprescindible en las bibliotecas públicas y particulares aragonesas, gracias a la inteligencia y creatividad de Cano y a la perspicacia de IberCaja, que enseguida vio en ellos una forma ideal de difusión de la cultura entre chicos y mayores. A Don Román Alcalá, como representante IberCaja también aquí deseo felicitar muy sinceramente.                                        EL LIBRO SOBRE EL PAPA LUNA En este libro Cano se ha medido las fuerzas con el único español que llegó a ser Papa. Fue más fácil a los españoles llegar a ser emperadores del Imperio Romano que llegar a ser papas. Cuando uno lo fue, fue aragonés. Pero lo quitaron pronto y acabó muy mal visto.   La figura del Papa Luna, que sobrevuela la historia europea a caballo entre los siglos XIV y XV ha sido objeto de innumerables investigaciones y se han propuesto diversas visiones de tan complejo personaje. Hay muchas formas de abordar una biografía del Papa Luna, y desde luego la de un intelectual prerrenacentista no sería la peor: el Papa Luna citaba más textos de clásicos latinos que de la Biblia, su Biblioteca era un universo inagotable de antigüedades y novedades y su amor por la música y la pintura hizo que surgiera, por ejemplo, la escuela de Música de Aviñón. Su Palacio francés era un verdadero museo a la última moda.  Pero intelectuales así, y papas así hubo varios. Lo distintivo del Papa Luna es que además de su esencia intelectual dedicó su vida a la lucha por el poder en circunstancias complicadísimas. Jugó infatigablemente con las armas de la diplomacia y de la razón (apenas con las armas, sino para defenderse) y perdió. Y nunca aceptó ni reconoció su derrota.  Por eso Cano ha acertado al tratar su figura desde este punto de vista: su vivencia del Cisma de Occidente. Ha hecho lo mismo que hubieran hecho ustedes, los periodistas, en su época: tratar al personaje desde la óptica de la noticia. Y ya se sabe: la noticia no es que un perro muerda a una señora, sino que una señora muerda a un perro…  Personalmente siento esa pasión especial que muchos aragoneses sienten hacia la figura de aquel hombre transformado en representante de Cristo en la Tierra y posteriormente convertido en un traidor a su Iglesia. El hombre de su biografía personal y el hombre de su biografía oficial y pública.  Incluso, si me lo permiten, me unen a él los lazos familiares que unen a la familia de mi mujer, Ana Mastral Gascón de Gotor, que por filiación materna entronca con los Gotor del apellido del Papa Luna. Por eso nombro en mi prólogo inmediatamente a mi suegra Ana Gascón de Gotor y aquí quiero nombrar a su padre el profesor e investigador Anselmo Gascón de Gotor en cuya extensa obra publicada tiene un lugar preferente una extensa biografía del Papa Luna. Obra fundamental en la bibliografía sobre Benedicto XIII, es también obra cuyas páginas son muy frecuentemente fusiladas y muy infrecuentemente citada, seguramente por ese uso no muy elegante de los textos de don Anselmo Gascón de Gotor, a quien desde aquí reivindico.  IberCaja republicó hace un tiempo la obra del padre y del tío de este Gascón de Gotor: “Zaragoza, artística, monumental, histórica”, libro monumental él mismo y de cierta influencia también en la bibliografía sobre el arte aragonés. También ampliamente saqueado y ninguneado. ¿La maldición de los Gotor…? No han tenido mucha suerte los miembros de esta familia… Y también publicó IberCaja un librito mío titulado “Job en Veruela” en el que intenté aportar claves de comprensión del arte del claustro gótico del monasterio de Veruela basadas en la biografía del Papa Luna y su vinculación familiar con la entonces reina de Aragón. Incluso me atreví a ver representada en algunas de las figuras allí talladas la mismísima cabeza del Papa Luna, como otros defienden que lo es la cabeza del relicario de San Valero del Retablo mayor de la Seo..  El Papa Luna se vio a sí mismo como un nuevo Job y escribió un largo texto comentando el Libro de Job, una de sus obras más personales.                                              ESTUDIO SOBRE EL PODER Cualquier estudio sobre Benedicto XIII es también un estudio sobre el Poder. Este libro de Cano lo es también. Una miniatura sobre el poder en una época decisiva de la historia de Europa.  Hablar de miniaturas me recuerda a las llamadas miniaturas de Ajedrez, partidas de no muchas jugadas en las que se condensa al máximo la sabiduría de los contendientes y en las que podemos aprender la esencia del juego estratégico por excelencia. Este libro de Cano es una miniatura sobre la tremenda, complicadísima y nada breve partida de ajedrez que se jugó en Europa en los albores del Renacimiento. Quien quiera ceñirse a un objeto de estudio abarcable sobre el Poder, sus mecanismos más ocultos y sus objetivos menos confesables, tiene en la biografía oficial del Papa Luna un laboratorio fundamental, imprescindible.  La Europa del Cisma de Occidente fue una Europa convulsa por los dolores de parto de una nueva era histórica que afectaría a la totalidad de los elementos de la vida humana, entre otros a la recolocación del papado entre las piezas del poder a escala internacional.  No me voy a extender en los pormenores de aquella convulsión (en la que intervinieron como fatalidades factores inesperados como la gran peste o la invasión bárbara de los mogoles, por poner dos ejemplos relevantes), pero sí querría proponerles una interpretación de la actitud de Benedicto XIII sin salir de la metáfora ajedrecística: El Papa Luna, desde el momento en que fue elegido Papa, jugaría una partida de ajedrez en la que supo mover perfectamente sus piezas y en la que debería haber cosechado un éxito que se le escamoteó. ¿Qué sucedió? Sucedió que mientras se desarrollaba la partida el tablero, literalmente, fue cambiado de sitio, de modo que aunque los movimientos de Benedicto XIII eran los adecuados de acuerdo a la primitiva posición del tablero, no hacían sino llevarle a la ruina en las cuevas circunstancias. Para él (¡”firme en sus XIII”! como se dijo) nunca hubo que mover el tablero, inusitada trampa inadmisible intelectual y moralmente.  El cambio de posición del tablero generó cambios en el valor de las posiciones de las distintas piezas puestas en juego, de modo que hacia el final de la partida hasta un leal como el muy convincente e influyente Vicente Ferrer decidió adaptarse a su nueva misión: de ser  alfil de Benedicto XIII a ser caballo de los reyes de Aragón, Castilla y Navarra en sus recolocaciones dinásticas y en sus correspondientes nuevas alianzas internacionales, que era lo que se estaba realmente jugando en esos momentos.  El Papa Luna acabó en su retiro de Peñíscola no queriendo reconocer unos cambios que ya habían hecho de él una figura muy distinta de la que salió del cónclave de Aviñón. Vivía ya en un “No land” y se había convertido en un “No man”, como los inolvidables personajes de la película de los Beatles “Yelow submarine” (“El submarino amarillo”).                                                                 FINAL Acabo. En la vida cotidiana de los fieles cristianos de la época del Cisma de Occidente no parece haberse producido ningún terremoto teológico ni moral. Apacentado el rebaño por un clero intermedio que mantenía las constantes intocables, los cristianos que diríamos ahora “de base” apenas se enteraron del intríngulis de aquellas guerras intestinas del papado: las vivieron sin tapujos en guerras entre las monarquías europeas que mandaban a la batalla a miles de campesinos más o menos disfrazados de soldados. Hubo durante unos cuantos años cuatro papas bendiciendo esas batallas. Pero los que morían en ellas lo hacían con la misma fe en las cosas del Cielo y la misma ignorancia de las cosas de la tierra.  Y así era como interesaba a todos los poderosos del mundo que lo hicieran.  José Luis Cano, en este libro nos cuenta todo esto de forma que nos sea asimilable. Toda la erudición está puesta al servicio de la comunicación con el gran público. Y creo que la consigue. Se trata de una especie de milagro del Papa Luna… Que ustedes lo disfruten y que podamos disfrutar de muchos otros títulos de esta estupenda colección que edita elegantemente Xórdica y apoya inteligentemente IberCaja.   Gracias por su atención.  

 

GRACIAS POR ANIMAR. LOS LEONES DEL PASEO SE HAN IDO...

GRACIAS POR ANIMAR. LOS LEONES DEL PASEO SE HAN IDO...

Puedo prometer y prometo que sólo escribiré de mis angustias y mis neuras cuando ya no las pueda soportar más, que dicho sea de paso ha sido lo que he hecho durante el tiempo que llevo con esto del blog. De veras que no pretendo amargarle la vida a nadie con mis confesiones de deprimido sarnoso y ya saben de sobra mis lector@s que meto todo el humor que puedo en estas líneas.

 Pero es parte del juego, creo, adimtir las confesiones personales del bloguero solitario entre col y col de uss informaciones, poemas, estudios, noticias, opiniones... Ya no me da tanta vergüenza ni miedo dejar saber lo que me ocurre y eso me ayuda a curarme: al menos ésa es la teoría.

Por otra parte, y mucho más importante, agradezco a quí (a quienes he podido hacerlo en persona lo he hecho) de todo corazón y desde lo más profundo de los cojones del alma todas las palabras de ánimo y todas las sugerencias que me han llegado sobre el particular. GRACIAS.

De todas formas, no cunda el pánico: este blog no nació para investigar en mi depresión a pantalla abierta. Para eso ya tengo otros instrumentos y materiales de lo más adecuados y menos vocingleros. Creo que podré seguir dando estopa a l@s mal@s de la película y hacer reir un poco a l@s buen@s ( sobre todo, si se me permite un deseo, a las muy buenas).

Por cierto: esta noche me han llevado al cine (Palafox) a ver "Rosario Tijeras", que ha resultado ser una interesante película sobre el caos vital en la Colombia de ahora. La propaganda no da idea clara de lo que se ofrece en la pantalla. De paso me he dado cuenta de que han quitado de pronto todos los leones de colores del Paseo de la Independencia. Para una idea buena que tiene el Corte Inglés en veinticinco años ha durado muy poco. Y encima no han mordido a nadie ni se han hecho pis al paso de ningún gerifalte local.

Mientras volvía del cine se me han ocurrido unos ripios de tipo elegíaco más rubendariano que  rubendariculo. Éstos son: 

¡Qué solo ha quedado el paseo

de la Independencia

sin esos leones

que amaba la audiencia

infantil!

¡Qué tristes quedamos

sin sus colorines!

¡Que vuelvan, que vuelvan

leones de ensueño

junto a nuestros porches!

¡Que cierren

del todo

a los coches

el paso

y que suelten

globos!

¡Qué bobos

los bobos

que tocan el pito

en el semaforito

del viejo garito

frente al Corte Inglés!

Sin esos leones

quedan las aceras

como playas secas

de mares de asfalto.

¡Y qué alto

que suben

los lloros

de los Reyes Magos,

pero sobre todo

del rey Baltasar!

Y todos nosotros

¿a qué miraremos

en ese paseo

al pasar?

Sobre esto

no tiene

política

clara

ni Antonio 

Gaspar.

 

EL PROF. HANS TILEN PROVOCA LA HILARIDAD CON UNA COMPARACIÓN. LA HILARIDAD PASARÁ EN LA PARTE SIGUIENTE DE SU CHARLA POR UN PROCESO DE REVISIÓN: UNA NUEVA IDEA PARECE HABERSE COLADO ANTE LOS OJOS DE LOS PRESENTES

EL PROF. HANS TILEN PROVOCA LA HILARIDAD CON UNA COMPARACIÓN. LA HILARIDAD PASARÁ EN LA PARTE SIGUIENTE DE SU CHARLA POR UN PROCESO DE REVISIÓN: UNA NUEVA IDEA PARECE HABERSE COLADO ANTE LOS OJOS DE LOS PRESENTES

Durante la cena, que fue opípara como todas las que suelen celebrar la ocasión o excusa de la presencia de un invitado en Zaragoza y en la que corrió generosamente el vino aragonés más estimado, sucedieron multitud de anécdotas jocosas y aún enredos que darían para un tomo entero de memorias locales. El respetable acatuaba ya como no tan respetable metido en harina de cenar, beber, reir, cotillear y cenar. Por cierto que se habló mucho de Belloch, inasistente a la charla y a la cena y se pasó lista a todos los cargos públicos municipales, provinciales y regionales. Sólo con ello hubo ya sustancia para tres o cuatro calderadas de nutritiva risa que algunos de los presentes supieron aderezar magníficamente on su verbo fácil al tiempo que incisivo.

Nos acercamos a la mesa de la presidencia para palpar (en sentido figurado) el sentir de los allí reunidos y al parecer llegamos en el preciso momento en el que en ella acababa de surgir un asunto de discusión curioso y divertido como pudiera serlo el más curioso y deviertido de todos los que surgían y brillaban en cualquier rincón de la gran sala. Era el caso de que nuestro invitado, el Profesor Hans Tilen, en su limitada pero ágil lengua española (que no empleaba para comer sino para largar a su gusto durante todo el rato que dedicaba la ruda lengua alemana para las labores de la alimentación personal) había lanzado como quien alegremente lanza un trozo de pan al aire, la siguiente pregunta: ¿Qué les parece a ustedes más natural: un burro o un tractor?

Ni qe decir tiene que los intentos de sofocar la risa no alcanzaban su objetivo, así que las carcajadas retumbaban en aquel lugar de la sala como truenos precursores de una fuerte tormenta. Sin embargo, el profesor Tilen no se mostraba molesto por el recibimiento de su pregunta, sino muy al contrarió, él mismo reía a carcajada limpia, a mandíbula batiente y sus risas destacaban (sea por el acento, sea por el timbre, sea por el ritmo) por sobre todas la demás.

De esta pregunta les hablaremos en el siguiente tramo de esta crónica, cuando hayamos repuesto nosotros mismos fuerzas con las viandas y los magníficos platos que han ido presentando los encargados del local en un gesto de generosidad más allá de cualquier adjetivo y de cualquier presupuesto.

¡Hasta pronto!

"EL PATIO DE MI CASA ES PARTICULAR: CUANDO LLUEVE SE MOJA COM LOS DEMÁS", APROXIMACIÓN FOLCLÓRICO-ANTROPOLÓGICA A LAS RAÍCES PROFUNDAS DE LAS DIFICULTADES DE INSERCIÓN MENTAL DE LA NATURALEZA EN LA CIUDAD

"EL PATIO DE MI CASA ES PARTICULAR: CUANDO LLUEVE SE MOJA COM LOS DEMÁS", APROXIMACIÓN FOLCLÓRICO-ANTROPOLÓGICA A LAS RAÍCES PROFUNDAS DE LAS DIFICULTADES DE INSERCIÓN MENTAL DE LA NATURALEZA EN LA CIUDAD

Comprometidos con la causa de la total información, continuamos erre que erre con la retransmisión en secano de la histórica charla del prf. Hans Tilen en Zaragoza sobre Naturaleza y Ciudad en el siglo XXI.

Retomamos la comunicación a escasos segundos de solventarse el dichoso lío del apagón  traicionero que colapsó charla y sala durante algunos minutos. Recompuesto el orden de los factores que habían alterado el producto, el profesor Tilen encaró a pelo el segundo tramo de su disertación, dedicado a los fenómenos atmosféricos cuando tienen lugar en el espacio geográfico de la ciudad. ¿Llueve en la ciudad o sólo parece que llueve? Ésta sería la pregunta inicial con la que retomó su intervención este sabio al que ya no dudamos adjetivar de suicida, vista y oida la reacción del público a sus intentos de compartir sus conocimientos con el personal de a pié y de a caballo.

El asunto de la realidad de la lluvia en la ciudad fue malamente acogido por ese público, entre el que no pocos amenazaron con sabotear el acto al grito de "¡Irrelevante!". Afortunadamente un anciano allí de cuerpo presente levantó su huesuda mano para pedir la palabra y una vez que se le concedió acertó a farfullar algo parecido a lo que aquí recogemos: "Pué que sí, pué que no", ante lo cual el prof. Tilen exclamó, exaltado, que una respuesta de ese tipo era tanto como conceder que el fenómeno de la lluvia era vivido por la población urbanita de la misma forma que lo han vivido siempre los hombres y mujeres del agro.

Ante el griterío, se apresuró a aclarar que agro era el campo, el medio rural (ruralen conformationen vitale der nibelungen estrechen), tras lo cual el vocerío decayó prontamente, momento que aprovechó un grupo de jévenes. pucho en alto, para gritar repetidamente: "¡La lluvia de Fraga no nos apaga!¡La lluvia de Fraga no nos apaga"!, que fue tomado por el profesor Tilen por el lado bueno; esto es, como  corroboración y demostración fehaciente de que llover en la ciudad era un fenómeno natural visto como tal por la población urbanita menos por un pequeño segmento materialista-histérico, dado a percibir deidades llovedoras y en general seres conscientes en la trastienda de los fenómenos meramente naturales, generando así fenómenos culturales semejantes a los de las romerías, rogativas, etc. " La antropología explica bien esta cuestión", señores y señoras, remató el prof. Hans Tilen, feiliz de poder comparar cualquier cosa que se manifestara en la salacon algo un poco más alejado del terruño  zaragozí.

A partir de tan elemental como ocuriiosa cuestión, el profesor avanzó, escalón a escalón, por la senda de la deducción y por la pista de la inducción, pero sin dar a entender sus intenciones, conocedor ya del público ante el que se las veía. A causa del ejercicio intelectual el profesor pronto llevó al auditorio a la convicción (al menos no negada en voz ni grito ni nada en alto) de que "tanto monta monta tanto en la ciudad como en el campo" en materia de fenómenos atmosféricos de toda índole y condición. Y en esa firme base argumental basó la construcción del gran edificio científico del que daremos cuenta en la siguiente retansmisión, pues llegado este momento se acercaba la hora de cenar, sagrada entre los presentes y sus parientes y amigos, motivo por lo que la continuación de la charla fue pospuesta hasta las dos de la madrugada, una vez acabados los programas televisivos de máxima audiencia.

No pocos asistentes rechazaron en su interior este cambio radical de planes, pero sabemos de buena fuente que ninguno osó hacerlo saber ni al resto del respetable ni a la comisión organizadora del evento ni al propio Profesor Hans Tilen, que muy alborozado salió a cenar a la manera germana, extrayendo ya en las escalinatas cucharas , tenedores y cuchillos de sus al parecer siempre bien pertrechados bolsillos interiores. Lo que más de uno del lugar observó y comentó.

SIGUE LA CHARLA DEL PROFESOR HANS TILEN SOBRE CIERTOS ASPECTOS POCO ESTUDIADOS DE LA VIVENCIA DE LA NATURALEZA EN LA CIUDAD, CONCRETAMENTE EN LA CIUDAD DE ZARAGOZA, QUE ES LO QUE NOS IMPORTA EN ESTE BLOG URBANO DE LO MÁS

SIGUE LA CHARLA DEL PROFESOR HANS TILEN SOBRE CIERTOS ASPECTOS POCO ESTUDIADOS DE LA VIVENCIA DE LA NATURALEZA EN LA CIUDAD, CONCRETAMENTE EN LA CIUDAD DE ZARAGOZA, QUE ES LO QUE NOS IMPORTA EN ESTE BLOG URBANO DE LO MÁS

Hans Tilen, exhausto tras sus cinco horas de introducción (como no podía ser menos, incluso en el caso de un teutón internacionalemente introductivo (introductiven universalen teutonicus), se atrevió a psar a la segunda fase de su charla (que oficialmente a efectos disciplinares es la primera parte). En ella se centró en el bonito tema de la vivencia cotidiana de la naturaleza en una ciudad como Zargoza. Comenzó con preguntas lanzadas al público sin mucha puntería: ¿Cómo saben ustedes la direción del viento en su ciudad? Las respuestas no le complacieron. Se trataba de saber si algún ciudadano zaragozano miraba al cielo para ver el movimiento de las nubes. La incomprensión del público reunido se tradujo en aulllidos francamente animales pero no por ello menos reconocibles como  locales.

La segunda pregunta del prof. Tilen tenía ya un poco más de mala baba: ¿ Es la cucaracha casera una especie o subespecie del escarabajo pelotero? El silencio se adueñó esta vez de la sala hasta que una voz recia contestó con firmeza. ¡No nos toque los huevos!, lo cual el pforf. Tilen entendió como una contestación científica sobre los huevos de estos insectos y su comparación con los del otro mencionado, lo cual le hizo llorar de entusiasmo: ¡Zaragoza está salvada!, repetía de lo más tontamente. A partir de ese momento la altura científica de la charla se elevó como un globo y las preguntas que se sucedieron lo hicieron como ramilletes de cohetes festivos, los tradicionales fuergos artificiales. Lamentablemente, tales fuegos chamuscaron las cabezas de más de un calvorota, lo que ´hizo intervenir a la Unidad Móvil de Cuidados Intensivos, con el subsiguiente alboroto y retraso de la charla, que hubo de suspenderse durante unos minutos de la rama del árbol más cercano. Pero el infatigble Prof. Tilen quiso aprovechar la ocasión que se le brindaba para seguir con su icisiva charla, de modo que preguntó: ¿El ailanto es una marca de amianto, un efecto del mal olor bucal o una mala hierba reverenciada en España como gran totem y tabú vegetal? ¿En qué se diferencia un petirrojo de un colirrojo? ¿Influye la velocidad del aire en el comportamiento copulador de las parejas (de todo tipo de parejas, parejenfollerungenallestipen) de la ciudad? ¿El pidoteo constante de la hierva produce orgasmos a los habitantes de Zaragoza? ¿El riego a manta es una variedad en la que se utilizan mantas cuarteleras para tapar las plantas cuando hace excesivo frío para que se mueran sin molestar a nadie? Esta sarta no ensartada de preguntas aparentemente sin hilación chispeó entre el distinguido y el indistinguible público durante más de media hora de reloj de arena. Posteriormente se fundieron los plomos y no hubo manera de saber qué cosa era qué cosa ni qué respuesta merecían las palabras del insigne profesor.

A la altura de esta mala jugada cortamos la retransmisión de la charla del profesor Hans Tilen a la espera de que Endesa o sus esbirros en la sombra realicen las oportunas revisiones. No sin antes desearles buen comienzo de fin de semana.

LA FALTA DE EDUCACIÓN SOBRE LA NATURALEZA, ¿TIENE REMEDIO EN ZARAGOZA? BREVÍSIMO RESUMEN DE UNA MAGISTRAL CONFERENCIA DEL PROF. HERR HANS TILEN, DEL INSTITUTO DE SINREMIEDIOS DE BERLIN (BERLIN SINREMEDIENINSTITUTE)

LA FALTA DE EDUCACIÓN SOBRE LA NATURALEZA, ¿TIENE REMEDIO EN ZARAGOZA? BREVÍSIMO RESUMEN DE UNA MAGISTRAL CONFERENCIA  DEL PROF. HERR  HANS TILEN, DEL INSTITUTO DE SINREMIEDIOS DE BERLIN (BERLIN SINREMEDIENINSTITUTE)

Como parte de su gira mundial a favor de los derechos de los seres vegetales, animales y minerales del planeta tierra en sus relaciones con el animal humano contemporáneo, el prof. Hans Tilen desparramó ayer noche una suculenta charla en Zaragoza ante un público boquiabierto e hipnotizado. Durante las cinco horas que duró su introducci´pon al tema, el prof. Tilen resumió su postura diciendo más o menos (en alemán berlinés) que la ciudadanía zaragozana podía tener el dudoso orgullo de ser la más ignorante del mundo sin duda ("sinduden masteraiterungen universalen desconocedenten") en todo lo referente a la inserción de la ciudad en la naturaleza o a la inserción de la naturaleza en la ciudad a principios del siglo XXI. Para ejemplificar el grado de ignorancia de la vecindad zaragozana al respecto esgrimiço los resultados de una encuesta en la que la mayoría de los encuestados aseguraban que en las calles de su ciudad hay gran número de acacias. "No es el dato concreto lo que más importa, aseguró el profesor, sino la seguridad con la que daban su respuesta. Sobre todo cuando se demuestra que la pregunta que se les hacía era si en los últimos años habían observado novedades notables en las costumbres de las moscas verdes en el entorno urbano". "Posiblemente se deba todo a un equívoco fundamental y general provocado por la fuerza del cierzo, ese viento que tan bien caracteriza  el aire ("ambienten") de la ciudad caesaraugustana.

Cuando tengamos el resumen  de las siguientes siete horas de charla del prof. Hans Tilden les daremos cumnplida difusión por este rápido medio de comunicación. Despedimos la retransmisión lanzando al ruedo la siguiente pregunta: ¿Ha visto usted alguna acacia plantada en alguna calle de Zaragoza? Se recompensará.

BIOGRAFÍAS, MEmORIAS. JARDINES CERCANOS, 29

BIOGRAFÍAS, MEmORIAS. JARDINES CERCANOS, 29

  BIOGRAFÍAS, MEMORIAS

Publicado el jueves 1 de junio de 2006 en la columna Jardines Cercanos  de Artes & Letras de Heraldo, bajo los cordiales auspicios de Antón Castro, maestro de columnistas, artistas & letristas, jardineros, biógrafos,  memorialistas, etc., y que ahora en Aragón TV hace un `programa llamado "Borradores" como podría llamarse "Pizarras" si no fuera por la asimilación de ideas con el apellido de un poderoso señor de Teruel y de las Endesas. "Pizarrines" sonaría a franco cachondeo. Por eso Antón, que es muy listo, lo dejó en "Borradores" y ni siquiera Gonzalo M. Borrás se da por aludido aunque bien pudiera.


Publicó Francisco J. Uriz  su "Pasó lo que recuerdas" (BArC): es tan
actual lo que cuenta y con una cabeza tan actual que pocos libros se
podrán publicar en Aragón que contengan una concepción del mundo y
unas experiencias vitales como las del autor. Podría ser libro de
Seuil, Einaudi,  Fertrinelli… serias editoriales de nuestro entorno
que albergan textos similares al suyo. Lamentablemente no hay tantos
Uriz en Aragón como para hacer de Eloy Fernández un editor realmente
contemporáneo, y bien que lo intenta.  Del libro de Uriz quisiera
destacar el título, en el que ya emerge como de amanecida toda una
declaración de principios. Hubo años que dediqué mis lecturas al
asunto de la biografía, la autobiografía, las memorias, a partir del
impacto de la maravilla intelectual de las "Confesiones" de Rousseau.
Estudiosos como Ricoeur o Gusdorf ("Auto-bio-graphie", "Les écriteurs
du moi"), trabajos concretos como "Recuerdos" del psicoanalista Jung,
la biografía de Proust de J. Kristeva, la de Hergé, padre de "Tintín",
por P. Assouline o la de Feltrinelli por su hijo Carlos… textos
creativos, reflexivos o documentales cuyos mejores representantes
pudieron titular con ese "Pasó lo que recuerdas" de Uriz. Un ejemplo:
el actualísimo exitoso "Mao, la historia desconocida", de Chang, si se
compara con otras aproximaciones, como el no menos exitoso en los años
setenta "Cuando la China despierte.." de Alain Peyrefitte, se
comprueba que es la subjetividad de lo que se recuerda o se quiere
recordar lo que gobierna el timón de toda biografía, con auto o sin
auto. Una cita de Gusdorf asentará esta frágil columna: "La conversión
autobiográfica, generadora de una nueva vida cuyo principio se
encuentra en la búsqueda del sentido de la vida". Esa capacidad es la
que distingue radicalmente unos libros de otros, el valor intelectual
y moral de sus textos, e incluso las intenciones diversas de las que
surgieron.

PROGEA EN GOOGLE. VAMOS A ENTERARNOS TODOS

PROGEA EN GOOGLE. VAMOS A ENTERARNOS TODOS

Es

Acceder

Vaya a la página principal de Google  
La Web    Imágenes    Grupos    Directorio    Noticias    Desktop    más »
  Búsqueda Avanzada
  Preferencias    
Búsqueda: la Web páginas en español páginas de España
 La Web Resultados 1 - 10 de aproximadamente 920 páginas en español de Progea. (0,11 segundos) 

.: EL POLLO URBANO :.

SOBRE EL CASO PROGEA. Publicado en su sección "El Independiente" de El Periódico de Aragón 2 de mayo de 2006 ¡Pincha la foto!! ...
www.elpollourbano.net/MAGAZINE-Informes-Progea.shtm - 50k - En caché - Páginas similares

.: EL POLLO URBANO :.

En Octubre y gracias al "caso Progea" ya la información sobre las Fiestas del Pilar, llegamos a los 122.545 superando todos los registros anteriores, ...
www.elpollourbano.net/MAGAZINE-ESTADISTICAS.shtm - 56k - En caché - Páginas similares
[ Más resultados de www.elpollourbano.net ]

progea - [ Traduzca esta página ]

index.
www.dii.uchile.cl/progea/ - 1k - 24 May 2006 - En caché - Páginas similares

PROGEA

progea - el desarrollo de la economía social, particularmente en el sector de la vivienda considerada como un derecho y muy específicamente en el ámbito de ...
www.tupatrocinio.com/ entidad-cultural.cfm/progea-566.html - 15k - En caché - Páginas similares

Quejas Online .com - progea

Cientos de quejas de empresas que han cometido fallos, aqui puedes dejar tu queja y reclamar lo que hayan hecho mal.
www.quejasonline.com/empresa.php?idempresa=311 - 38k - En caché - Páginas similares

La Coctelera: Caffè Reggio - Grupo Progea: La izquierda y el ...

Grupo Progea: La izquierda y el urbanismo en Gijón y en Asturias, del Editorial de El Comentario . TV. El tiempo ha demostrado que desde la política no ...
www.lacoctelera.com/caffereggio/post/2006/ 02/02/grupo-progea-izquierda-y-urbanismo-gijon-y-asturias - 39k - En caché - Páginas similares

La Coctelera: Caffè Reggio - PROGEA y la sorprendente compraventa ...

PROGEA y la sorprendente compraventa de la participación de la Fundación de Investigaciones Marxistas, de Eratóstenes de Hispania en El Comentario. TV ...
www.lacoctelera.com/caffereggio/post/2006/ 02/08/progea-y-sorprendente-compraventa-la-participacion-la - 26k - En caché - Páginas similares

Indymedia Barcelona: El ´caso Progea´ puede salpicar la asamblea de IU

The Indymedia Barcelona is a volunteer, non-corporate effort to provide news coverage and media resources to the disempowered.
barcelona.indymedia.org/ newswire/display/139433/index.php - 25k - En caché - Páginas similares

Corrupción inmobiliaria en IU: La denuncia del caso PROGEA (I ...

Corrupción inmobiliaria en IU: La denuncia del caso PROGEA (I parte) >> Unión de Jóvenes Comunistas de Castilla-La Mancha.
www.foroswebgratis.com/tema-orrupcion_inmobiliaria_ en_iu_la_denuncia_del_caso_progea_i_parte-37871-236295.htm - 103k - En caché - Páginas similares

www.iunidaragon.org Ver tema - Progea y la promoción inmobiliaria

Mensaje Publicado: Jue Abr 06, 2006 12:08 am Asunto: Progea y la ... Las relaciones entre Izquierda Unida de Aragón la entidad Progea son las mismas que con ...
www.iunidaragon.org/foro/viewtopic.php?t=69& highlight=&sid=f884d301acdd03f08eb30430e4e43a72 - 84k - En caché - Páginas similares




 

Restringir la búsqueda a los resultados | Herramientas del idioma | Sugerencias de búsqueda


Página principal de Google - Publicidad - Soluciones Empresariales - Todo acerca de Google

©2006 Google
Acceder
Vaya a la página principal de Google  
La Web    Imágenes    Grupos    Directorio    Noticias    Desktop    más »
  Búsqueda Avanzada
  Preferencias    
Búsqueda: la Web páginas en español páginas de España
 La Web Resultados 11 - 20 de aproximadamente 920 páginas en español de Progea. (0,13 segundos) 

El grupo inmobiliario de los comunistas

El grupo Progea, empresa inmobiliaria vinculada al Partido Comunista, ... El aviso llegó de Progea, grupo con el que esta cooperativa nunca había tratado ...
www.lne.es/secciones/noticia.jsp?pNumEjemplar=1281& pIdSeccion=35&pIdNoticia=407037 - 57k - En caché - Páginas similares

BORME de 8 de agosto de 2005 (núm. 150). GRUPO PROGEA, SOCIEDAD ...

GRUPO PROGEA, SOCIEDAD ANÓNIMA Unipersonal (Sociedad resultante) ALFRANCA, SOCIEDAD ANÓNIMA Unipersonal RIBERA DEL JALÓN, SOCIEDAD ANÓNIMA Unipersonal ...
www.boe.es/g/es/borme/dias/2005/08/08/053.php - 7k - En caché - Páginas similares

Progea

GERMANY. DR. RAINER FRIEDRICH E-mail : rf@iers.uni-stuttgart.de Tel : 49-711-7806122 Fax : 49-711-7803953. UNIVERSITÄT STUTTGART ...
www.dii.uchile.cl/progea/ proyectos/grenelem/fourth/fgermany.htm - 3k - En caché - Páginas similares
[ Más resultados de www.dii.uchile.cl ]

www.defensarural.org

Elcomentario.tv (2/2/06) La deriva asturiana de PROGEA y su apoderado político J. ... Elcomentario.tv (6/2/06); PROGEA y la sorprendente compraventa de la ...
www.defensarural.org/index.php?option=content& task=view&id=285&Itemid=2 - 16k - En caché - Páginas similares

www.defensarural.org

LA "TARTA GIJONESA" DE PROGEA. Por fin, un periódico local se interesa por el pastel inmobiliario de PROGEA, publicando el testimonio de ciudadanos timados ...
www.defensarural.org/ - 26k - En caché - Páginas similares
[ Más resultados de www.defensarural.org ]

Foro de debate en Nodo50

el escándalo Progea revive en España 13/03/2006 - 12:00 h ... plata: ¡de oriente a occidente, Progea promueve construcción libre ...
www.nodo50.org/estrellaroja/ foros/foro.php?f=1&i=228&d=0 - 26k - En caché - Páginas similares

Foro de debate en Nodo50

La lucha por el control de la inmobiliaria Progea, actualmente en los ... Sea como fuere, el asunto Progea ejemplifica el enfrentamiento existente entre ...
www.nodo50.org/estrellaroja/ foros/foro.php?f=1&i=229&d=0 - 5k - En caché - Páginas similares

Especial Expansión Urbanística de Gijón : : El Comercio Digital

El Grupo Progea y sus sociedades propias o participadas desarrollan diversas ... El GRUPO PROGEA, a través de Fuentejalón, promoverá a allí ocho edificios ...
canales.elcomerciodigital.com/ extras/expansion_urbanistica/progea.htm - 11k - En caché - Páginas similares

PSUCviu | Forums | Informació i Debat | IU, EL PCE Y LAS INMOBILIARIAS

pulso por el control del Grupo Progea, que enfrenta a la IU de Gaspar ... Los orígenes de Progea y la pista que conduce hasta IU de Asturias y ...
www.psuc.org/postp300.html - 66k - En caché - Páginas similares

La hoz y el ladrillo, juntos y, además, revueltos - El Periódico ...

La lucha por el control de la inmobiliaria Progea, actualmente en los tribunales, sigue tensando la relación entre el PCE e IU. EL PERIÓDICO (13/03/2006) ...
www.elperiodicodearagon.com/ noticias/noticia.asp?pkid=237298 - 33k - En caché - Páginas similares




 

Restringir la búsqueda a los resultados | Herramientas del idioma | Sugerencias de búsqueda


Página principal de Google - Publicidad - Soluciones Empresariales - Todo acerca de Google

©2006 Google
Acceder
 
  
La Web    Imágenes    Grupos    Directorio    Noticias    Desktop    más »
  Búsqueda Avanzada
  Preferencias    
 
Búsqueda: la Web páginas en español páginas de España
 
 
 
 La Web Resultados 11 - 20 de aproximadamente 920 páginas en español de Progea. (0,13 segundos) 
El grupo inmobiliario de los comunistas
El grupo Progea, empresa inmobiliaria vinculada al Partido Comunista, ... El aviso llegó de Progea, grupo con el que esta cooperativa nunca había tratado ...
www.lne.es/secciones/noticia.jsp?pNumEjemplar=1281& pIdSeccion=35&pIdNoticia=407037 - 57k - En caché - Páginas similares
BORME de 8 de agosto de 2005 (núm. 150). GRUPO PROGEA, SOCIEDAD ...
GRUPO PROGEA, SOCIEDAD ANÓNIMA Unipersonal (Sociedad resultante) ALFRANCA, SOCIEDAD ANÓNIMA Unipersonal RIBERA DEL JALÓN, SOCIEDAD ANÓNIMA Unipersonal ...
www.boe.es/g/es/borme/dias/2005/08/08/053.php - 7k - En caché - Páginas similares
Progea
GERMANY. DR. RAINER FRIEDRICH E-mail : rf@iers.uni-stuttgart.de Tel : 49-711-7806122 Fax : 49-711-7803953. UNIVERSITÄT STUTTGART ...
www.dii.uchile.cl/progea/ proyectos/grenelem/fourth/fgermany.htm - 3k - En caché - Páginas similares
[ Más resultados de www.dii.uchile.cl ]
www.defensarural.org
Elcomentario.tv (2/2/06) La deriva asturiana de PROGEA y su apoderado político J. ... Elcomentario.tv (6/2/06); PROGEA y la sorprendente compraventa de la ...
www.defensarural.org/index.php?option=content& task=view&id=285&Itemid=2 - 16k - En caché - Páginas similares
www.defensarural.org
LA "TARTA GIJONESA" DE PROGEA. Por fin, un periódico local se interesa por el pastel inmobiliario de PROGEA, publicando el testimonio de ciudadanos timados ...
www.defensarural.org/ - 26k - En caché - Páginas similares
[ Más resultados de www.defensarural.org ]
Foro de debate en Nodo50
el escándalo Progea revive en España 13/03/2006 - 12:00 h ... plata: ¡de oriente a occidente, Progea promueve construcción libre ...
www.nodo50.org/estrellaroja/ foros/foro.php?f=1&i=228&d=0 - 26k - En caché - Páginas similares
Foro de debate en Nodo50
La lucha por el control de la inmobiliaria Progea, actualmente en los ... Sea como fuere, el asunto Progea ejemplifica el enfrentamiento existente entre ...
www.nodo50.org/estrellaroja/ foros/foro.php?f=1&i=229&d=0 - 5k - En caché - Páginas similares
Especial Expansión Urbanística de Gijón : : El Comercio Digital
El Grupo Progea y sus sociedades propias o participadas desarrollan diversas ... El GRUPO PROGEA, a través de Fuentejalón, promoverá a allí ocho edificios ...
canales.elcomerciodigital.com/ extras/expansion_urbanistica/progea.htm - 11k - En caché - Páginas similares
PSUCviu | Forums | Informació i Debat | IU, EL PCE Y LAS INMOBILIARIAS
pulso por el control del Grupo Progea, que enfrenta a la IU de Gaspar ... Los orígenes de Progea y la pista que conduce hasta IU de Asturias y ...
www.psuc.org/postp300.html - 66k - En caché - Páginas similares
La hoz y el ladrillo, juntos y, además, revueltos - El Periódico ...
La lucha por el control de la inmobiliaria Progea, actualmente en los tribunales, sigue tensando la relación entre el PCE e IU. EL PERIÓDICO (13/03/2006) ...
www.elperiodicodearagon.com/ noticias/noticia.asp?pkid=237298 - 33k - En caché - Páginas similares

Página de resultados: 
Anterior

1

2

3

4

5

6

7

8

9

10

11

Siguiente

 
 

Restringir la búsqueda a los resultados | Herramientas del idioma | Sugerencias de búsqueda

Página principal de Google - Publicidad - Soluciones Empresariales - Todo acerca de Google

©2006 Google  
Acceder
  
  
La Web    Imágenes    Grupos    Directorio    Noticias    Desktop    más »
  Búsqueda Avanzada
  Preferencias    
 
Búsqueda: la Web páginas en español páginas de España
 
 
 
 La Web Resultados 21 - 30 de aproximadamente 920 páginas en español de Progea. (0,29 segundos) 
MINUTO DIGITAL Las claves del día en un minuto
Las tensiones internas por el control del grupo Progea, la gestora más ... El grupo Progea tiene su origen en la formación, en la década de los 70, ...
www.minutodigital.com/noticias/progea.htm - 23k - En caché - Páginas similares
Indymedia Estrecho/Madiaq : Sevilla: historias/11089
El ´caso Progea´ puede salpicar la asamblea de IU * Una fundación vinculada al PCE obtiene 4,8 millones por abandonar la gestora. El ´caso Progea´ puede ...
estrecho.indymedia.org/sevilla/ newswire/display/11089/index.php - 30k - En caché - Páginas similares
El Heraldo
Lote 180 m2 $ 6500 Huachi Belén, tras Disensa. Lotes 105 m2 $ 1500 Santa Rosa barrio Carmelitas. 2414239, 2420346, 098552566 ProGea. (24-27)* (389104) ...
www.elheraldo.com.ec/index.php?fecha=2006-4-26& seccion=Clasificados&subsec=Terrenos¬icia=n - 20k - En caché - Páginas similares
QuejasOnline.com > Empresas que empiezan por la letra "p"
Fuentecanal construcciones pertenece al grupo progea y están haciendo ... Han tenido proplemas con promociones del grupo progea en San Fernando, Cadiz ... ...
www.quejasonline.com/orden.php?letra=p&pag=3 - 44k - En caché - Páginas similares
Cuestiona.com
Luján acusó de las supuestas irregularidades a varios socios de Progea, ... En la actualidad, Progea sigue con sus negocios viento en popa y reafirmando que ...
www.cuestiona.com/ respuesta.php?idf=2145&idm=361647&t=2077&c= - 30k - En caché - Páginas similares
La Nueva España - Diario Independiente de Asturias - Gijón
... Vivienda que comparezca en la Junta para informar sobre el grupo Progea ... Progea entregó 462 pisos protegidos con una labor «destacadísima» de Hevia ...
www.lne.es/secciones/seccion.jsp?pNumEjemplar=1282& pIdSeccion=35&rand=1148470411994 - 90k - En caché - Páginas similares
[ Más resultados de www.lne.es ]
VisCon Tecnologic. Links
PROGEA Empresa especializada en la realización de software industrial para la visualización y control de procesos industriales, el MOVICON en sus versiónes ...
www.viscontec.com/seccion. asp?0=2&1=96870&2=4360 - 16k - En caché - Páginas similares
Estrella del Este - Masacrando a Ecovi
Aquí lo curioso es que la empresa que vino a repararlo , Tejados Asturias, fue por mediación de la FAV Gijón y PROGEA SA esta última no tenemos muy claro ...
www.nuevosvecinos.com/ estrelladeleste/mensaje.asp?id=428918 - 25k - En caché - Páginas similares
Joves Comunistes del Poble Català :: Joventut Organitzada Batalla ...
el escándalo Progea revive en España 13/03/2006 - 12:00 h ... autónoma maña, entre el ex presidente del Grupo Progea, Carlos Luján, ...
www.jcpc.info/ module-pnForum-viewtopic-topic-122-start-0.html - 118k - En caché - Páginas similares
http://www.viviendadigna.org :: Ver tema - Previsiones para aragón
La lucha por el control de la inmobiliaria Progea, actualmente en los tribunales ... Luján acusó de las supuestas irregularidades a varios socios de Progea, ...
www.viviendadigna.org/foros/viewtopic. php?p=5787&sid=38d863b463dcf8059ace7cab4094ee70 - 31k - En caché - Páginas similares

Página de resultados: 
Anterior

1

2

3

4

5

6

7

8

9

10

11

12

Siguiente

 
 

Restringir la búsqueda a los resultados | Herramientas del idioma | Sugerencias de búsqueda

Página principal de Google - Publicidad - Soluciones Empresariales - Todo acerca de Google

©2006 Google 

VARGAS LLOSA. EVOCACIÓN

VARGAS LLOSA. EVOCACIÓN


JARDINES CERCANOS, 28. Publicadoen Artes & Letras de Heraldo de Aragón el jueves 25 de mayo de 2006

       

VARGAS LLOSA, LECTURA Y RELECTURA

Para preparar los ojos para la lectura de la última novela de Vargas
Llosa, "Travesuras de niña mala" (Alfaguara) me ha dado por releer
aquel maravilloso ensayo suyo "La orgía perpetua. Flaubert y Madame
Bovary" (1975) que fue una de las primeras cosas que leí cuando salí
de la cárcel a finales de aquel felizmente finalizado año. Al entonces
director de la cárcel de Torrero la palabra "orgía" no le pareció nada
oportuna para entrar a formar parte del mundo enrejado en el que
imperaba y me dejó castigado sin ese entretenimiento mientras me
permitía la entrada de un tomito de fábulas eróticas de Samaniego que
compensaron con sus picardías la tristeza de la prohibición. ¿Qué
mecanismos funcionan en la cabeza de un lector para que ahora,
convenientemente alejado de directores de cárceles y autoridades
semejantes, retrase la lectura de la última novela de Vargas Llosa
para releer ese ensayo? Tengo la impresión de que si conociera la
respuesta no debería difundirla. El caso es que aquí estoy,
disfrutando de nuevo de unas páginas que me animaron a querer ir más
lejos aún de lo que hubiera creído querer ir como escritor cuando, aún
callado, escribía en el azul lejano del cielo mis obras completas.
Vargas Llosa es parte de nuestras vidas, no sólo de nuestras vidas
literarias o lectoras. Tenemos el privilegio de compartir con él (y
con bastantes más, afortunadamente) una porción de tiempo convulso y
apasionante, y sus obras y sus opiniones vivifican la única actitud
digna, la de mantenerse a pie firme y encarar las verdades de la vida
y de la muerte como verdades naturales, útiles y necesarias pero no
fatales. Los personajes de Vargas Llosa, y él mismo como personaje
aquí entre nosotros (quiero decir, entre unos cientos de millones de
nosotros) muestran la faz de quienes están dispuestos a caer y a
levantarse asidos a una frase, a un verbo, a una minúscula conjunción
liberadora.

ELOGIO DE LA ROSALEDA DEL PARQUE GRANDE DE ZARAGOZA EN ESTOS DÍAS DE PRIMAVERA EN LA QUE LAS ROSAS Y EN GENERAL TODAS SUS PLANTAS BRILLAN Y PERFUMAN MARAVILLOSAMENTE

ELOGIO DE LA ROSALEDA DEL PARQUE GRANDE DE ZARAGOZA EN ESTOS DÍAS DE PRIMAVERA EN LA QUE LAS ROSAS Y EN GENERAL TODAS SUS PLANTAS BRILLAN Y PERFUMAN MARAVILLOSAMENTE

 Este texto, con pequeños ambios, pertenece  a mi "Pequeña Guía del Parque Grande", Zaragoza, 1997, pp. 31-34

Hemos llegado junto a un niño que ha conseguido atrapar una estrella. Estrella de mar o estrella del firmamento, quién lo sabría decir. Nos encontramos en medio de una dos zonas del mismo mundo romántico: a un lado el umbrío aroma de los altos cipreses (Cupressus sempervirens), ensimismados en su propia verticalidad. Al otro lado la luminosidad horizontal de los caminos entre aromas de rosas. Cipreses y rosas. ¿Nostalgia y esperanza? ¿Las penas del amor y también sus alegrías? ¿La muerte y la vida? ¿La mística y el erotismo?En los cuentos orientales el ciprés representa frecuentemnte al joven enamorado y la rosa a la bien amada. Los tenemos aquí reunidos en este jardín. Fugacidad de las rosas, eternidad de los cipreses.

Cuando en 1940 se construyó esta Rosaleda hacía muchos siglos ya que la rosa y el ciprés convivían en el simbolismo del amor. La rosa en su aspecto humano, pasional  y carnal; el ciprés en su aspecto divino y espiritual. Así, en este jardín  del Parque Grande  podemos percibir el impulso de la pasión amorosa y también del fervor místico.

Pasear entre rosales. Los fornidos y tupidos setos de aligustre definiendo contornos ajardinados. Las rosas, de muy diversos tipos, perfectamente  distribuidas, alternando formas, texturas, colores y olores. Los aligustres arbustivos guardando los rincones de cada parterre. Las falsas acacias (aquí Sophora japonica pendula) de los centros, de extrañas ramas colgantes y muy tortuosas, con sus hojas completamente enrolladas en sí mismas, presentan una imagen sofisticada de belleza inusual. Las moreras péndulas (Morus alba pendula), con sus grandes hojas en flexibles ramas que parecen desfallecer de pura languidez.

Todo, proporciones y formas, hace pensar en ese locus amoenus (lugar agradable) del que ya nos hablaba la literatura medieval: recinto privilegiado del encuentro amoroso y también del encuentro con uno mismo y con las decisiones personales que labrarán un destino. Amor y meditación.

Por aquí también escucharemos claramente el canto de los pájaros, generalmente ocultos a nuestras miradas entre el impenetrable ramaje de los cipreses. Por cierto, en uno de esos viejos cipreses (en este caso, un Cupressus macrocarpa) que fanquean el camino central podemos ver el resto de una gran hiedra que atenazaba y tronco y ramas del árbol. Se cortó su tallo para que se secara y no perjudicase con su abrazo la vida del ciprés. En este jardín de amor alguien verá en ella un símbolo vegetal del “mal amor”, el amor egoísta, que puede dañar mortalmente a su víctima.

En el extremo opuesto al monumento a Rubén Darío (obra del escultor oscense Ángel Orensanz) encontramos árboles de dos especies muy interesantes: la melia (Melia azedarach) y el árbol de Júpiter (Lagerstroemia indica). Este último se ha difundido bastante en nustra ciudad. Sus delgadas ramas de lisa corteza gris y sus características florecitas lilas lo hacen inmediatamente reconocible. Si es otoño, sus pequeñas hojas ovaladas toman una coloración roja de impresionante luminosidad. Las melias tiene un porte inolvidable: sus copas tienen el toque exótico y elegante de lo oriental. De sus flores emana un denso perfume agradabilísimo, semejante al de la lilas. En la cima de sus copas forman verdaderos jardines aéreos. Con los huesos de sus frutos hacen rosarios los monjes budistas. Como hacen rosarios los monjes cristianos con los pétalos de las rosas. 

CENTRO MERCANTIL DE ZARAGOZA. FACHADA. ADORNO VEGETAL

CENTRO MERCANTIL DE ZARAGOZA. FACHADA. ADORNO VEGETAL

                                                                       

                                                     FLORA MODERNISTA

                                                           EN ZARAGOZA

           

           

                                                    PARTE PRIMERA[1]

                                               UN JARDIN EN EL CENTRO:

                                    LA FACHADA DEL CASINO MERCANTIL

                           DE FRANCISCO ALBIÑANA CORRALÉ (1910-1914)

Este texto precedió al que finalmente fue publicado en el libro "Una joya en el centro" (Zaragoza, Cajalón, 2004). Lo hago público aquí porque, pese a deficiencias que luego fueron subsanadas, permite conocer algunos asuntos más de los que fue posible resumir para esa publicación y también porque ofrece una creo que buena bibliografía orientativa sobre el Modernismo y sobre éste en Zaragoza.

PRELIMINARES

Nacido en 1887,  en octubre de 1910 obtenía en Madrid el título de arquitecto F. Albiñana Corralé, a sus 28 años. En 1912 construía en Zaragoza la primera obra diseñada por él: el Panteón de la familia de Antonio Portolés en el Andador de la Fosa Común del Cementerio de Torrero, en el que la presencia de ornamentación de motivos vegetales es de notable relevancia y en el que su gusto por el simbolismo destaca en el curioso diseño de la puerta metálica. Para la escultura de este panteón contó con la colaboración del escultor Palao[2]. La segunda obra sería la casa de Lagasca 3 (1912) para Nicomedes Felipe, para cuya fachada diseñó una elegante ornamentación de vegetal.

La Sede del Casino Mercantil

La tercera obra que se le contrataría en Zaragoza sería la modernización y acondicionamiento del palacio de los Azara (1535) para su utilización como sede del Centro Mercantil. Ganó el concurso el 30 de abril de 1911 y en la sesión de la Junta del Casino del 5 de junio de 1912 presentó los proyectos.

La remodelación de la Sede Social del Centro Mercantil Industrial y Agrícola de Zaragoza se inauguró oficialmente en la tarde del día 10 de octubre de 1914, habiéndose finalizado ya las partes esenciales del proyecto.

BREVE RESEÑA BIOGRÁFICA

Francisco Albiñana (Zaragoza, 1887-1936) era hijo de un miembro de una familia de clase media-alta de Tarragona (médicos, notarios, historiadores). Su padre, Francisco de Paula, buen dibujante y acuarelista fue durante muchos años maestro de obras en Barcelona. Casado con Anselma Corralé, trasladó su domicilio a Zaragoza: jefe de bomberos de la ciudad, profesor en la Escuela de Artes y Oficios y maestro de obras del Ayuntamiento, época en la que fue especial colaborador de Ricardo Magdalena (sobre todo en la Facultad de Ciencia y Medicina, en el Matadero y en la fachada posterior del Teatro Principal). El padre de Albiñana murió en 1919, a los 78 años. (Para entonces Francisco ya había realizado el citado panteón, la sede del Casino y la casa Marín Corralé en la calle Don Jaime, nº 35). La muerte de su padre en junio de 1919 le afecto tanto que estuvo tres meses de baja y presentó la dimisión de su cargo de concejal (lo era desde nov. de 1915 por Izquierda Republicana) el 24 de septiembre de ese año de 1919.

En 1913 casa con Francisca Gayán (de Daroca) y pone su domicilio en el Coso, nº 135. Tienen dos hijos: Francisco y Ángela.

En noviembre de 1915 ingresa en la Masonería Universal, en la Logia Constancia nº 348, con el nombre simbólico de “Fidias”. Su fecha de exaltación, 1917. En 1919 (que se disolvió la logia) era 2º Experto.

De octubre de 1915 a septiembre de 1916 viaja por Europa. Pasa los veraneos en San Sebastián  y en San Juan de Luz, un tanto alejado de la vida social zaragozana.

De 1920 a 1936 desarrolla una intensa actividad profesional, social y política. Su vida masónica recomienza en 1926 con la creación de la Logia Moncayo nº 50 (1926-1930). Su compromiso socialista se concreta en su ingreso en el PSOE en 1928. En 1931 se presenta a diputado por el PSOE. No sale elegido. En 1932 se vuelve a constituir la Logia Constancia nº 16 (45 miembros). Albiñana busca el domicilio en C/Verónica, nº 4, donde se instala el templo y donde se reúnen hasta 1936.  En 1934 es nombrado Venerable Maestre, máximo cargo de la Logia. Será Primer Vigilante en los años siguientes.

En 1936 viaja a Rusia y escribe sobre ello en “El Dirio de Aragón”, con franca simpatía (aunque espíritu crítico) hacia la revolución rusa.

El 18 de julio de 1936 es detenido por los insurrectos, que no consiguen que delata a sus hermanos de Logia ni a sus compañeros del PSOE. El 3 de octubre de 1936 es fusilado en Valdespartera[3]. Tenía cincuenta y cuatro años.

OBRAS MÁS IMPORTANTES DE FRANCISCO ALBIÑANA

(Con * los edificios de los que se comenta el adorno de sus fachadas)

*Lagasca, 3 (1912) para Nicomedes Felipe

*Casino Mercantil (1911-1914)

Cadena, 23 (1913)

Predicadores, 10 (1913)

Coso 110 (1914)

Reconquista 18 (1914)

Méndez Núñez 3 (1914)

Lagasca 5 (1914)

Coso 128-130 (1914)

Rufas 18 (1915)

Mayoral 36 (1916)

*Don Jaime 35 (1916) para sus cuñadosVíctor y Angel María Martín Corralé. Médicos radiólogos. (En la decoración se utilizaron pavimentos de la casa Escofet,con diseño de Doménech i Montaner).

Armas 76 (1917)

Rufas 19 (1918)

Conde Aranda (1924)

*Almagro 5 (1925) para Pedro Gimeno Palomar

Pza. de los Sitios 2 (1926) para Antonio Bruned. Ambos promotores. Venta de pisos.

Hernán Cortés 42 (1926 ) para  Luis Sanz Ibarz.

Bolonia (del Arte) (1926) para Manuel Blasco.

María Agustín (1927) Pablo Salvador

“Casa del Labrador”, Coso 104 (1927) influencia socialdemocracia vienesa

La Paz 16 (1927)

Zumalacárregui 23 (1928) para Antonio Minguell

Mefisto 7 (1928) para Luis González Marcilla

Costa “La Voz de Aragón” (1928)

Madre Sacramento 40-42 (1929) para Celso Moreno

Coso 6, “Farmacia Nueva” (1930 ) para Ramón Puig Mas (amigo suyo). Vidrieras              inspiradas en Mondrián, conjunto inspirado en “Decó” + Sezzesion de Hoffmann

Camino de las Fuentes (1931) vivienda obrera para Rafael Moreno

Mefisto 9 (1931) para  X. Aparicio, constructor. Venta de pisos. Racionalismo.

Conde Aranda109-111 (1932). Racionalismo

Almagro/Pizarro (1933)

Conde Aranda 75 (1934)

Coso 2/Azoque 5, Almacenes “La ciudad de Londres”. Cubista-racionalista.

Pza. de los Sitios (1934) para Gabino Velilla. Inspirado en Hoffmann.

Entre sus colaboradores estuvieron los siguientes profesionales:

Alejo García, cantero. Casino.

Dionisio Lasuén, escultor. Casino.

Carlos Palao. Escultor. Panteón Portolés. ¿Don Jaime 35?)

José Bueno, escultor

Angel Díez Domínguez, pintor. Casino: techo restaurante.

Enrique Cubero, decorador. Casino: escalera.

Francisco Sorribas. Casino: Salón Café: galería circular.

Hay coincidencia en atribuir  especiales influencias en la obra de Albiñana de la Wagnerschule de Viena, del estilo “Sezzesion” y del Art Nouveau del norte, personalizadas en los arquitectos Peter Behrens, Joseph Hoffmann, Victor Horta, 

Se consideran sus principales edificios (aún en pie) de los siguientes estilos:

1911-1915: Modernismo: Casino

1915- 1920: Vienés: Lagasca 5, Don Jaime 35

1920-1936: Racionalismo: Mefisto 9, Conde Aranda 109

Y se suele hablar de tres grandes influencias en sus concepciones arquitectónicas:

Estilo Secesión, en la Escuela de Arquitectura de Madrid.

Noucentisme en la Cataluña de su juventud ( a la que estaba muy ligada por familia)

Estilo vienés en los años finales de la década 1910-20.

EL ADORNO VEGETAL DE LA FACHADA DEL CASINO MERCANTI

En la construcción de la fachada colaboraron el cantero Alejandro García, que la  realizó en piedra de Floresta, con placados de mármol de La Puebla del Albortón en su planta baja, y el herrero Francisco Ibarz, encargado de la cerrajería artística de los balcones. El 23 de enero de 1913 se colocó la primera piedra (de  mármol de La Puebla). El 24 de marzo estaban terminados los modelos y detalles de la decoración de mármol. Desde el 17 de octubre de 1913 se nombró asesor para la activación de los trabajos al escultor Dionisio Lasuén, ante los retrasos producidos en el diseño de los modelados de la fachada principal del edificio. Tampoco se habían podido realizar los trabajos de cerrajería artística porque Albiñana no había entregado los dibujos correspondientes al proyecto.

En la fachada del Casino se combinan con acierto y elegancia dos tipos de adorno: el adorno de motivo geométrico (líneas rectas, líneas ondulantes, círculos, esferas, incisiones cuadradas y rectangulares) que se utiliza fundamentalmente en los miradores y el adorno de motivo vegetal que se utiliza en todo el espacio disponible. Este último está realizado en piedra y en hierro forjado (en los balcones).

Para la descripción de los miradores, siendo éstos idénticos, es suficiente la que hacemos de uno de ellos, sin necesidad de reiterar la identidad entre los dos. En cuanto al cuerpo central de la fachada, el adorno está compuesto a ambos lados de un eje vertical de simetría, por lo que bastará dar cuenta de la ubicación (en ménsulas, mensulillas, balcones, entre vanos, etc) de los elementos decorativos que lo componen. Escapan de esta simetría las columnas pareadas de la planta baja y de la terraza. El diseño de la rejería de los balcones es el mismo para los balcones de cada planta.

En cuanto a la identidad botánica del adorno, damos siempre el nombre popular de la planta y su nombre científico (en cursiva y entre paréntesis) sólo en la primera ocasión en la que una planta es mencionada o en aquellos casos en las que sea preciso evitar el equívoco (como sucede siempre con las rosas silvestres y las de jardinería)

Identificación  de formas vegetales

Parece preferible hacer una identificación (con ubicación) de las formas vegetales siguiendo un recorrido de abajo arriba, por las cuatro plantas del edificio para acabar en la terraza.

Planta calle:

Las puertas tienen un tratamiento especial, con profusión de formas vegetales.

En los arranques del dintel, a ambos lados, hay esculpidas sendas ramas con cuatro hojas compuestas, palmeadas, de seis foliolos, posiblemente inspiradas en las del castaño de Indias (Aesculus hippocastanum) aun cuando la forma de sus foliolos no se corresponda. Más adelante volveremos a hablar sobre estas hojas, que se esculpieron también en otros lugares de esta fachada.

Bajo el saliente de los miradores hay hasta trece grandes hojas compuestas, palmeadas, de seis foliolos, inspiradas en las del castaño de Indias. Junto a ellas se muestran dos grandes flores del tipo de los girasoles (Helianthus annuus) o de las matricarias (Chrysanthemum parthenium).

En los laterales, sobre los escudos hay una hilera de  hojas de laurel (Laurus nobilis) dispuestas verticalmente. En su parte inferior asoman grandes hojas de cardo (Carduus nutans).

En el centro, en la clave del arco adornan la ménsula un grupito de tres hojas de laurel sobre un círculo (un aro). A ambos lados de la ménsula, frondas de hojas de laurel sobre las cuales se muestran dos grupos de hojas de roble cada uno con la copa vacía de una bellota. Concretamente parecen de roble albar (Quercus petrea) tanto por la forma de la hoja como por la falta de pedúnculo del fruto.

Bajo los balcones, en las tres ménsulas principales hay tallos de rosas (Rosa floribunda) con flor en el ápice y cinco hojas laterales que refuerzan el esmerado naturalismo de la flor). En las ocho mensulillas hay tallos con siete hojas anchas, lejanamente semejante a las hojas de álamo (pero también opuestas y formando un conjunto como de hoja pinnaticompuesta impar). Es difícil identificar la especie botánica de estas hojas o foliolos de hoja dada la contradicción entre su disposición y su anchura. Estas hojas ocultan parcialmente lo que parece un compás de cantero. En los laterales de todas las ménsulas y mensulillas hay grupos de hojas de laurel. Los espacios entre ménsulas y mensulillas están cubiertos por grupos de hojas de laurel.

Las tres columnas pareadas tienen capiteles adornados con motivos vegetales. De izquierda a derecha:

1. Hilera de seis grandes hojas compuestas palmeadas de seis foliolos bajo la que hay otra hilera de doce hojas (más pequeñas) de hiedra en grupos de tres. Entre unas y otras hojas asoman seis esferas, como si fueran otros tantos frutos de la planta de grandes hojas, cuya identidad botánica es difícil de precisar.

2. Hilera de cuatro flores de rosal (Rosa Floribunda) acompañadas de veinticuatro hojas de su misma especie (seis por flor), bajo la que hay otra hilera de veinticuatro hojas de rosal más pequeñas.

3. Hilera de ocho flores de girasol (Helianthus annuus) bajo la que hay otra hilera de cuatro amplias hojas de cardo.

Primer piso:

En la parte baja de los miradores hay grupos de hojas de hiedra (Hedera helix). El diseño de los grupos de hojas de hiedra es como sigue: trece  hojas y dos frutos, doce hojas y dos frutos, 12 hojas y dos frutos, trece hojas y dos frutos (A-B-B-A).

Sobre las ventanas de este piso de los miradores hay grupos de hojas compuestas, palmeadas de cinco foliolos, inspiradas en las de un tipo de ranúnculo, posiblemente la sardonia (Ranunculus sceleratus) o en las de la cincoenrama (Potentilla alba), acompañados de hojas de hiedra (Hedera helix). Este adorno se compone, a cada lado de la ventana: de una gran hoja de sardonia, tres hojas de hiedra, dos hojas de sardonia superpuestas, acompañadas de tres frutos y dos hojas superpuestas. El diseño de estas hojas oscila entre las que se asemejan más a un posible modelo de sardonia y las que parecen más inspiradas en las del arce campestre (Acer campestre) que más arriba veremos ocupar los espacios entre los vanos del segundo piso. Ciertamente, la identificación botánica de las distintas variantes de hojas compuestas pentalobuladas que hallamos adornando esta fachada es difícil y no creemos que pueda ser nunca absolutamente certera: los rasgos predominantes en unas u otras hojas talladas (¿en razón de una intención o simplemente del trabajo de distintas manos?) dificultan la empresa.

A la misma altura, en esta parte alta del mirador del primer piso, en los laterales de los extremos hay hileras verticales de ocho hojas de hiedra cada una. Un poco más arriba, la parte inferior de unos grandes escudos sin blasón se acompaña de dos grandes hojas de palmito (Chamaerops humilis). A ambos lados de ellos dos guirnaldas horizontales de hojas y frutos de laurel abrazan los extremos del mirador.

Los cuatro balcones de esta planta tienen una cenefa superior de hojas trilobuladas sin identidad botánica, inspiradas en algún tipo de XXX ( ). En la franja central hay cinco guirnaldas dispuestas simétricamente, en las que se forjaron figuras de rosas (Rosa floribunda) con el siguiente diseño: una rosa con hojas, tres hojas, tres rosas con hojas, tres hojas y una rosa con hojas (A-B-B-A), todas ellas realizadas con gran realismo sobre modelos de hermosas grandes rosas abiertas de jardinería.

En los cinco espacios entre vanos hay esculpidas en piedra grupos de hojas y frutos de laurel y de hiedra. El gusto por la simetría llevó a realizar tres grupos de hojas y frutos de hiedra dispuestos de tal forma que de las seis hojas presentes las dos de los extremos fuesen de gran tamaño y de las cuatro centrales las dos superiores fuesen de un tamaño intermedio pero más grandes que las dos inferiores. Los dos frutos presentes se dispusieron a ambos lados de las hojas pequeñas inferiores del centro de la composición. Detalles de este tipo evidencian una muy esmerada composición de los motivos vegetales (y en genera,l de todos ellos) que adornan esta fachada.  En los tres espacios principales entre los vanos las hojas de laurel se acompañan con los que parecen ser grupos de seis grandes flores que recuerdan las de campanuláceas como la Campanula fastigiata, Campanula persicifolia, Campanula speciosa, etc., pero aún más las flores de una gagea, la Gagea fistulosa, liliácea que nace espontáneamente en pastos y prados de montaña. Ese lejano parecido (que hace casi inverosímil su identificación botánica) hace pensar también en que estas figuras podrían no estar representando flores sino borlas. Su disposición (hacia arriba, en vez de la natural “en caída”), sin embargo, hace también difícil esta otra identificación.

Bajo los balcones del segundo piso hay tres ménsulas grandes y ocho mensulillas. Las ménsulas grandes están decoradas con los siguientes elementos: una gran hoja de vid (Vitis vinifera) en el cuadrado central, una corona floral de pequeñas rosas silvestres (Rosa canina) que abraza la ménsula, grupos de hojas de laurel con frutos en los laterales y cuatro grandes rosas silvestres en la base.

Las mensulillas se adornan cada una con una gran rosa (Rosa floribunda) central y dos hileras laterales (una a cada lado) de cuatro flores de seis pétalos (las hay de cinco, pero parece que por error en su realización), cada una con su pedúnculo independiente, cuya forma esté claramente inspirada en la de los tulipanes (Tulipa sp).

Segundo piso:

En los miradores, acompañando la parte superior de los escudos hay dos ramas de laurel con ocho hojas y dos frutos en posición vertical. Inmediatamente sobre los escudos (coronándolos) una doble cenefa de seis hojas y siete flores de cinco pétalos sobre ellas, posiblemente de un tipo de rosa silvestre como el escaramujo (Rosa canina). A ambos lados de esta cenefa, en los huecos de las ventanas inferiores de este piso del mirador, hay un sendos ramos de laurel con once hojas y seis frutos.

La parte superior de este piso de los miradores está adornada con veinticuatro grandes hojas compuestas pentaloluladas, como las que vimos en el primer piso de estos miradores, inspiradas en las hojas de ranúnculo, posiblemente la sardonia (Ranunculus sceleratus) o en las de la cincoenrama (Potentilla alba). Las hojas se tallaron con tal esmero que muchas de ellas aparecen superpuestas unas a otras, con una apariencia de realidad y vitalidad vegetal muy bien conseguida. Las hojas están acompañadas de dieciseis frutos (ocho de ellos pendientes de sus respectivos pedúnculos). El diseño de esta parte se completa con dos cenefas verticales de esferas, una cenefa horizontal de formas esféricas y un grupo de tres esferas haciendo triángulo. Sobre todo ello hay dos cenefas horizontales cada una de ellas con  nueve flores de rosa silvestre.

El diseño del adorno de los balcones es el siguiente: una cenefa superior de hojas trilobuladas, una cenefa inferior de otro tipo de hojas trilobuladas (idénticas a las que hacían la cenefa superior de los balcones de la primera planta) inspiradas en algún tipo de XXX ( ), y una franja central con tres guirnaldas simétricamente dispuestas de rosas con hojas: una rosa con doce hojas, dos rosas con diecisiete hojas y una rosa con doce hojas. Entre los balcones hay tres espacios en los que se muestran hojas de hiedra también de forja.

Los tres espacios centrales entre vanos están decorados con sendos escudos sin blasón, rodeados en su parte superior por hojas de laurel y en su parte inferior por líneas rectas verticales. En los cinco espacios entre vanos se esculpió adorno con motivo vegetal siguiendo un diseño de simetría. De izquierda a derecha: tres hojas de vid con frutos, tres hojas trilobuladas inspiradas en las del arce campestre (Acer campestre) con frutos (pero éstos, aquí unas bolas con salientes, semejantes a los frutos del castaño de Indias, no se corresponden) y tres hojas de arce con frutos, tres hojas de vid con frutos y tres hojas de vid con frutos (espacio central), tres hojas de arce con frutos y tres hojas de arce con frutos, tres hojas de vid con frutos (3V – 3A+3A – 3V+3V – 3A+3A – 3V).

Bajo los balcones del piso superior hay ocho mensulillas adornadas cada una de ellas con dos rosas (Rosa floribunda) dispuestas verticalmente, con seis hojas laterales (tres a cada lado), acompañadas por seis flores de tulipán, dispuestas verticalmente, tres a cada lado. A ello se suman, en los dieciséis laterales de las mensulillas (haciendo rincón), tallos con grupos de seis hojas de hiedra y tres frutos. Es notable que en un espacio tan humilde se hayan esculpido hasta tres tipos de especies botánicas perfectamente identificables, a una altura respecto de la calle que hace imposible su disfrute si no es desde los balcones de este mismo piso. Todo ello: las grandes rosas, los tulipanes y las hojas de hiedra, de gran tamaño, muestran un impresionante realismo: Los pétalos de las flores (especialmente los de las rosas) gozan de una carnosidad muy atractiva y las nervaduras de las hojas de hiedra consiguen, a la luz cambiante del día, dotarles de un “movimiento” como el que tendrían de ser hojas reales sometidas al empuje del aire.

Tercer piso:

La parte inferior de los miradores tiene un adorno de doce hojas trilobuladas dispuestas en grupos de dos. Estas hojas guardan cierta semejanza con las hojas de hierro forjadas para las cenefas inferiores de los balcones del segundo piso, y como ellas están inspiradas en algún tipo de XXX ( ). La parte superior se adorna con hojas de laurel con frutos.

En los espacios entre vanos hay ocho tallos de hiedra (distribuidos como sigue:    1-2-2-2-1) con grupos de trece hojas y diecisiete frutos cada uno.

Los balcones están decorados con una cenefa superior de diez hojas de rosal dispuestas de dos en dos. En el centro, seis guirnaldas descendentes de diez hojas de hiedra cada una. En cada uno de los laterales, una cenefa de cuatro hojas de rosal dispuestas de dos en dos y dos guirnaldas de hojas de hiedra como las anteriores.

Bajo el alero del último piso (terraza) hay tres grandes ménsulas centrales y ocho mensulillas, todas ellas profusamente adornadas, así como los espacios entre ellas. El adorno de las ménsulas consta de los siguientes elementos:

Una corona floral de grandes flores que abraza la ménsula. Se trata de flores de distinto tamaño, algunas francamente grandes, todas ellas de cinco pétalos, posiblemente inspiradas en un tipo de rosa silvestre acompañadas de sus hojas pero también, en los laterales de la guirnalda, por hojas y frutos de laurel. En la parte superior de cada ménsula, en el centro, una hilera vertical de tres grandes rosas (Rosa floribunda). De la rosa central sale un tallo con seis hojas en grupos de tres, realizado con gran naturalismo. Sobre estas rosas, un grupo de doce hojas compuestas, palmeadas, pentafoliadas, inspiradas en las hojas de la sardonia, acompañadas de fturos esféricos. Desde este grupo de hojas de sardonia desciende, por ambos laterales de la ménsula, sendos largos y gruesos tallos verticales de cada uno de los cuales brotan dos hojas del mismo tipo superpuestas a otras dos. Entre estas hojas se encuentran las más bellas hojas de cinco foliolos esculpidas en esta fachada.

Las mensulillas tienen en el centro de su parte superior una gran rosa (Rosa floribunda), acompañada con seis hojas laterales (tres a cada lado). Cada uno de sus laterales, haciendo rincón, se adornan con dos grandes flores de gran botón central y ocho pétalos, bajo las cuales hay dos hojas de sardonia superpuestas y lo que parece ser parte de una tercera, más abajo, sobre la que penden de sendos pedúnculos, uno encima de otro en vertical, dos frutos esféricos. Los espacios entre mensulillas y entre ménsulas y mensulillas están adornados con cenefas horizontales de tres flores de gran botón central y siete pétalos. Es difícil precisar la identidad botánica de estas flores de siete y de ocho pétalos.  Podrían querer hacer pensar en las flores de alguna especie de la familia de las compuestas, como el girasol o algunas margaritas (Chrisanthemum leucanthemum). En esta fachada, en la que con tanto detalle se ha esculpido la mayor parte del adorno de tipo vegetal, sorprende la inexactitud en la realización de estas flores, por lo demás de formas muy bellas: la delicada textura de sus pétalos, que remite con sorprendente realismo a la suavidad y flexibilidad de los existentes en la naturaleza.

En el último piso, la terraza tiene una pérgola de cinco columnas pareadas y una solitaria, cada uno de cuyos capiteles se adorna con cuatro flores centrales acompañadas cada una de dos grupos de hojas. Por el diseño de las hojas podría tratarse de la anémona nemorosa (Anemone nemorosa), un tipo de ranunculáceas que experimentó a partir del siglo XVI un especial tratamiento hortícola a la búsqueda (como en el caso de las rosas) de ejemplares cada vez más impresionantes para su uso como adorno floral en los jardines y para su uso en el adorno doméstico como flor cortada. Hay que señalar que estos capiteles son de época posterior a la intervención de Francisco Albiñana y que, contrariamente al resto de los adornos de esta fachada, fueron realizados (en los años cuarenta) con cemento mediante moldes y no esculpidos en piedra a partir de modelos como lo fueron todos los demás.

Cada lado del vano del mirador del antiguo observatorio se adorna con tallos de los que nacen grupos de hojas compuestas, palmeadas y pentalobuladas, inspiradas en las de un tipo de ranúnculo ( ¿? ) o en las del malvavisco salvaje (Malva álcea) y tallos con hojas de hiedra. Hay siete hojas de ranúnculo o de malvavisco y nueve de hiedra en cada uno de los dos lados Entre las hojas de ambos tipos hay doce frutos de forma esférica.

COMENTARIOS A LA DECORACIÓN VEGETAL DE LA FACHADA

DEL CASINO MERCANTIL

1.- Problemas botánicos

Falso naturalismo:

La principal característica de estos adornos de motivo vegetal es su apariencia naturalista: la primera impresión es de que nos encontramos ante unas formas que reproducen con exactitud las de unos seres vegetales concretos. Esta primera impresión no desaparece al realizarse un examen detallado de unas y otras zonas de la fachada, por más que se contradice con lo que vamos observando en ella, de modo que poco a poco se va imponiendo ante nuestros ojos la conciencia de que la mayoría de las formas esculpidas no guardan una estricta semejanza con la realidad en la que se inspiran. Importa precisamente resaltar esa capacidad de transmitir semejanza, “naturalidad”, con la que se dotó a esas figuras pues ahí radica, pensamos, su categoría plástica, artística.

Sin duda son las hojas de hiedra y las flores y hojas de rosas cultivadas las más convincentemente realizadas de acuerdo a un patrón de realidad botánica. El siguiente puesto lo ocuparían las hojas de palmito y después las de laurel. Quizás las hojas de vid sean las siguientes en este orden de prelación y tras ellas los tulipanes.

Del resto puede decirse que no son lo que parecen ser, sin dejar de parecer serlo. El caso más notable es el de las hojas pentalobuladas (de hasta seis variedades), cuya identificación botánica sólo puede proponerse por aproximación: unas parecen de algún tipo de ranúnculo, otras de algún tipo de potentilla, otras de algún tipo de arce, pero de ninguna puede darse más precisa identificación.

Hay un notable contraste entre el naturalismo esmerado de la mayoría de las flores (rosas de ambos tipos, girasol, tulipanes) y de algunas de las hojas (hiedra y laurel), y la fluctuante identidad de las hojas compuestas pentalobuladas, que parecen obedecer a distintos tipos de modelos, basados en las hojas de arce campestre o del castaño de Indias, de la sardonia o de la potentilla, del malvavisco salvaje o de otras plantas.

Un caso aparte son las flores de siete y ocho pétalos de la cenefa entre ménsulas y mensulillas bajo el alero de la terraza (tercer piso). Su identificación no varía por causa de esa diferencia en el número de pétalos adjudicados a unos u otros ejemplares: en cualquier caso puede decirse que se trata de un tipo de margaritas o matricarias, pues no hay otras flores a las que pudieran asemejarse más, aunque no alcancen una semejanza suficiente como para proponer una real identificación botánica.

Y, por último, el caso de las formas esculpidas en los dinteles de los vanos del piso principal (primera planta), esas “borlas” o flores de campanuláceas. No nos conformamos con ninguna de estas identificaciones, que plantean problemas en cualquiera de los casos, pero no encontramos una mejor. (¿Pueden interpretarse como conjuntos de acículas de coníferas? No parece posible tal cosa)

Hojas y hojas (y sorpresas):

Los balcones del piso principal y del primer piso se adornaron con flores y hojas de rosal y cenefas de hojas trilobuladas. En los antepechos de los miradores del piso segundo se esculpieron hojas trilobuladas de similar diseño. Esas hojas trilobuladas no responden a ningún modelo concreto de la naturaleza. Pese a todo, su silueta y su aspecto general las asemeja a las hojas de muchas plantas herbáceas cuyas hojas han imspirado desde antiguo la ornamentación en la escultura y la arquitectura. Se trataría de una “forma vegetal” visualmente aceptada como “natural” y “reconocible”, seguramente porque participa de rasgos muy generalizados en el reino vegetal: tres elementos, diversas longitudes y grosores de éstos, formas diversas en sus contornos.

Las hojas de cardo bajo las flores de girasol en los capiteles de las columnas de la planta baja  tuvieron que esculpirse con conciencia de que se estaban yuxtaponiendo formas de especies vegetales muy distintas. Parece imposible pensar que no se reparara en ello tratándose de elementos de dos plantas, la flor del girasol y las hojas del cardo, perfectamente reconocibles por la mayoría de nuestra población.

Un caso semejante ocurre en otros dos capiteles de columnas de la planta baja: se trata, en este otro caso, de hojas de hiedra acompañando ¡hojas ¿de castaño de Indias?! Es un caso más interesante aún, pues en el anterior la pareja hoja-flor tenía una aceptación visual más rápida como reflejo de una pareja natural (las flores y las hojas de una planta, siempre unidas en el recuerdo). Estas hojas de castaño de Indias se acompañan también de rotundas esferas que se identificarían fácilmente con los frutos del castaño de Indias. ¿Pero qué hace esa hilera  de hojas de hiedra bajo las otras hojas?

Solamente la pareja flores de rosal- hojas de rosal, de los otros dos capiteles de las columnas centrales de la planta baja, responden fielmente a la realidad botánica. Es interesante que estos emparejamientos ficticios se exhiban en un lugar especialmente importante de la decoración de esta fachada y además el más cercano a los ojos de los paseantes. (Paseantes, aprovechamos para decirlo, que no parecen haber reparado nunca, en los casi cien años de existencia de esta fachada, en estos ni en otros detalles de esta fachada. O al menos, nunca les ha parecido suficientemente interesante como para comentarlo por escrito a sus convecinos).

La cuestión es conocer la intención de tal yuxtaposición, si es que hubo algo más que una mera decisión basada en factores “ópticos”, de belleza visual. Realmente, acompañar esas hermosas flores solares con hojas del tipo de las del girasol hubiera resultado mucho menos espectacular. Pero este tipo de decisiones, “estéticas” o no, siempre nos deja perplejos: quién, por qué, con qué intención las tomó. El resultado, aun cuando es satisfactorio como en este caso, no puede acallar nuestras preguntas al respecto. Intentaremos encontrar alguna pista en modelos decorativos que pudieran haber sido vistos (in situ o en láminas o fotografías) por Albiñana.

Las ocho mensulillas bajo los balcones del piso principal están decoradas con hojas pinnaticompuestas impares de siete anchos foliolos acorazonados. La forma de los foliolos pero sobre todo su disposición (seis de pedúnculos opuestos orientados hacia arriba, uno apical orientado hacia abajo) hace de estas hojas (el foliolo apical hace imposible que se trate de ramas con hojas enteras opuestas) una realización puramente artística, sin correlato en la naturaleza.

Las tres ménsulas bajo los balcones del piso principal están decoradas con capullos de rosa acompañados de hojas. Las hojas que aparecen bajo cada flor se parecen a las que se ven en las mensulillas de estos mismos balcones, pero difieren en el detalle de la orientación de los pedúnculos de sus foliolos. Esa disposición, de todas formas,  también es antinatural y sólo tiene una justificación artística.

Por otra parte se da la curiosa circunstancia de que en cada una de las mensulillas, junto con las hojas, se esculpió una figura (semioculta bajo los tres foliolos inferiores) que no parece tener directa relación con estas hojas. No parecen, por ejemplo, vainas frutales. Podría tratarse o bien de un compás de cantero o bien de una navaja de injertar. Cualquiera de estas posibilidades sugiere preguntas sobre su razón de ser que más adelante plantearemos.

También es curiosa la disposición de dos grupos de tres  hojas de laurel sobre sendos círculos (más bien anillos), esculpidos en la piedra clave del arco de la puerta de entrada. (La puerta que queda a la izquierda del observador, pues la puerta de la derecha se abrió en la reforma de 1950. En ella se reprodujo exactamente la misma ornamentación que había en la puerta original). Sobre el número 29, pues, de esta puerta, Albiñana diseñó el adorno de esas tres hojas que están dispuestas como lo estaría un compás (abierto en dos posiciones) sobre un círculo. También esta figura, ubicada  en un lugar tan importante y significativo, sugieren preguntas que más adelante plantearemos.

Las hojas compuestas de seis foliolos, mayoritariamente esculpidas en la planta baja, bajo los miradores, son un caso especial. Hemos decidido proponer una identificación como hojas de castaño de Indias a sabiendas de que las hojas del castaño de Indias no son exactamente así y de que, por supuesto, no van acompañadas en el árbol de flores (del tipo de los girasoles y de las margaritas) como las esculpidas junto a estas hojas. Es a las hojas a las que más se parecen, y no hay otras en la naturaleza que se parezcan tanto a éstas.

Hemos pensado también en otras especies arbóreas, comenzando por otras del Aesculus, como el Aesculus carna, o la situación es la misma. Otra especie arbórea candidata podría ser el rododendro (Rhododendron quinquefolium). Entre las especies herbáceas, la más defendible sería la potentilla (Potentilla erecta, Potentilla reptans). Estas identificaciones nos fueron propuestas por Francisco Alberto, botánico de la Estación Experimental de Aula Dei sobre la base de unas fotografías de otras dos fachadas de Albiñana: de la fachada del edificio de la Calle Lagasca 3 y de la fachada del edificio de la calle Don Jaime 35, en las que se muestran hojas muy semejantes a éstas de la fachada del Casino, pero no exactamente iguales. (Véase la ficha de esas fachadas).

En el caso de la fachada de Lagasca 3, la identificación como rododendro tenía la ventaja de explicar la presencia de las flores que acompañan a algunas de las hojas. En el caso de la fachada de Don Jaime 35, la identificación como potentilla tenía la ventaja de explicar la presencia de las flores que acompañan a esas hojas. Aunque en ningún caso podían explicarse los frutos globulosos que las acompañaban, que en el caso de Don Jaime 35 parecían claramente inspirados en los del castaño de Indias.

En el caso de esta fachada del Casino, las flores que acompañan a estas hojas no pueden explicarse con ninguna identificación aceptable. Aquí parece tratarse de una mera yuxtaposición de hojas de una planta (castaño de Indias, rododendro, potentilla) y flores de otra (girasol o margarita). La ausencia de frutos no introduce un tercer elemento para esta identificación aproximada.

Hay otro edificio de Zaragoza en el que pueden verse esculpidas hojas de castaño de Indias acompañadas de frutos propios de este árboles pero también de flores que no corresponden a la especie: en Sagasta 76, en uno de los capiteles de las columnas de la planta baja, realizados por el escultor Carlos Palao. Las flores aquí tienen un botón esférico compuesto por cuatro elementos y ocho grandes anchos pétalos.

Merece la pena llamar la atención sobre un hecho: en el famoso libro de Owen Jones: Grammar of Ornament (editado por primera vez en 1856 y ampliamente difundido desde entonces), una de las diez láminas que el autor ofreció con dibujos propios reproduce unas hojas, claramente inspiradas en las del castaño de Indias, que presentan cinco, seis y siete foliolos. No van acompañadas de frutos.

En muchos de los repertorios gráficos que pudo estudiar Albiñana se recogen, en dibujos o fotografías, adornos basados en las hojas, flores y frutos del castaño de Indias. Por ejemplo, en la obra de Robert Schirner Aus meiner Kunstwerkstätte, Berlin/ New York, 1896-1899 (donde se representan las flores con perfecto respeto a la realidad botánica) y en la obra de J. Seller Der Moderne Kunstchlosser, editada por Otto Maier en Ravensburg, (¿), en la que el motivo se presenta en obras de forja artística: verjas, rejas, barandillas, farolas, señales urbanas, ...En la mayoría de estos casos las hojas se presentan con cinco foliolos, aunque también las hay de seis (pocas) y de siete (algunas más) foliolos.

Por supuesto, Albiñana pudo ver también todos o muchos de estos adornos en Francia, Alemania, Bélgica o Austria en cualquiera de sus viajes.

Los frutos, esas esferas:

Los frutos que en ocasiones acompañan a las hojas son todos ellos esféricos, y la mayoría de ellos tienen la superficie lisa. La excepción más notable la representan las bellotas, curiosamente, sin el bálano, cuyas cápsulas vacías también resultan, en definitiva, esféricas.

Algunos de esos frutos esféricos no se corresponden con la identidad botánica de las hojas a las que acompañan. El caso más notable es el de los frutos que acompañan a las hojas ¿de arce? del segundo piso: se trata de glóbulos granulosos cuya semejanza con los frutos del castaño de Indias es realmente fastidiosa Se diría que se tallaron en el lugar equivocado.

Es interesante reparar en la disposición que adoptan los frutos, pues  en ocasiones es evidente una intención de diseño, especialmente atraída por los efectos de simetría. Los frutos que acompañan a las hojas de laurel esculpidas entre los vanos del principal están claramente dispuestos para componer grupos  simétricos. En esto, por lo demás, Albiñana no haría sino seguir una orientación presente en gran cantidad de láminas de ornamentación para arquitectura publicadas en su época de estudiante y, en general, la observación de gran cantidad de edificios en los que tal disposición estaba absolutamente generalizada.

No hemos dejado de contar el número de frutos que acompañan a cada grupo de hojas. Y ello por un razonable empeño en la búsqueda de intencionalidad en los detalles de la decoración de esta fachada, en la que un examen atento demuestra que ningún detalle de este tipo está realizado al azar. Que en la decisión de tales o cuales cantidades (de frutos, de hojas) haya o no una pretensión más allá de la ordenación no entramos. Más bien nos parece que no, que se trata de un juego combinatorio regido por las leyes de la simetría. El efecto visual de esta disposición general del adorno vegetal en esta fachada es el de orden: estamos ante una flora ordenada, sometida a las leyes de la composición. El orden como valor estético. (Aquí podrían traerse a colación los estudios sobre el adorno de Gombrich, especialmente en su obra El sentido del orden. Estudio sobre la psicología de las artes decorativas).

LISTADO DE LAS PLANTAS REPRESENTADAS EN LA FACHADA DEL CASINO MERCANTIL

Arce (Acer campestre)

Castaño de Indias (Aesculus hippocastanum)

Cincoenrama (Potentilla  alba)

Campanuláceas (Campanulaceae sp.)
Cardo (Carduus  nutans)
Girasol (Helianthus annuus)

Hiedra (Hedera helix)

Laurel (Laurus nobilis)

Malvavisco (Malva alcea)

Matricaria (Chrisantemum parthenium)

Palmito (Chamaerops humilis)

Rosa (Rosa floribunda)

Rosa silvestre (Rosa canina, Rosa arvensis)

Sardonia (Ranunculus sceleratus)

Tulipán (Tulipa sp.)

Vid (Vitis vinifera)

BIBLIOGRAFÍA

0.- Fuentes. Publicaciones de la época (publicaciones periódicas, catálogos, repertorios de láminas, etc.) de consulta accesible en la Biblioteca de la Escuela de Artes y Oficios de Zaragoza. Nos atenemos a los fondos conservados a fecha de 13.XI.2003, día de nuestra primera consulta.

[CARPETA DE LÁMINAS SUELTAS DE MODELOS DE ORNAMENTACIÓN VEGETAL . 1905]

ARCHITECTUR BERLINS. Herausgegeben von Hugo Licht. Berlin, Wasmuth, 1882.

ARCHITECTURE PITTORESQUE AU XIXe SIÈCLE. Recueil de chalets,(...). Paris, Libr. Centrale des Beaux-Arts A. Lévy, (?)

ARCHITEKTONISCHE STUDEN-BLÄTTER. Ausgewählt von H. Ende. Berlin, Claesen and Cie, (¿1880-1890?)

ARCHITEKTONISCHE STUDIEN-BLÄTTER, Ausg. von Hermann Rückwardt.

ARQUITECTURA MODERNA DE BARCELONA. España artística, arqueológica y monumental. Dir. Fco. Rogent  y Pedrosa, Luis Doménech y Montaner. Barcelona, Pons, 1900.

AUSGEFÜRTE BAUORNAMENTE VON PRAGER BICOHAVERN. Wien, Schroll, (¿1907?)

AUSGEFÜRTE BAUORNAMENTE. Sechste Serie. Arbeiter con Prager und Viener bildhauern. Wien, Schroll, (¿)

BARQUI: Architecture moderne. Plans coupes, elevations, profiles, details de construction et d’ornamentation. Paris, Baudry et Cie, (?)

BIJOUX MODERNES composées par René Bauclair. Paris, Schmid, (¿)

CARTERA DE DIBUJOS ELEMENTALES. Flores. Paris, Maurocq, (¿)

CHEVRY, M.: Art nouveau. Essais de decoration en couleurs d’aprés la Nature, Paris, (?)

COURS ELEMENTAIRE DE DESSIN DE MENUISERIE ET EBANISTERIE. Delafosse.

ESQUISSES D’APRÉS LES RELIEFS EN CARTÓN. Paris, Maurocq, (¿)

FAÇADEN UND DETAIL. WIEN 1900. O. Grüner. Wien, Schroll, (¿)

FAÇADEN UND DETAILS. Wien, 1900

FAÇADES DE MAISONS VILLAS HÔTELS à Paris et aux environs. Paris, Ducher, (¿)

FELLER, J,: Der Moderne Kunstchlosser, ed. Otto Maier, Ravensburg, (?)

FLORA FORESTAL ESPAÑOLA. Ministerio de Fomento. Madrid, 1890.

KAPPERTZ, Peter: Florale und ornamentale kompositionen für flächenverzierungen, Leipzig, (¿).

KUNSTGESCHICHTE IN BILDERN. Bearbeitet von G. Dehio. Abteilung II: Das Mittelalter. (Con un sello de la Escuela: Modelado Adquirida 1902 a 1909).

L’ARCHITECTURE MODERNE EN FRANCE: Maisons les plus remarcables(…) par F. Barqui. Paris, Libr. Polytechnique, (¿?)

L’ART DECORATIF AUX EXPOSITIONS DES BEAUX-ARTS 1911. Paris, Guérinet, (¿1912?)

L’ART POR TOUS. Encyclopedie de l’art industriel et decorative. 2e anné. Paris, Morel, 1862.

LA ARCHITECTURE MODERNE A PARIS. Concours de façades de 1901.

LA SCULPTURE DECORATIVE AU XXE SIÈCLE. Recueil publiqué par François Monod. Paris, Librerie Central d’Art et Architecture, (¿)

LE MUSÉE DES ARTS DÉCORATIVES. Loeuvre. Le Metal. 1e. Part: Le Fer. Paris, Longuet, (¿)

MODERNE BAUFORMEN. Maasttshefte für Architektur, Herausgegeben von M.J. Gradl, 1904.

MUEBLES D’ART NOUVEAU au Salon du Mobilier de 1902.

NEUVER SCHMUCK von Maurice Dufréne. Stuttgart, Julios Hoffmann, (?)

NEUZEITLISCHE BLUMEN-KOMPOSITIONEN für decorative flächenkunst von Peter Kappertz. Leipzig, Gilber’sche Verlag, (?)

PETITES COMPOSITIONS DÉCORATIVES. Puisées sur la Nature par Chevry. Paris, Maurocq, (¿)

RECUEIL DE VILLAS MODERNES par C. Trenet. Paris, Aulandier, (¿)

SCHINER, Robert: Aus Meiner Kunstwerkstätte. Berlin/ New York, Hessling, 1896-. (5 volúmenes).

SCULPTURE DECORATIVE AU Xxe SIÈCLE, La, dir.:

1.- Sobre Albiñana y la Zaragoza de su época:

AÑÓN ALMAZÁN, José Ángel: El Parque Grande de Zaragoza, Zaragoza, 1997. Inédito. Copia cedida por el autor.

AZAGRA, Víctor: Cosas nuevas de la Zaragoza vieja, Zaragoza, Mira, 1987.

BLASCO IJAZO, : ¡Aquí Zaragoza!, ed. facsímil, Zaragoza, Ibercaja, 1990.

BLASCO IJAZO,   : El Casino Mercantil... Zaragoza, La Cadiera, 1977.

BORRÁS GUALIS, Gonzalo M., GARCÍA GUATAS, Manuel , GARCÍA LASAOSA, José: Zaragoza a principios del S. XX: El Modernismo, Zaragoza, Librería General, 1977.

DELGADO, Javier. Pequeña guía del Parque Grande, Zaragoza, Ayuntamiento de Zaragoza, IberCaja, 1997.

DELGADO ECHEVERRÍA, Javier: “El Jardín Botánico de Zaragoza de la Real Sociedad Económica de Amigos del País. 1897-1923: de la huerta de Santa Catalina a la huerta de Santa Engracia”, en Aragón Turístico y monumental, año 78, nº 354, Zaragoza, SIPA, diciembre 2002.

DELGADO ECHEVERRÍA, Javier y MASTRAL GASCÓN DE GOTOR, Ana: “Ramón J. Sender, campesino aragonés”, en Sender y su tiempo. Crónica de un siglo, II Congreso, Actas. Huesca, Instituto de Estudios Altoaragoneses, 2001.

EVOLUCIÓN histórico-urbanística de la ciudad de Zaragoa, Zaragoza, Colegio de Arquitectos de Aragón, 1982.

FERNÁNDEZ CLEMENTE, Eloy: Gente de orden. Aragón durante la dictadura de Primo de Rivera 1923-1930. Tomo 4: La cultura. Zaragoza, Ibercaja, 1997.

FERNÁNDEZ PORTOLÉS, María Pîlar: Parques de la ciudad. El Parque Primo de Rivera, Zaragoza, Ayuntamiento de Zarazoza, 1979.

FRANCISCO Albiñana, arquitecto (1882-1936), por José Antonio Lorente Fernández, Teófilo Martín Saenz, Jesús Martínez Verón , Pedro Navascués Palacio y Julio Foster Turidi, Zaragoza, 1992. INÉDITO.

GUÍA de Zaragoza de 1860. Edición facsímil, Zaragoza, Librería General, 1985.

GUÍA histórico-artística de Zaragoza, dir. Guillermo Fatás, Zaragoza, Ayuntamiento, 1991.

HERNÁNDEZ LATA, José A.: “Lágrimas de piedra: la escultura en los cementerios públicos”, en Historia y política en la escultura pública 1820-1920, Zaragoza, Institución Fernando el Católico, 2003, pp. 103-144.

HERNÁNDEZ MARTÍNEZ, Ascensión: Vida y obra del arquitecto Ricardo Magdalena (1849-1910). Tesis doctoral dirigida por Gonzalo M. Borrás Gualis. Junio 1995. (Original impreso de la autora. Sólo hay edición en microfichas).

HERNÁNDEZ MARTÍNEZ, Ascensión: Magdalena, Navarro,  Mercadal . Zaragoza, CAI, 2001.

IRABURU ELIZONDO, Ignacio: Los cuatro viajes del Palacio de Larrinaga. Un recorrido por la historia y la arquitectura del edificio con más leyenda de Zaragoza, Zaragoza, IberCaja, 2000.

LABORDA Yneva, José: Zaragoza. Guía de arquitectura, Zaragoza, CAI, 1995.

MARTÍNEZ VERÓN, Jesús: Arquitectura de la Exposición Hispano-Francesa de 1908, Zaragoza, Institución Fernando el Católico, 1984.

MARTÍNEZ VERÓN, Jesús: Arquitectura aragonesa: 1885-1920: Ante el umbral de la modernidad, Zaragoza, Delegación en Zaragoza del Colegio Oficial de Arquitectos de Aragón, 1993.

MARTÍNEZ VERÓN, Jesús y RIVAS GIMENO, José Luis: El Centro Mercantil de Zaragoza, 1909-1935, Zaragoza, Institución Fernando el Católico, 1985.

POBLADOR MUGA, Mª Pilar: La arquitectura modernista en Zaragoza: Revisión crítica, Zaragoza, Diputación General de Aragón, 1992.

POBLADOR MUGA, Mª Pilar: La arquitectura modernista en Zaragoza. Tesis doctoral enero 1994, Zaragoza, Departamento de Historia del Arte Universidad de Zaragoza, 2003. Edición en CD.

RÁBANOS FACI, Carmen: Vanguardia frente a tradición en la arquitectura aragonesa (1925-1939): El racionalismo, Zaragoza, Guara, 1984.

RINCÓN GARCÍA, Wifredo: Un siglo de escultura en Zaragoza (1808-1908), Zaragoza, Caja de Ahorros de Zaragoza, Aragón y Rioja, 1984.

TORGUET ESCRIBANO, Nardo: La reforma urbana en la Zaragoza de mediados del siglo XIX. Apertura de la Calle Alfonso I (1858-1868), Zaragoza, Ayuntamiento, 1987.

2.- Sobre arquitectura en la época de Albiñana:

a) General:

ANSCOMBE, Isabelle y GERE, Charlotte: Arts and Crafts in Britain and America, London, Academy Editions, 1978.

La ARQUITECTURA del siglo XX. Textos. Ed. Al cuidado de Simón Marchan Fiz, Madrid, Comunicación, 1974.

BARIDON, Laurent: L’Immaginaire scientifique de Viollet-le-Duc, Paris, L’Harmattan,
1996.

BOHIGAS, Oriol: Reseña y catálogo de la arquitectura modernista, Barcelona, Lumen, 3ª ed. 1983.

DOR, Helen: William Morris, London, Pyramid, 1990.

FRAMPTON, Kenneth: Historia crítica de la arquitectura moderna, México, Gustavo Gili, 1983.

HITCHCOOCK, Henry-Russell: Arquitectura de los siglos XIX y XX, Madrid, Cátedra, (5ª ed.), 1998.

LAMBOURNE, Lionel: Utopian Craftsmen: The Arts and Crafts Movement from the Costwolds to Chicago, London, Astragal, 1980.

LEMMEN, Hans van, VERBRUGGE, Bart: Art Nouveau Tiles, London, Laurence King, 1999.

MANIERI ELIA, Mario: William Morris e l’ideologia dell’architettura moderna, Roma, Laterza, 1975.

RICCI, Giacomo: La catedrale del futuro. Bruno Taut, 1914-1921, Roma, Officina, 1982.

RUSKIN, John: Las siete lámparas de la arquitectura, Barcelona, Altafulla, 1988.

SEMBACH, Klaus-Jürgen: Modernismo. La utopía de la reconciliación, Köln, Taschen, 2002.

WRIGHT, Frank Lloyd: Autobiografía 1967-(1943), Madrid, Croquis, 1998.

b) especialmente en España, S. XIX-XX:

ARQUITECTURA modernista en Córdoba, Córdoba, Dip. Prov. De Córdoba, 1985.

BALDELLON, Miguel A.: Ricardo Velásquez Bosco. Madrid, 1990

BENITO GOERLICH, Daniel: La arquitectura del eclecticismo en Valencia (1875-1925), Valencia, Ayto. de Valencia, 1992.

CAJAL PUEYO, Federico: Historia general del Arte. T. V: La ornamentación. Barcelona, Montaner y Simón, 1857.

CASTILLO ÁLVAREZ-CEDRÓN, Maria Dolores: Cent obres modernistes d’Igualada, Barcelona, Abadía de Montserrat, 2000.

CHUECA GOITIA, Fernando: Historia de la arquitectura occidental, X: El siglo XX, las fases finales y España., Barcelona, Dossat, 1980.

CIRICI PELLICER, A.: El arte modernista catalán, Barcelona, Aymá, 1951.

FREIXA, Mireia: El modernismo en España, Madrid, Cátedra, 1986.

GONZÁLEZ MORENO-NAVARRO, José Luis y CASALS BALAGUÉ, Albert: Gaudí y la razón constructiva, Madrid, Akal, 2002.

ISAC, Ángel: Eclecticismo y pensamiento arquitectónico en España. Discursos, revistas, congresos, 1846-1919, Granada, Diputación Provincial, 1987.

NAVAS, Teresa: “Las artes aplicadas en la formulación de la Arquitectura modernista”, en El MODERNISMO. Exposición en el Museu d’Art Modern, Barcelona, Lunwerg, 1992.

NAVASCUÉS PALACIO, Pedro: Arquitectura y arquitectos madrileños del siglo XIX. Madrid, 1973.

ORDIERES, Isabel: Eladio Laredo. El historicismo nacionalista en la arquitectura, Castro Urdiales, Ayuntamiento de Castro Urdiales, 1992.

PASTOR PÉREZ, Francisca: Arquitectura doméstica del siglo XIX en Málaga, Málaga, Universidad de Málaga, 1980.

RÁFOLS, F.J.: Modernismo y modernistas, Barcelona, Destino, 1949.

SERRANO LASO, Manuel: La arquitectura en León entre el historicismo y el racionalismo, 1875-1936, León, Universidad de León, 1993.

SUBIAS PUJADAS, Ma. Pia: Pujol i Bausis: centre productor de cerámica arquitectónica a Espulgues de Llobregat, Espulgues de Llobregat, Ajuntament d’Eplugues, 1989.

3.- Sobre Masonería, masonería y simbolismo y sobre arquitectura y masonería en:

ARCHITETTURA e masonería, a cura di Marcello FAGIOLO, Firenze, Convivio, 1988. Una excelente introducción a la historia de las relaciones entre masonería y arquitectura y una amplia bibliografía sobre el asunto.

COOPER, Robert L.D.: Les franc-jardiniers. Introduction aux origines et à l’histoire d’un ordre méconnu. Traduit de l’anglais par G. Saugnier. Bagnolet, Ivoire-Clair, 2000.

CRYRER, Neville Barker: Masonic Halls of England. 5 volúmenes.  Shepperton, Lewis Masonic, 1989-1991.

FERRER BENIMELI, José Antonio: El contubernio judeo-masónico-comunista, Madir, Istmo, 1982.

FERRER BENIMELI, José Antonio: La masonería en Aragón. Zaragoza, Librería General, 1979.

FREEMASONRY: a celebration of the Craft. General editors John Hamill, Robert Gilbert. Foreword by HRH The Duke of Kent. St. Allans Herts, Mackenzie, 1992.

MEURIN, Leon: Simbolismo de la masonería,Madrid, Nos, 1957.

NEFONTAINE, Luc: Symboles et symbolisme dans la franc-maçonnerie. 2 volúmenes. Breuxelles, Université de Bruxelles, 1994, 1997.

TERNER, Ursula: Freimaurerische Bildwelten. Die Ikonographie der freimaurerischen Symbolik anhand von englischen, scottischen und französischen freimaurerdiplomen, Petersberg, Imhof, 2001.

CURL, James Stevens: The Art & Architecture of Freemasonry. An introductory Studi, London, Batsford, 2002.

Además, las Actas de los Congresos de Historia de la Masonería organizados por el Instituto de Historia de la Masonería y coordinados por José Antonio Ferrer Benimelli.

4.- Sobre el adorno:

GOMBRICH, E.H. : El sentido del orden. Estudio sobre la psicología de las artes decorativas. Barcelona, Debate, 1999.

GHYKA, Matila C.: Esthétique des proportions dans la nature et dans les arts, Monaco, Éditions du Rocher, 1998. (La primera edición de esta obra en Gallimard data de 1927).

GHYKA, Matila C.: El número de oro, Barcelona, Poseidón, 1992.

HISTORIA de las artes aplicadas e industriales en España, Antonio BONET CORREA (coord.)., Madrid, Cátedra, 1994.

RIEGL, Alois: Problemas de estilo. Fundamentos para una historia de la ornamentación, Barcelona, Gustavo Gili, 1980.

THOMPSON, D’Arcy W.  : On Growth and form, New York, Dover, 1992.

5.- Sobre botánica, flora,  jardinería  y simbología vegetal (y animal):

AÑÓN, Carmen:, SANCHO, José Luis: Notas sobre la vida y escritos de Javier de Winthuysen, Aranjuez, Real Jardín Botánico, 1990.

LEVI D’ANCONA, Mirella: The Garden of Renaissance. Botanical symbolism in Italian painting, Firenze, Olschki, 1977.

L’ANIMAL dans l’Antiquité, édité par Barbara CASSIN et Jean-Louis LABARRIÈRE, sous la direction de Gilbert ROMEYER DHERBEY, Paris, Vrin, 1997.

L’ANIMAL exemplaire au Moyen Âge, Ve-Xve siècles, sous la direction de Jacques BERLIOZ et Marie Anne Polo de Beaulieu, Rennes, Presses Universitaires de Rennes, 1999.

AÑÓN, Carmen, LUENGO, Mónica, Luengo, Ana: JARDINES artísticos de España, Madrid, Espasa Calpe, 1995.

ÁRBOLES de Aragón. Guía de árboles monumentales y singulares de Aragón, Zaragoza, Prames, 1997.

BARALLAT, Celestino: Principios de botánica funeraria, Barcelona, Alta Fulla, 1984. (Facsímil de la 1ª ed. de Barcelona, Tipo-Litografía de Celestino Verdaguer, 1885)

BARIDON, M.: Les jardins. Paysagistes, jardiniers, poètes, Paris, Laffont, 1998.

BOIS Sacrés, Les: Actes du Colloque International du Centre Jean Bérard, Naples, Centre Jean Bérard, 1993.

BUTTLAR, Adrian von: Jardines del Clasicismo y el Romanticismo. El jardín paisajista. Trad. José Luis Gil Aristu. Madrid, Nerea, 1993.

CATTABIANI, Alfredo: Florari: Miti, legende e simboli di fiori e piante, Milano, Mondadori, 1997.

CATTABIANI, Alfredo: Florario: Miti, leggende e simboli di fiori e piante, Milano, Mondadori, 1996.

EAMON, William: La scienza e i segreti della natura: I “Libri di segreti” nella cultura medievale e moderna, trad. di Renzo Repetí, Genova, ECIG, 1999.

FABRE, J.-H.: Souvenirs enthomologiques, Paris, Laffont, 1999.

FONT I QUER, Pío: Plantas medicinales.

FONT I QUER, Pius: Botánica pintoresca.

FONT I QUER, Pius: Iniciación a la Botánica, Barcelona, Fontalba, 1982.

GARCÍA ARRANZ, José Julio: Ornitología emblemática: Las aves en la literatura simbólica ilustrada en Europa durante los siglos XVI y XVII, Cáceres, Universidad de Extremadura, 1996.

GARCÍA MAHIQUES, Rafael: Flora emblemática. Aproximación descriptiva del código icónico, Valencia, Universitat de Valencia, 1991.

GIARDINO a Milano, per pochi e per tutti, 1288-1945, di Virgilio VERCELLONI et al., Milano, L’Archivolto, 1986.

GÓMEZ MENDOZA, Josefina: El gobierno de la naturaleza en la ciudad: ornato y ambientalismo en el Madrid decimonónico, Madrid, Real Academia de la Historia, 2003.

GOODY, Jack: La culture des fleurs, Paris, Seuil, 1994.

HISTORIA de los parques y jardines de España. Madrid, Focsa, 2001.

HISTORIA de los parques y jardines en España, Madrid, Focsa, 2001.

IMPELLUSO, Lucia: La naturaleza y sus símbolos. Plantas, flores y animales. Trad. de José Ramón Monreal. Barcelona, Electa, 2003.

JECKYLL, Gertrude: The making of a Garden, an anthology compiled by Cherry Lewis, Suffolk, Antique Collector’s Club, 1984.

JEKYLL, Gertrude: A Gardener’s Testament, London, Papermac, 1984 (Reprint de London, Country Life, 1937).

JEKYLL, Gertrude: Home and Garden, London, Papermac, 1982. (Reprint de London, Longmans, 1900).

MAETERLINCK, M.: “La inteligence de les fleurs” (1907), en La vie de la nature, Bruxelles, Complexe, 1997.

MÖLZER, Vladimir: Gran libro de las plantas de jardín, Madrid, Susaeta, 1989.

NICOLAU María Rubió i Tudurí (1891-1981). Jardinero y urbanista, BOSCH, José, coord., Aranjuez, Doce Calles, 1993.

NOURRY, Louis-Michel: La france des jardins publics, Rennes, Ed. Ouest-France,
1997.

PEÑALVER ALHAMBRA, Luis: Los monstruos de El Bosco, León, Junta de Castilla y León, 1999.

PLUMPTRE, George: Great Gardens great Designers, London, Seven Dials, 1994.

POLUNIN, Oleg: Guía de campo de las flores de Europa, Barcelona, Omega, 1991.

QUIÑÓNEZ, Ana María: El simbolismo vegetal en el arte medieval. La flora esculpida en la Alta y Plena Edad Media europea y su carácter simbólico, Madrid, Encuentro, 1995.

RODRÍGUEZ DACAL, Carlos, IZCO, Jesús: El jardín de los Pazos  gallegos: espacio de recreo y fuente de recursos, Santiago de Compostela, Universidade de Santiago de Compostela, 1994.

RODRÍGUEZ DACAL, Carlos, IZCO: El pazo de Marinan. Plantas, jardines y paisaje, A Coruña, A Diputación de A Coruña, 1997.

ROLLAND, Eugene: Flore populaire ou histoire naturelle des plantes dans leurs rapports avec la linguistique et le folklore, Paris, Maisonneuve et Larose, 1967.

ROQUERO, Luisa: El Sacro Bosco de Bomarzo. Un jardín alquímico, Madrid, Celeste, 1999.

RUBIÓ Y TUDURÍ, Nicolás Mª: Del Paraíso al jardín latino. Origen y formación del moderno jardín latino, Barcelona, Tusquets, 2000. (La primera ed. fue de 1953).

SCHMEIL, Otto: Curso de Botánica, versión de la 92ª ed. alemana por Arturo Caballero, Barcelona,  Gustavo Gili, 1923.

SPENCER, Herbert: principes de Biologie, traduit par M.C. Caselles. 2ème. Ed. Paris, Librairie Germer Baillière, 1880.

URDIROS VILLANUEVA, Nieves y REYES DE LA ROSA, José: El mundo del olivo en el refranero. Córdoba, Universidad de Córdoba, 2001.

WINTHUYSEN, Javier de: Jardines clásicos de España. Castilla. Madrid, CIA, 1930.

WINTHUYSEN, Javier de: [Artículos diversos de prensa en] Xavier de Winthuysen, Jardinero, Madrid, 1986.

WINTHUYSEN, Javier de: Jardines clásicos de España. Ed. facsímil. Aranjuez, Real jardín Botánico, 1990.

6.- Sobre iconografía vegetal:

BENEDICTUS, Edouard: Diseños Art Decó, Madrid, Libsa, 1989.

BLOSSFELDS, Karl: Arts forms in nature. Munich, Schirmer Art Books, 1999.

BOSQUED LACAMBRA, Pilar: Flora y vegetación en los tapices de La Seo, Zaragoza, Caja de Ahorros de la Inmaculada, 1989 y

BOSQUED LACAMBRA, Pilar: “Aproximación a la flora y vegetación en los tapices de Bruselas del siglo XVI del Patrimonio Nacional de España”,  Jardín y Naturaleza en el siglo XVII, Madrid, Sociedad Estatal para la Conmemoración de los Centenarios de Felipe II y Carlos V, 1998, pp. 77-101.

COLLING, James Kellaway: Medieval decorative ornament, New York, Dover, 1995.

DELGADO, Javier y LARIO, Bernardo: El huerto de piedra: flora esculpida en el claustro gótico de Veruela, Zaragoza, La Val de Onsera, 1998.

 DELGADO, Javier: Jardín cerrado: flora escondida en la colegiata de Santa María de Borja, Borja, Centro de Estudios Borjanos, 2001.

GILLOW, Norah: William Morris. Diseños, Madrid, Libsa, 1989.

JALABERT, Denise: La flore sculptée des monuments du Moyen Âge en france, Paris, Picard, 1965

LYS DE BRAY, F.L.S.: The art of botanical Illustration. A history of the classic illustrators and their achievements, Royston, Eagle,  2002.

PEVSNER, Nikolaus: The leaves of Southwell, London, Penguin, 1945.

PLANTAS del mundo en la historia. Ilustraciones botánicas de cinco siglos, Valencia, Fundación Bancaja, 1996.

VIOLLET – LE – DUC, Eugène: Dictionnaire raisonné de l’Archittecture française du Xie au XVIe siècle, (voces “Fleuron”, “Flore”) Paris, Librairies Imprimeries Réunies, T. V 1861.

7.- Sobre simbología en general:

AROLA, Raimon: La cábala y la alquimia en la tradición espiritual de occidente, siglos XV-XVII, Palma dee Mallorca, Olañeta, 2002.

CHEVALIER, Jean  y Gheerbrant, Alain: Diccionario de los símbolos. Barcelona, Herder, 1999.

ESTEBAN LORENTE, Juan Francisco: Tratado de iconografía, Madrid, Istmo, 1990.

PILLARD-VERNEUIL, Maurice: Diccionario de Símbolos, emblemas y alegorías. Barcelona, Obelisco, 1999. Esta obra y La planta y sus aplicaciones ornamentales, del mismo autor (1869-1942) fueron muy difundidas entre los arquitectos, a quienes estaban dedicadas.

RIPA, Cesare: Iconología. Madrid, Akal, 1996, pp. 411-412.

WIND, Edgard: La elocuencia de los signos, Madrid, Alianza, 1993.

WIND, Edgard: Los misterios paganos del Renacimiento, Madrid, Alianza, 1998.

ADDENDA:

A esta bibliografía puede añadirse la recogida en el capítulo XIX de la tesis doctoral de Mª Pilar Poblador: La arquitectura modernista en Zaragoza (1994, DL 2003), pp. 1.336-1365.

Y la que esta misma autora recoge en su comunicación “La arquitectura modernista en Aragón. Estado de la cuestión”, en actas de las III Jornadas de Estudios sobre Aragón en el umbral del siglo XXI, [Caspe, 15-17, diciembre de 2000], Zaragoza, Universidad , Instituto de Ciencias de la Educación (ICE), 2002.

       


 

 

[1] AGRADECIMIENTOS: José Antonio Ferrer Benimeli , Pedro Sánchez Ferré, Francisco Alberto, Ascensión Hernández, José A. Hernández Lata,  Mª Pilar Poblador, José Lorenzo Cantalapiedra (Bca. Escuela de Artes y Oficios),

[2] HERNÁNDEZ LATA, José A.: “Lágrimas de piedra: la escultura en los cementerios públicos”, en Historia y política en la escultura pública 1820-1920, Zaragoza, Institución Fernando el Católico, 2003, pp. 103-144.

[3] FRANCISCO Albiñana, arquitecto (1882-1936), por José Antonio Lorente Fernández, Teófilo Martín Saenz, Jesús Martínez Verón , Pedro Navascués Palacio y Julio Foster Turidi, Zaragoza, 1992. INÉDITO.

[4] “L’Esoterismo delle avanguadie architetoniche” en  Architettura e massonería. Firenze, Convivio, 1988.

UN PARQUE PARA EL SIGLO XXI. 75 ANIVERSARIO DEL PARQUE GRANDE

UN PARQUE PARA EL SIGLO XXI. 75 ANIVERSARIO DEL PARQUE GRANDE                 UN PARQUE PARA EL SIGLO XXI

75 ANIVERSARIO DEL PARQUE PRIMO DE RIVERA

(Zaragoza, 1929 -2004)

75 ANIVERSARIO DEL PARQUE PRIMO DE RIVERA

(Zaragoza, 1929 - 2004)

                                                                                                                          

    1. INTRODUCCIÓN: CELEBRAR EL FUTURO

                                                                                             

Celebramos los setenta y cinco años de vida de nuestro parque Primo de Rivera y como en toda celebración hay una mirada hacia el pasado y otra hacia el futuro. Celebramos porque comprendemos la historia de nuestro parque como historia de aproximaciones, superaciones, búsquedas, aciertos y fracasos. Y celebramos porque prevemos una historia interminable en la que a los nuevos retos y problemas que surjan se sabrá responder con ideas e iniciativas a la altura de las nuevas circunstancias.

Hay mucho que aprender de la propia historia de nuestro parque Primo de Rivera y en general, afortunadamente, se trata de un aprendizaje sobre la base de experiencias positivas. Su diseño, su trazado, su organización forestal y botánica, sus equilibrios y sus contrastes internos (materiales, especies, texturas, colores, alturas, olores, etc., pero también geometría, iluminación, redes y sistemas de riego, ingeniería hidráulica, amueblamiento, distribución de servicios...), todos y cada uno de los componentes del conjunto paisajístico de nuestro parque Primo de Rivera suma su particularidad desde la raíz histórica y técnica de sus propuestas.

 El parquees un producto de una ya larga historia: vida en el tiempo. Y la suerte, el éxito esencial de su creación radica en que su identidad ha permanecido reconocible conforme se han sucedido las novedades. Quienes a principios del siglo XX vieron con ojos creativos las riveras del Huerva desde el Cabezo de Buena Vista y percibieron el sentido de los cambios que transformarían huertos y campos privados en el principal parque público de la ciudad tuvieron, realmente, visión de futuro: el parque que soñaron tenía en sí mismo los elementos que, en expresión de hoy, diríamos “de desarrollo sostenible”. Supieron ver la riqueza cívica que había escondida entre las aguas del Canal Imperial, el Huerva y sus respectivas acequias.

La creación del parque llamado desde entonces parque“Primo de Rivera” (en honor a un dictador que no lo merecía) fue la más clara evidencia de la entrada de Zaragoza en la Historia Contemporánea, dotándose la ciudad de un espacio público destinado al recreo vinculado a la naturaleza. Fue la primera vez que se advirtió la maravillosa capacidad del agua para crear progreso en forma belleza botánica entregada al ocio público y mayoritario. Una nueva concepción de la ciudad, adecuada a unas nuevas posibilidades de producción y consumo y a unas nuevas condiciones de trabajo.

Las sucesivas intervenciones en el parque Primo de Rivera fueron recogiendo el testigo de aquella primigenia ideación y las nuevas técnicas se procuraron poner al servicio de la identidad del parque. Gracias a esos dos factores hoy conocemos un parque que sin haber sido nunca exactamente igual nunca ha dejado de ser el mismo. Ejemplos especialmente importantes de esas intervenciones son la creación del Rincón de Goya a finales de los años veinte, la Rosaleda en los años cuarenta, el Jardín de Invierno en los años cincuenta, las fuentes luminosas en los años sesenta, las praderas, la zona infantil junto al Huerva y el Jardín Botánico en los años setenta y la cascada a principios de los noventa. La progresiva incorporación de monumentos (fuente de Neptuno, quiosco de la música, monumento a la Exposición Hispano-francesa de 1908, etc.) ha ido enriqueciendo artísticamente el parque al tiempo que le ha dotado de una especial resonancia a la memoria ciudadana.

La clave del éxito de nuestro parque está en que su diseño inicial, ese “parque mudéjar” inspirado por el pintor y paisajista Xavier Winthuysen, tuvo en cuenta cariñosa e inteligentemente las condiciones naturales del lugar: la verde corona del Cabezo, el declive del suelo, la pintoresca rivera del Huerva, la abundancia del agua. Respetando esas condiciones se trazaron caminos y senderos que aprovechaban lúdicamente la orografía y se plantaron especies arbóreas y arbustivas adecuadas a nuestra meteorología.

La historia del desarrollo físico y vegetal del parque se entreveró con la historia de su  disfrute por la ciudadanía: usos y costumbres, necesidades y deseos que fueron también dejando su impronta en su identidad. Es emocionante constatar que jardinería y organización social del ocio han estrechado sus vínculos haciendo del parque Primo de Rivera un lugar de encuentro con tanta carga afectiva e identificatoria de la ciudadanía zaragozana como pueden tener los porches de Independencia o la plaza del Pilar.

Por eso fue extraordinariamente significativa y emblemática la decisión del primer alcalde constitucional de Zaragoza, Ramón Sáinz de Varanda, en 1984, de cerrar al tráfico en interior del parque. Señaló la lúcida entrada en una nueva época, en la que hay que tratar de seleccionar y priorizar entre la diversidad de usos a la que aún se le somete al parque poniendo en peligro su equilibrio como ecosistema y como ámbito civil. Los cambios cuantitativos (más población, más horas de ocio, más ofertas lúdicas) han producido un salto cualitativo que habrá que atender adecuadamente si se pretende poder seguir ofreciendo a la ciudadanía la calidad que el parque Primo de Rivera puede ofrecer con un cabal aprovechamiento de sus recursos actuales.

A comienzos de este sigo XXI seguro que conseguiremos acertar en un tratamiento cuidadoso de las características de nuestro parque Primo de Rivera, ahora que afortunadamente Zaragoza cuenta con una verdadera red de parques, jardines y zonas verdes, centros cívicos, bibliotecas e instalaciones deportivas distribuidos por toda la ciudad, lo que permite plantearse un uso selectivo y especializado de los espacios y los recursos. En esta circunstancia positiva  es posible ya plantearse clara y decididamente qué disfrute específico debería ofrecer nuestro primer parquea la ciudad.

Nuestros antepasados supieron mirar, preguntar y escuchar, y a veces incluso tuvieron buenas ideas y consiguieron realizarlas. Entre nosotros, hombres y mujeres del futuro, también ha de haber quienes sepan y puedan afrontar nuevos retos. Hoy también es posible subir al Cabezo Buena Vista y mirar esas tierras con ojos imaginativos y con voluntad.

2. BREVE MIRADA AL PASADO

A principios del siglo XX, muchas cabezas pensaron en el pasado y en el futuro de Zaragoza y de sus cada vez más numerosos habitantes: se imponía un nuevo diseño general de la ciudad, que diera cabida a las novedades introducidas por la industrialización en las antiguas huertas zaragozanas y a un  revolucionario medio de transporte, el ferrocarril, que había llegado a Zaragoza en 1861 dotándola de una capacidad expansiva infinitamente superior en la distribución de mercancías. Azucareras, fundiciones, harineras, curtidos, etc., transformarían Zaragoza en una pujante ciudad fabril. 

En ese ambiente de prosperidad laboriosa surgió una actitud emprendedora en la burguesía local, en la que los ejemplos de las realizaciones de otras ciudades españolas y extranjeras provocaron debates, estudios y propuestas. Se concretaría en 1906 un Proyecto de Ensanche gracias al cual se redefinirían los espacios ciudadanos y se ampliaría notablemente el núcleo urbano. La Exposición Internacional Hispano-Francesa de 1908 funcionaría como catalizador de las ideas del momento y como evidencia de la capacidad organizativa, productiva e imaginativa con la que podía contar la ciudad. Ejemplos de la conciencia de las necesidades ciudadanas y del ambiente emprendedor del momento fueron las notables construcciones del Matadero, del Mercado Central y de la Facultad de Medicina y Ciencias. La arquitectura privada floreció también con especial calidad y encanto en un conjunto de edificios que aún hoy ennoblecen nuestras principales calles.

Por entonces el Cabezo de Buena Vista era un lugar al que se acudía esporádicamente con más intención higiénica (aprovechar la limpieza y la temperatura del Cierzo) que deportiva u ociosa. Deporte y ocio lo facilitaban las cercanas barcas del Canal Imperial de Aragón en su tramo entre las esclusas de Casablanca y las playas de Torrero. En este Cabezo se creó un reducto como una cueva soleada y al abrigo del viento invernal (que con el tiempo, en los años cincuenta, daría lugar al Jardín de Invierno). Aquella Zaragoza de los años veinte del pasado siglo la recreó magistralmente nuestro escritor Ramón J. Sender en las novelas iniciales de su “Crónica del Alba”.

Entre 1913 y 1922 se fueron aproximando planteamientos y propuestas que llevarían a la aprobación del proyecto del parqueen su actual emplazamiento: entre el Canal y el Huerva. El factor determinante para su ubicación fue la constante y fácil provisión de agua en aquellas tierras. Su alejamiento del centro urbano, al principio visto como inconveniente, pronto adquirió un papel positivo: el parque tendría una considerable extensión (inimaginable más céntrica) y se continuaría naturalmente con los montes de Venecia, poblados de pinos, gran pulmón verde en el sur de la ciudad.

Hasta 1929, año de su inauguración, se sucedieron las muy diversas tareas necesarias. Y en el transcurso de ellas, en 1924, se produjo el feliz encuentro de la ciudad con el pintor y paisajista Xavier Winthuysen, joven entusiasta de los parques y jardines de España y estudioso de las novedades internacionales en la materia. El profesor de Instituto y entonces concejal Vicente Galbe Plazuelos llevó a Winthuysen al Cabezo de Buena Vista para solicitar su opinión sobre lo que allí se preparaba. Posteriormente se organizó una conferencia en el Casino Mercantil en la que el pintor desarrolló las ideas que había comenzado a considerar a la vista de aquellas tierras. Gracias a esta intervención nuestro parque se diseñó de acuerdo con las más novedosas (y al tiempo, más tradicionales) concepciones paisajísticas, en la idea de estar realizando un “parque mudéjar”. En la España de 1929 había escasos parques que pudieran competir en extensión, diversidad botánica y diseño con el parque Primo de Rivera de Zaragoza, colocando a nuestra ciudad entre las ciudades de primer rango europeas.

Ello tuvo una especial importancia en una ciudad que no había tenido una tradición jardinística propia, una ciudad en la que, si bien siempre hubo huertos y jardines privados más o menos amplios, no hubo importantes jardines ni privados ni públicos, o al menos no nos ha llegado ninguna documentación sobre ningún notable jardín renacentista ni barroco.

Hasta la creación del Jardín Botánico por la Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos del País, por los hombres de la Ilustración, ya en el siglo XVIII, no tendría Zaragoza nada parecido a un jardín público (y aun en este caso, abierto solamente a un selecto público). Los terribles destrozos que sufrió Zaragoza en 1808 y 1809 durante los dos Sitios a la que fuera sometida en la Guerra de la Independencia arrasaron los principales jardines de conventos y de palacios, sin que tengamos de ellos una clara referencia documental.

Habría que esperar hasta el siglo XIX para que se construyeran en nuestra ciudad algunos jardines privados de interés, insertos en “torres” (casas de campo cercanas a la ciudad) como el de Juan Bernardín en la Avenida San José, el de Rocatallada en el camino de la Cadena, el de Pablo Buil (posteriormente adquirido por el Ayuntamiento para crear el parque Pignatelli), el de Canti en el paseo de Ruiseñores, el Jardín de San Fernando y, sobre todo, los jardines de la torre de Bruil (posteriormente municipalizado como parque público). Ya en el siglo XX, a la ya relevante arboleda de Macanaz (en la orilla izquierda del Ebro) se sumarían los jardines de la Quinta Julieta y el Jardín Botánico de la Universidad. 

Y eso en una ciudad regada por tres ríos, enriquecida por el Canal y surcada en toda su extensión por centenares de acequias que creaban desde antaño una perfecta red de aprovisionamiento de agua que ya no era sólo utilizada en el riego de campos y huertas y en lavaderos públicos sino como fuente energía para los motores de medianas y grandes fábricas. El agua, fuente de vida, no había sido aún mirada con ojos de ciudadano atento a satisfacer todas las necesidades vitales de la población.

La creación del parque Primo de Rivera fue una gran novedad, producto del desarrollo económico y social de la ciudad y del impulso que la Exposición Hispano-Francesa de 1908 dio a las ideas sobre la Zaragoza de la época. De ese impulso surgió también, por ejemplo, la realización del primer Inventario del Arbolado de la Ciudad, en 1913, precioso documento que atestigua el decorado botánico de la Zaragoza de principios del siglo XX. Estaba claro en la mente de nuestros antepasados que había que afrontar decididamente la cuestión del arbolado desde presupuestos urbanísticos, dotando a la ciudad de una conciencia de su propia riqueza botánica. Sólo así podría darse el gran salto que suponía dotar a Zaragoza de un gran parque. Desde 1929 nuestro primer parque ha sido lugar cotidiano de encuentro de la ciudadanía zaragozana con la naturaleza. Por primera vez en su historia Zaragoza integraba, con un concepto contemporáneo del ocio, el disfrute de la naturaleza en la ciudad. 

3. NATURALEZA Y CIUDAD EN EL SIGLO XXI

Celebrar los 75 años del parque Primo de Rivera puede y debe ser la ocasión para volver a mirar y a estudiar con detalle y con mimo su realidad, su historia, las plantas y los seres vivos que lo pueblan, las técnicas de arboricultura, horticultura y jardinería que en su cuidado y mantenimiento se emplean, las costumbres y usos sociales que cristalizan en su interior.

Por supuesto, también ha de ser ocasión de introducir las mejoras necesarias adecuadas a los tiempos que vivimos. Ahora sí hay una tradición ciudadana y una tradición profesional que han convivido durante suficiente tiempo en un espacio común: de un diálogo entre esas tradiciones (y de información precisa sobre lo que se está haciendo en jardinería y paisajismo en el mundo) podrá surgir un proyecto de futuro para nuestro parque, a la altura de las condiciones de vida de la Zaragoza del siglo XXI.

La celebración del 75 aniversario del parque Primo de Rivera nos ofrece la ocasión de reflexionar colectivamente sobre el porvenir de nuestro primer parque inserto en la realidad total de la ciudad y su entorno. Hoy día se trata ya de promover y orientar el disfrute ciudadano de la naturaleza en toda la extensión del término. Un disfrute que contemple los pequeños jardines privados y las grandes masas de arbolado público, que aúne el embellecimiento y la seguridad vial, que aproveche las características particulares de cada zona urbana y la vivencia de sus vecinos, que atienda siempre que sea posible a la tradición y se arriesgue con lo novedoso necesario. Pensar el parque Primo de Rivera requiere ya un ejercicio mental e imaginativo capaz de concebir su papel en el conjunto de una ciudad del siglo XXI y reubicar su uso y disfrute en el actual conjunto de ofertas de ocio.

Resulta ya imprescindible la diferenciación conceptual entre jardín, parque, zona verde, etc., y la delimitación de sus usos sociales más adecuados y razonables. Importa muy especialmente la distinción entre lugares de paso, zonas de esparcimiento recreativo y ámbitos de quietud y reposo. El disfrute de un jardín (aunque no se trate estrictamente de un “jardín botánico”) proviene de expectativas distintas, y no siempre es posible compaginar cabalmente usos diversos en un  mismo lugar. El deporte, el juego, el paseo, el encuentro social, la soledad, la reflexión, la contemplación, la fiesta, etc., no sólo  requieren distintas actitudes individuales y colectivas sino que también exigen recursos y apoyaturas difíciles de compatibilizar.

La ciudad actual debe contar, entre otras muchas ofertas de ocio vinculadas a la naturaleza, con verdaderos parques y jardines dedicados al fomento de la percepción de la vida vegetal y animal en ellos cultivada y cuidada. Una ciudad alberga infinidad de vías de comunicación y lugares “de paso” que deben ser debidamente ornamentados, y puede también ofrecer también algunos lugares “para estar”, en los que pasear lentamente o sentarse constituyan posibilidades reales no sujetas a la presión de un ambiente en continuo movimiento, parques y jardines a los que se acuda expresamente a contemplar y estudiar la flora y la fauna o sencillamente recrearse con su observación, aspirando su perfume o escuchando los sonidos naturales del viento y del agua, el zumbido de los insectos y el canto de los pájaros.

El diseño de los jardines, arte antiguo esencialmente vinculado al nivel cultural de las civilizaciones, no es solamente un soporte más o menos utilitario para la ordenación de plantas, caminos, mobiliario, etc. La jardinería y el paisajismo, con sus técnicas de ingeniería y arquitectónicas, sus técnicas biológicas y sus búsquedas artísticas, aportan un tipo específico de disfrute estético para el que ya hace tiempo las poblaciones urbanas están capacitadas por más que no se haya cuidado suficientemente su formación al respecto.

Por otra parte, el cuidado y sostenimiento de la naturaleza en las grandes ciudades hace tiempo que concita todo un conjunto de tareas que dan trabajo digno a buen número de personas de muy diversos tipos y niveles de preparación profesional, número que se incrementará notablemente a poco que se incremente la atención pública y privada hacia esta realidad ambiental y social.

El tratamiento de la naturaleza urbana (o urbanizada) como bien cultural puede también abrir perspectivas nuevas a la consideración turística de nuestra ciudad. No sólo en el sentido superficial de “oferta turística” sino en el sentido de un profundo enraizamiento de la vivencia ciudadana cotidiana en un medio bello, amable, positivamente promotor de la felicidad.  Nuestras calles y plazas son espacios capaces de proporcionar mucho bienestar si su tratamiento y uso es el correcto, teniendo en cuenta la realidad de la circulación rodada y de la contaminación acústica y ambiental.

Una ciudad contemporánea no tiene por qué someterse sin más a las efectos más negativos de la concentración de la población y de la actividad industrial o comercial. Rendirse a ellos resulta una insensata renuncia de los derechos elementales de una ciudadanía cuyo nivel de vida no puede medirse ya solamente con parámetros estrictamente económicos. Zaragoza, lo sabemos y se lo escuchamos a muchos visitantes, es una ciudad “amable”, “cómoda” para vivir y desplazarse por ella. Esa es la base firme sobre la que puede elevarse la calidad de vida en ella, haciendo que también sea una ciudad bella en cuanto a su componente natural, cuya más aparente característica “ornamental” no debería ocultar su potencial vivificador, higiénico, pero también civilizador, cultural.

Nada tendría que obligar a la ciudadanía a desplazarse kilómetros hacia el extrarradio, hacia otros valles y montes, hacia las comarcas más pintorescas de nuestra región o de otras para poder disfrutar de un reposo reconfortante en un ambiente natural. Animales, vegetales y minerales, la naturaleza presente en la ciudad, no es un mero simulacro de naturaleza. En la ciudad, el viento y la lluvia, las nubes, los truenos y los relámpagos son reales, el nacimiento y esplendor de las flores es real, y la caída de las hojas de los árboles es real. No son remedos ni sustitutos de la realidad natural presente en la naturaleza silvestre. Por otra parte, no pocas zonas de la naturaleza exterior a las poblaciones tradicionales también han sufrido un proceso sobresaturado de urbanización por el que tampoco en esos casos puede alegarse una diferencia sustancial en su vivencia.

Convivir con todos estos elementos naturales sin tenerlos naturalmente en cuenta o tomarlos sólo como factor de incomodidad en el medio urbano puede, sin embargo, condenar a la ciudadanía a una vivencia cotidiana de la ciudad en la que apenas cuenten sino los amplios recintos oficiales, industriales, culturales, comerciales o recreativos, una vivencia mayoritariamente encerrada entre cuatro paredes aireadas mediante climatizadores mecánicos, iluminadas siempre con luz eléctrica y adornadas con multitud de artificiales formas vegetales de tela y de plástico.

El amor a la naturaleza, la sensibilidad ecologista, el respeto hacia la identidad propia de los seres naturales, el aprovechamiento de las propiedades medicinales de las plantas, etc., debería recordarnos constantemente que en las ciudades también convivimos con la naturaleza. El explicable anhelo de “vuelta a la naturaleza” que experimentan  las poblaciones del mundo industrializado no tiene por qué identificarse con la urgente huida de fin de semana en busca de un paraíso perdido en los montes. También la ciudad es un ámbito de disfrute de la naturaleza.

4. HORIZONTE 2008

En la perspectiva de la futura realización en Zaragoza de la Exposición Internacional del 2008, nuestro primer parque puede considerarse un precedente zaragozano de una iniciativa de transformación urbana basada en el aprovechamiento responsable del agua y sus recursos.

La celebración del setenta y cinco aniversario del parque Primo de Rivera puede vincularse perfectamente a la preparación y realización de la Exposición Internacional. El debate sobre el tratamiento del agua y de la naturaleza en una gran ciudad contemporánea y la socialización de su disfrute responsable, puede aportar elementos concretos de acuerdo ciudadano en la previsión del futuro urbanístico de Zaragoza.

El planteamiento de la Exposición Internacional de 2008 reconoce y reivindica la vivificadora aportación del agua en la espiral civilizatoria que supera (sin destruirla) la fase meramente productiva (agraria e industrial) de su utilización para dar curso a nuevas formas de realización de la belleza urbana, para promocionar nuevas formas de ocio en la ciudad, para hacer del agua también un elemento vivificante de nuestra cultura y, en definitiva, de nuestro progreso. Vincular ambos acontecimientos, en su doble vertiente de estudio del pasado y diseño del futuro, ofrece de un lado la oportunidad de elevar el punto de mira a la hora de diseñar el tratamiento futuro del parque Primo de Rivera (y en general, de nuestros parques, jardines y zonas verdes) y, de otro lado, la oportunidad de reparar en la historia de las experiencias urbanísticas zaragozanas a la hora de establecer la nueva experiencia de la Expo.

Un 75 aniversario del parque Primo de Rivera inscrito en el horizonte de las celebraciones y decisiones sobre la Zaragoza del 2008 posibilita dotar a esta celebración del suficiente tiempo y reposo necesarios para pensar, imaginar, idear, proponer, debatir y  acordar. Los cuatro años que quedan para la inauguración de la Expo van a ser años de reflexión e innovación urbanística. Insertar en el ámbito de las actuaciones de la Expo debates públicos sobre la temática de la naturaleza en la ciudad y concretamente sobre el tratamiento y usos de nuestro primer parque asegurará una visión de conjunto gracias a la cual la mirada sobre cada cuestión particular se beneficiará de la visión de conjunto que sobre Zaragoza ya está lanzando la Expo.

Actualizar un parque que cumple setenta y cinco años bien merece cuatro años de trabajos diversos, sobre todo si durante ellos las acciones relativas al medio ambiente natural en Zaragoza se coordinan y se complementan. No se trata de una celebración superficial, flor de un día entre las noticias, excusa de un acto momentáneo para la foto oficial, ni  mera actividad de propaganda inmediata. Tampoco se trata de la programación de unas cuantas actividades lúdicas y recreativas indiscriminadas a cuenta de un aniversario en el que el principal protagonista, el parque Primo de Rivera se deje de lado en aras de una festividad inconsciente.

Se trata de celebrar de verdad, de trabajar en serio. Y eso exige contemplar la situación del parque Primo de Rivera teniendo en cuenta el conjunto de parques, jardines y zonas verdes de la ciudad (incluidos el vedado de Peñaflor y los pinares de Venecia, las riberas de nuestros ríos y los galachos del Ebro, etc.),  la realidad total del arbolado y del adorno floral urbano y de las actitudes generalizadas de la ciudadanía zaragozana hacia los bienes públicos. Una visión de conjunto que permita encontrar soluciones complementarias a los diversos problemas que surgen en la vivencia de la naturaleza en la ciudad.

Vincular la celebración del 75 aniversario del parque Primo de Rivera a la organización y celebración de la Exposición Internacional de Zaragoza en 2008 es la forma de enlazar el pasado con el futuro mediante un compromiso concreto con las posibilidades y las necesidades del presente. Repensar el Parque, reafirmar su identidad ciudadana, mejorarlo y defenderlo va a requerir ese tipo de esfuerzo que requieren todos los planes que realmente pretenden transformar la realidad y construir el futuro.

5. CELEBRACIÓN PARTICIPATIVA

El Ayuntamiento de Zaragoza ha trabajado durante meses en la preparación de la celebración del 75 aniversario del parque Primo de Rivera. Varias concejalías han sumado sus fuerzas en la definición de los objetivos principales de esta celebración y en la búsqueda de medios, actuaciones e intervenciones que permitan alcanzarlos.

A modo de avance,  puede anunciarse ya que:

El inicio de las celebraciones comenzará el próximo domingo 20 de junio, con un homenaje a Xavier Winthuysen. Una placa conmemorativa recordará para siempre su decisiva participación en el diseño de nuestro parque y con su nombre se conocerá en el futuro el “Jardín Botánico Xavier Winthuysen”, del que se editará una Guía.

Diversas actividades lúdicas y culturales se han programado especialmente para los meses de verano en distintos lugares del parque.

En otoño comenzarán a difundirse publicaciones sobre el parque y otros temas medioambientales. La primera publicación será un Libro-Disco realizado por la editorial Prames.

Se anunciarán convenientemente la realización de actividades sobre jardinería, paisajismo, flora y adorno floral.

A mediados del mes de diciembre tendrá lugar en Zaragoza la Primera Sesión del I Congreso Internacional “Naturaleza y Ciudad en el siglo XXI”.  El Congreso tendrá tres sesiones bianuales: en 2004, en 2006 y 2008.

A lo largo de los años 2004 a 2008 se realizarán intervenciones de mejora en el parque, de las que se dará cumplida noticia. Y se irá desarrollando todo un amplio programa de actividades vinculadas al estudio y disfrute de nuestro primer parque. Actividades tan diversas como la instauración de un concurso anual de pintura al aire libre en el parqueo la organización de visitas guiadas por especialistas en jardinería, botánica, entomología, avifauna, etc.

La clave de estas celebraciones, no obstante, radica en la participación activa de la ciudadanía en ellas. Se trata de comprometer al Ayuntamiento de Zaragoza y a la ciudadanía zaragozana en una tarea de revisión global del planteamiento, ordenamiento y disfrute de la Naturaleza en la ciudad. Y para ello será preciso el concurso de todas las personas que quieran aportar algo.

Es preciso promover y organizar la intervención individual o colectiva de historiadores, estudiosos, profesores, profesionales diversos: ingenieros, arquitectos, biólogos, jardineros, viveristas, sociólogos, urbanistas, políticos, sindicalistas, asociaciones de barrio, asociaciones culturales, naturalistas, recreativas y deportivas, empresas del sector y empresariado local en general.

Que dichas celebraciones gocen del rango de “celebraciones oficiales” no quiere decir que queden recluidas en el ámbito de una minoría política o “gestora”. Serán oficiales porque gozarán del respaldo institucional necesario. Pero han de ser celebraciones ampliamente populares y participativas para que vivifiquen la realidad social y ofrezcan una base sólida a las iniciativas de futuro que se propongan.


Xavier Winthuysen, el pintor que amaba los jardines

Xavier de Winthuysen nació en Sevilla en 1874 en el seno de una rica familia de origen holandés establecida a finales del siglo XVII en El Puerto de Santa María (Cádiz). Su temprana vocación artística le llevó a la pintura. Su primer cuadro de éxito tenía como motivo el jardín de los Cepero, sus vecinos, en el que su vivencia de la belleza natural vinculó para siempre su amor a la pintura con su amor a la naturaleza.

Tras años de aprendizaje en Sevilla, donde además de dibujo y pintura estudió las técnicas de la decoración cerámica, viajó a Paris para ampliar conocimientos. En 1902 un crítico escribió de sus pinturas: “Si Rusiñol idealiza los jardines, Winthuysen los humaniza”. La comparación le honraba enormemente, pues Rusiñol era en aquellas fechas el más celebrado pintor de jardines de España. 

Trasladado a Madrid, su amistad con el poeta Juan Ramón Jiménez le abrió las puertas de la Institución Libre de Enseñanza. Los hermanos Machado, Valle Inclán, y otros literatos, estudiosos y artistas serían su nuevo público y su nuevo ambiente vital en unos años de cierta penuria personal, pues su matrimonio por amor con Salud Sánchez Mejías le había generado cierto aislamiento social y dificultades económicas.

En 1919, gracias al apoyo del pintor Sorolla, consiguió una pensión de la Junta de Ampliación de Estudios para estudiar los jardines históricos de España. Además se le encargó la restauración de los jardines del Palacete de la Moncloa, que sería su primera obra importante de jardinería.

Entre 1920 y 1930 Winthuysen se dedicaría de lleno a la jardinería artística, publicando artículos sobre los jardines y el arbolado de España. Precisamente cuando viajaba por todo el país recopilando documentación vino a Zaragoza y después de visitar, invitado por el concejal Vicente Galbe Plazuelos, el Cabezo Buena Vista pronunció su célebre disertación el 23 de diciembre de 1924 en el Casino Mercantil presentado por el entonces alcalde de la ciudad Juan de Fabián. De aquella conferencia nació la esencia del diseño del parque Primo de Rivera.

De esa época data su obra fundamental, “Jardines clásicos de España”. A partir de entonces su actividad como jardinero diseñador se amplió enormemente y la Dirección General de Bellas Artes le encomendó la creación del Patronato de Jardines Históricos de España. Fue nombrado Inspector General y logró que los jardines históricos fuesen declarados de interés nacional. Promueve la creación de una Escuela Nacional de Jardinería.

Tras la guerra civil, el marqués de Lozoya reorganizó el Patronato de Jardines Históricos y Winthuysen continuó su labor como Inspector General y vocal. Hasta su fallecimiento vivió en Madrid, Ibiza y Barcelona, donde falleció el 2 de septiembre de 1956.

                                                                                                                                

ICONOGRAFÍA DE LA PUERTA DE LA BENDICIÓN. IGLESIA DE SAN MIGUEL. TARAZONA

            CONSUELO Y RESIGNACIÓN
            Iconografía de la Puerta de la Bendición

     En la Puerta de la Bendición, pese a su aparente sencillez, se encuentran talladas muy diversas figuras: vegetales, animales, humanas y fantásticas. Desgraciadamente, su estado de conservación no es bueno y la mayoría de ellas apenas pueden distinguirse. Sólo con esfuerzo podemos percibir sus formas y reconocer su identidad. No obstante, intentaremos dar una idea, siquiera aproximada, de estas figuras. 
      Descripción iconográfica.
     1.1: Capiteles: lateral izquierdo (para el observador).
     En los seis capiteles que flanquean la puerta hay esculpidas formas vegetales sin especial identificación botánica. Se trata de lo que Jalabert denominó flore generalisée (flora indeterminada),[1] tallas con la forma o el trazo general de las hojas naturales, que daría lugar a los crochets, adornos más o menos alusivos a la forma de diversas hojas realmente existentes en la naturaleza.
    Este tipo de adorno apareció y se difundió en el primer arte gótico de la segunda mitad del siglo XII, por lo que su presencia en esta puerta puede calificarse de arqueológica. En las fechas de su realización era más común la realización de una representación naturalista, más o menos estilizada, de la flora. Esta involución artística nace en las última época del arte gótico y acompaña los avances del arte renacentista, en  el que se profundizará el alejamiento de los modelos naturales y se generalizará la geometrización.

     A caballo entre dos épocas, las formas de origen vegetal que vemos en esta puerta sugieren más que reproducen y si por algo destacan no es por su fidelidad a ningún modelo de la naturaleza sino por su magnífica cualidad ornamental: bultos y vanos, distribuidos de acuerdo a una simetría sencilla pero eficaz. Esto se ha conseguido en estos capiteles con figuras de tipo crochet y con hojas de cinco lóbulos radiales, en ambos casos meramente ornamentales, sin ninguna vinculación directa con la realidad vegetal. Con todo, en el lado izquierdo, el tercer capitel, inmediato al vano de la puerta presenta unas formas que sí podemos identificar con cierta seguridad: se trata flores cuya disposición formal recuerda mucho las corolas de las flores de la correhuela mayor (Convolvulus sepium), trepadora muy frecuente en nuestros campos y bosques cuyas grandes flores blancas o rosadas destacan entre el verdor.

     Precisamente en este capitel se esculpieron siete pájaros (tres parejas y uno desparejado), cuya presencia entre estas flores remite a una escena frecuente en la realidad. Son pájaros (éstos, desgraciadamente descabezados) que bien podrían estar representando a ese tipo de pájaro pequeño que en esta zona llaman “pegüeteros”: ruiseñores, jilgueros, etc., que se esconden a menudo en los matorrales y entre tallos y hojas de las enredaderas y trepadoras. Se trata, por tanto, del único capitel adornado con un motivo claramente naturalista. Volveremos más adelante a fijar la atención en este capitel.

     Sobre los capiteles de este lateral izquierdo, en el friso, entre esas hojas de cinco lóbulos que hemos mencionado, puede verse, de izquierda a derecha, el rastro de lo que queda de dos figuras muy afectadas por la erosión. Sobre el segundo capitel, una figura humana de la que tan sólo vemos más o menos claramente los brazos, extendidos hacia ambos lados del busto; sobre el tercer capitel, sobre las figuras de los pájaros, asoma una figura humana, de la que se distingue la cabeza (que por la forma de su peinado parece ser de un varón) y el brazo izquierdo en cuya mano parece llevar una piedra de regular tamaño.

     1.2 Capiteles: lateral derecho.
     En el primer capitel del lado derecho, inmediato al vano de la puerta, hay talladas figuras, en este caso humanas. De forma que éste y el del lado izquierdo inmediato al vano de la puerta resultan los más decorados, realzando así la decoración de la entrada con cierta simetría ornamental.

     Se trata de la única escena esculpida en esta portada. En ella puede verse, a la izquierda, una venerable figura masculina sentada, los pliegues de cuya túnica se tallaron con especial esmero; en el centro, dos figuras masculinas, rústicamente vestidas, en actitud de avanzar sosteniendo entre ambos el cuerpo de lo que podría ser un animal del tamaño de una oveja; finalmente, a la derecha, una figura femenina erguida en pie, cuya túnica también se talló con detalle. La elegancia de las figuras laterales contrasta con la rusticidad de las centrales. A estas cuatro figuras les faltan sus cabezas, y a la mujer también su brazo derecho. El varón sentado levanta un brazo hacia las figuras centrales. La mujer recoge con su mano izquierda su propia vestimenta. 
    En el friso de este lateral derecho hay muchas más figuras que en el del lado izquierdo. Hasta ocho, creemos distinguir. Las describimos de izquierda a derecha.

     Inmediato al vano de la puerta, los cuartos traseros de una bestia de pezuña (¿ungulada?). Su ubicación permite sospechar que la parte delantera fue destruida en algún momento. Parece pertenecer a una figura negativa, del tipo de los centauros, faunos o demonios.
Lo que a primera vista es una cabeza humana coronada, observada con atención revela ser una redonda figura de tres caras formada por yuxtaposición de cuatro ojos y tres narices.
Una cabeza humana masculina, muy deteriorada.
4, 5 y 6. Tres águilas posadas, erguidas, con las alas desplegadas.
Una figura muy deteriorada por la erosión, en cuyo rastro creemos distinguir la forma de un dragón o basilisco.
Una figura tan deteriorada que no permite su identificación.

     1.3 Arquivolta:
     En la arquivolta superior de la portada se tallaron catorce figuras, simétricamente ordenadas respecto al vértice, siete a cada lado. Cada una de ellas apoya en una pequeña peana que hace funciones de doselete sobre la figura situada debajo. Su realización, en lo que puede observarse, es esmerada, tanto en lo que respecta a sus rasgos faciales, sus manos, etc., como a lo relativo a sus vestiduras, tratadas con detalle.
El estado actual de deterioro de algunas de estas figuras dificulta su completa identificación, pero creemos poder identificar a la mayoría, atendiendo a algunos rasgos evidentes en algunas, o a los instrumentos que portan, etc. Serían así, de izquierda a derecha (del observador):
(Inidentificable)
Santo monje
Santa Catalina
Santa mártir  portando palma
Santa María Magdalena
San Francisco de Asís
(Inidentificable)
(Inidentificable)
San Pablo
Santo diácono
San Bartolomé
Santa Tecla
Santo obispo
(Inidentificable)


     Propuesta de interpretación iconológica.

     La clave interpretativa de esta portada está en el capitel primero del lateral derecho, en el que se talló la escena compuesta con las cuatro figuras descritas más arriba. Se trataría de la representación de una escena bíblica, concretamente de la escena que se narra en los versículos 13 a 22 del Libro de Job, que transcribimos a continuación.
     Un día que los hijos e hijas de Job comían y bebían en casa del hermano mayor, llegó un mensajero a casa de Job y le dijo:
Estaban los bueyes arando y las burras pastando a su lado cuando cayeron sobre ellos unos sabeos, apuñalaron a los mozos y se llevaron el ganado. Sólo yo pude escapar para contártelo.
No había acabado de hablar, cuando llegó otro y dijo:
Ha caído un rayo del cielo que ha quemado y consumido tus ovejas y pastores. Sólo yo pude escapar para contártelo.
No había acabado de hablar, cuando llegó otro y dijo:
Una banda de caldeos, dividiéndose en tres grupos, se echó sobre los camellos y se los llevó y apuñaló a los mozos. Sólo yo pude escapar para contártelo.
No había acabado de hablar, cuando llegó otro y dijo:
Estaban tus hijos y tus hijas comiendo y bebiendo en casa del hermano mayor, cuando un huracán cruzó el desierto y embistió por los cuatro costados la casa, que se derrumbó y los mató. Sólo yo pude escapar para contártelo.
Entonces Job se levantó, se rasgó el manto, se rapó la cabeza, se echó por tierra y dijo:
Desnudo salí del vientre de mi madre
y desnudo volveré a él.
El Señor me lo dio, el Señor me lo quitó:
¡bendito sea el nombre del Señor!
A pesar de todo, Job no pecó ni acusó a Dios de desatino.
     En este capitel se estaría narrando la recepción por Job de las tremendas noticias de las calamidades, de forma semejante a como lo vemos representado en algunos grabados: aquí, Job, sentado recibe junto con su mujer la noticia de dos mensajeros, que muestran un animal muerto como prueba de los desastres. La presencia de la mujer de Job en esta escena no es frecuente, pero sí obligada en la representación de la que se narra a continuación (Job, 2, 1-10): herido Job  con llagas malignas, desde la planta del pie a la coronilla por Satán, que pretende así que el varón maldiga a Dios, su mujer le increpa:
     ¿Todavía persistes en tu honradez? Maldice a Dios y muérete.
A lo que Job responde:
Hablas como una necia. Si aceptamos de Dios los bienes, ¿no vamos a aceptar los males?
     Refuerza esta interpretación la presencia aquí de otras figuras, muy especialmente la triple cabeza, que además nos parece que relaciona esta portada con el claustro gótico del cercano monasterio de Veruela en el cuyas esculturas también se alude al Libro de Job[1]. Como allí, los tres amigos de Job están representados por tres cabezas unidas y, como allí, Dios observa el relato que desarrolla el libro (aquí, desgraciadamente, su cabeza, en el friso sobre este capitel de la escena –figura 3- está destrozada). Incluso el capitel del lado izquierdo en el que se esculpieron flores y pájaros mantiene una evidente relación con uno de los capiteles del claustro de Veruela, en el que se tallaron cuatro parejas de pájaros entre hojas de hiedra[1].
     Las relaciones señaladas más arriba permiten sugerir una relación más allá de lo formal entre el claustro gótico de Veruela y esta Puerta de la bendición: quienes concibieron ésta pudieron haberse inspirado en aquél, acabado de realizar unos cincuenta años antes, incorporando algunos de sus rasgos distintivos y, sobre todo, asumiendo una propuesta iconológica vinculada a las enseñanzas del Libro de Job.
     Si la presencia de las dos figuras asomadas sobre el capitel de los  pájaros es, como parece, una presencia humana que entraña peligro para las avecillas (como suele suceder, máxime si uno de ellos lleva en la mano una piedra), podemos deducir un mensaje moral, sobre los peligros que acechan al alma humana (representada muy comúnmente en figura de ave). Mensaje que se concretaría con más fuerza en relación con lo representado en el capital de la escena del libro de Job: así como Job afrontó la tentación de la desesperación ante las desgracias, así pueden y deben afrontarse otras tentaciones, especialmente las relacionadas con las tragedias de la vida.
     Así pues, se nos está insistiendo en la misma idea, con diferentes recursos, desde ambos lados de esta puerta: acudiendo al repertorio bíblico y recurriendo a la observación de la  naturaleza, como haría el mismo Jesucristo con sus alusiones al Antiguo Testamento y con sus parábolas, dirigiéndose a distintos receptores de su Palabra.


     Liturgia, doctrina  y memoria popular
     La Puerta de la Bendición  de la parroquia de San Miguel estuvo vinculada, desde sus orígenes, a actos litúrgicos relacionados con la muerte: los cortejos fúnebres de todos los vecinos de Tarazona, a su paso hacia el cementerio, se detenían en la calle de la Bendición, frente a esta Puerta, para que el sacerdote bendijera los restos mortales del difunto[1].
     Este uso litúrgico evidencia la antigua conexión establecida entre el Libro de Job y los ritos funerarios en la Iglesia católica desde la más remota Edad Media hasta nuestros días: en el Oficio de Difuntos puede leerse una selección de textos del Libro de Job cuya meditación iría encaminada a promover y procurar la aceptación de las desgracias, en especial la muerte de los seres queridos, como aquel varón aceptó la muerte de todos sus hijos, la destrucción completa de sus bienes, la enfermedad lacerante de su cuerpo e incluso la sospecha (en sus amigos) sobre su propia integridad moral[1].
     Relación entre la exégesis bíblica y la liturgia establecida muy pronto y sellada para siempre desde que el Papa San Gregorio Magno dedicara a la meditación sobre el Libro de Job la que sería su obra escrita más extensa (treinta y cinco libros) e importante, de decisiva influencia en el mundo cristiano medieval: las Moralia in Job, publicadas entre los años 579 y 585, difundidas inmediatamente, leídas (más que la propia Biblia), copiadas y citadas en todo el mundo cristiano, especialmente en los monasterios. La inmensa influencia de esta obra tendría en su época efectos comparables a los que tuvieron las obras de San Pablo en la configuración del primer cristianismo, constituyéndose en guía intelectual y moral de la cristiandad[1].
     No sería Gregorio Magno, por otra parte, el primero ni el último comentarista del Libro de Job, pero sí quien marcó toda una línea de lectura y estableció las bases de una aproximación psicológica y moralista a la reflexión sobre los textos sagrados: Job, figura alegórica de Jesucristo y de su Iglesia, daría ocasión a Gregorio Magno para mostrar a su auditorio cómo la fe debe manifestarse en las obras.
     Entre los muchos comentaristas del Libro de Job estuvo otro Papa, el aragonés Benedicto XIII, el Papa Luna (1394-1417), tan especialmente vinculado a nuestras tierras durante toda su vida y muy notablemente en todo lo relativo a la promoción del arte y enaltecimiento de los templos de Aragón[1]. Don Pedro Martínez de Luna escribiría, ya en medio de sus tribulaciones, sus Consolaciones de la vida humana, entroncado con la temática del libro de Job, que cita copiosamente. En otro se intentó hacer ver la vinculación de Benedicto XIII y de la familia de los Luna con el monasterio de Veruela[1].
     Es interesante reparar en que la antigua canción Oración por las ánimas, recordada por Avelina Huerta, hoy casi centenaria rezadora del Barrio de San Miguel de Tarazona, contiene, en su cuarteta final, una mención del Papa Gregorio Magno:
Viva el Papa San Gregorio
Y la Virgen del Carmelo,
Que las lleve a descansar
(y) a la eternidad del cielo.

     Esta mención, en una canción sobre los lamentos de las ánimas, podría estar dando cuenta de una tradicional vinculación –conocida antaño por la feligresía- entre la reflexión sobre la muerte y la figura de Job, establecida precisamente por medio del mayor comentarista cristiano del Libro de Job, San Gregorio Magno. La memoria popular nos estaría dando una pista atendible sobre los orígenes de una relación, hace tiempo olvidada, entre la liturgia de difuntos, el Libro de Job y las figuras esculpidas en los capiteles de la Puerta de la bendición de la iglesia de San Miguel [1].

     Puerta de la Bendición: acaso nombre dado a esta puerta en alusión tanto a las bendiciones que exclamó el santo Job ante sus desgracias como a las bendiciones de los difuntos que tradicionalmente tenía lugar en esa puerta de la iglesia de San Miguel al paso de los cortejos fúnebres a su paso frente a ella por la calle llamada, por las mismas razones, calle de la bendición. La iconografía de la Puerta y el uso litúrgico del lugar tenían, así, una evidente relación conceptual y una misma identidad moral.

1] JALABERT, D.: La flore sculptée des monuments du Moyen Âge en France,  Paris,  1965, pp.96-99.
[1] DELGADO, Javier: Job en Veruela (Esculturas del claustro gótico del monasterio de veruela), Zaragoza, 1996.
[1] DELGADO, Javier: Job..., pp. 75-76.
[1] HUERTA MENSAT, Avelina, comunicación oral en entrevista del 23 de agosto de 2002.
[1] HARPER, John: The forms and orders of Western Liturgy from the Tenth to the Eigteenth Century, Clarendon, 1995. Para nuestros días, puede consultarse el ritual propio de los oficios de difuntos.
[1] Una excelente edición de la obra de Gregorio Magno en la edición bilingüe
GRÉGOIRE LE GRAND: Morales sur Job, introduction et notes de Robert GILLET, traduction de André GAUDEMARIS, Paris, Les Éditions du Cerf, 1975-1989.
[1]LACARRA DUCAY, María Carmen: “Benedicto XIII y el arte”, en  BENEDICTO XIII, el  papa  Luna: Muestra de documentación histórica aragonesa en conmemoración del Sexto Centenario de la elección papal de Don Pedro Martínez de Luna (Aviñón, 28 septiembre 1394), Zaragoza, 1994, pp. 101-124.
[1] DELGADO, Javier: Job ..., pp. 61-64.
[1] BAJÉN, Luis Miguel y GROS, Mario: La tradición oral del Moncayo, Zaragoza, Prames, 1999, p. 87.

ÁRBOLES EN ZARAGOZA: EL CASTAÑO DE INDIAS

ÁRBOLES EN ZARAGOZA: EL CASTAÑO DE INDIAS

CASTAÑO DE INDIAS: ELEGANCIA NATURAL

publicado en Qué!diario Zaragoza e miércoles 05/04/06

El castaño de Indias (Aesculus hippocastanum) no es ni castaño ni proviene de las Indias. Es originario de de Grecia pero la semejanza de sus frutos con los del castaño se impuso. Hippocastanum se refiere a que sus frutos se daban a comer a los caballos viejos para aliviarles la tos y el asma. Todo en él es majestuoso y ornamental: su alto tronco y su amplia copa, sus amplias hojas, sus erguidos conos de olorosas flores blancas, sus redondos y espinosos frutos. De su corteza se extraen sustancias astringentes y tintóreas. También son útiles sus flores, recomendables contra el reumatismo. Y sus semillas, muy eficaces para el tratamiento de las hemorroides. Los jóvenes ejemplares de la plaza de Aragón da gusto verlos. Junto a las murallas romanas hay un buen grupo de jóvenes ejemplares.